Querencias dominicanas
Inhabilitados L¨®pez y Capriles, la oposici¨®n venezolana hubiera debido participar en las elecciones generales, teniendo en cuenta que el hartazgo y la pericia bolivariana acrecent¨¢ndolo eran bazas suficientes
Las fechas importan para ponderar la participaci¨®n de la oposici¨®n venezolana en las regionales de noviembre, y la temeridad de febrero de 2018, al levantarse de la mesa de negociaciones de Rep¨²blica Dominicana despu¨¦s de haber consensuado con el chavismo un borrador de garant¨ªas electorales que inclu¨ªa la fecha de las presidenciales y el reconocimiento de sus resultados. El abrupto abandono de las re...
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Las fechas importan para ponderar la participaci¨®n de la oposici¨®n venezolana en las regionales de noviembre, y la temeridad de febrero de 2018, al levantarse de la mesa de negociaciones de Rep¨²blica Dominicana despu¨¦s de haber consensuado con el chavismo un borrador de garant¨ªas electorales que inclu¨ªa la fecha de las presidenciales y el reconocimiento de sus resultados. El abrupto abandono de las reuniones, arbitradas por Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, respond¨ªa a las incitaciones belicistas de Trump durante el verano de 2017 y a la incapacidad del movimiento antigubernamental de presentar un candidato unitario, que probablemente hubiera ganado pese al ventajismo oficial, la precariedad y trampas de las garant¨ªas y los dirigentes en la c¨¢rcel o en el exilio.
Se opt¨® por la soluci¨®n imperial, subestimando la capacidad del Miraflores para convivir con la ruina econ¨®mica, gracias a la ayuda material y coercitiva de Rusia, Ir¨¢n, Turqu¨ªa y China, y la emulaci¨®n del numantinismo cubano. La f¨®rmula que disimular¨ªa la desuni¨®n opositora y la salida por peteneras de la dominicana fue renunciar a las elecciones descalificando su marco regulatorio. La invasi¨®n sugerida por la Casa Blanca como revulsivo de una insurrecci¨®n civil y castrense no se produjo y sumi¨® en la frustraci¨®n a sus partidarios. ¡°Gran desenga?o, gran lecci¨®n, aunque con da?o¡± (An¨®nimo). Maduro se hizo con la presidencia y el alias de El Usurpador, que honra cuando arrebat¨® las instituciones y atropella los derechos humanos. El expresidente uruguayo Jos¨¦ Mujica descifr¨® el problema: a Estados Unidos y a Maduro les importa un carajo la democracia.
Juan Guaid¨®, prefabricado por el entorno de Trump y la facci¨®n de L¨®pez, perdi¨® espacio, recobrado parcialmente por Capriles, sometido a la obediencia o la irrelevancia cuando el vicario fue nombrado presidente interino en plaza p¨²blica en 2019. El chavismo participa en las negociaciones de M¨¦xico sin apremios insalvables ni marines en la costa, con Nicolasito, primog¨¦nito de Maduro, en la delegaci¨®n para que vaya aprendiendo.
La profundizaci¨®n de los avales de Rep¨²blica Dominicana hubiera ahorrado tiempo y desgarros familiares en un pa¨ªs gripado por la polarizaci¨®n ideol¨®gica, las sanciones norteamericanas y un r¨¦gimen al¨¦rgico a la alternancia, responsable de la emigraci¨®n de cinco millones de compatriotas, eventuales votantes de la oposici¨®n. Hace tres a?os, el chavismo prometi¨® un equitativo acceso a los medios de comunicaci¨®n y someter las presidenciales a las auditor¨ªas t¨¦cnicas y est¨¢ndares de las legislativas de 2015, ganadas por la oposici¨®n. La supervisi¨®n afectar¨ªa a todos los componentes del sistema, con protocolos y presencia de la observaci¨®n internacional.
Queda por ver si la ronda de M¨¦xico profundiza los consensos de Santo Domingo. Inhabilitados L¨®pez y Capriles, la coalici¨®n antigubernamental hubiera debido participar en las generales con fulano de tal, teniendo en cuenta que el hartazgo y la pericia bolivariana acrecent¨¢ndolo eran bazas suficientes.