Las cifras de la violencia machista
A las pol¨ªticas p¨²blicas contra los cr¨ªmenes de g¨¦nero debe sumarse la respuesta social ante situaciones inaceptables
Las cifras de la tragedia que sacude a la sociedad espa?ola no permiten mirar hacia otro lado: 43 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas en Espa?a en este 2021. A la ¨²ltima, Yolanda, la mat¨® su pareja en su casa de un tiro en la cabeza el 25 de diciembre, d¨ªa de Navidad. Ten¨ªa 25 a?os y dos hijos. Cada caso es ¨²nico y cada vida arrebatada debe comprometer activamente no solo a las mujeres sino tambi¨¦n a los hombres, cuyo esc¨¢nda...
Las cifras de la tragedia que sacude a la sociedad espa?ola no permiten mirar hacia otro lado: 43 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas en Espa?a en este 2021. A la ¨²ltima, Yolanda, la mat¨® su pareja en su casa de un tiro en la cabeza el 25 de diciembre, d¨ªa de Navidad. Ten¨ªa 25 a?os y dos hijos. Cada caso es ¨²nico y cada vida arrebatada debe comprometer activamente no solo a las mujeres sino tambi¨¦n a los hombres, cuyo esc¨¢ndalo ante este goteo lacerante de muertes no siempre se hace audible con la radicalidad y la potencia que la causa exige.
La serie hist¨®rica ha mejorado, sin que haya lugar al optimismo. 2021 cierra como el a?o con menos asesinatos machistas en el seno de la pareja, lejos de las 71 mujeres a las que arrebataron la vida en 2003, cuando comenz¨® la estad¨ªstica oficial. Hablamos de 1.125 mujeres menos. Adem¨¢s, desde que se empez¨® a contabilizar tambi¨¦n a los hijos e hijas menores como v¨ªctimas directas de la violencia de g¨¦nero, han sido asesinados 45 menores y 336 han quedado hu¨¦rfanos. Las cifras resultan insoportables.
Las condiciones para la denuncia siguen siendo insuficientes e ineficaces porque a?o tras a?o se repite un bajo porcentaje. En 2021 apenas hab¨ªa dado la voz de alarma el 20,9% de las asesinadas, una de cada cinco. Muchas mujeres no denuncian porque temen por ellas y por sus hijos, porque no son conscientes del peligro, porque no conf¨ªan en la justicia o porque ignoran ad¨®nde o a qui¨¦n acudir. Las instituciones implicadas en prevenir y conjurar la violencia machista llevan a?os buscando caminos alternativos para llegar hasta ellas antes de que sea demasiado tarde. Esas mujeres acuden al m¨¦dico porque suelen tener dolencias relacionadas con el maltrato, puede que sus hijos tengan alg¨²n comportamiento que llame la atenci¨®n en sus colegios, tienen gente alrededor que puede dar el paso por ellas. El infierno esta vez no son los otros porque de los otros depende en gran medida la llegada del auxilio, de la llamada o de la pista que pueda impedir el mal mayor: el maltrato es un problema oculto, pero no es invisible, ni inaudible ni imperceptible. Un estudio del Instituto Andaluz de la Mujer presentado esta semana estima que seis de cada 10 andaluces conocen en su entorno (familia o amigos) a alguna v¨ªctima de violencia machista. Sin embargo, los datos del Consejo General del Poder Judicial revelan que las denuncias de allegados ni siquiera alcanzan al 2% del total.
La implicaci¨®n de la sociedad es el mecanismo central que puede reducir el impacto de la violencia machista y lanzar el mensaje inequ¨ªvoco de que los maltratadores no tienen ni sitio ni complicidad posibles, como tampoco deben tenerlo las conductas sexistas y machistas que est¨¢n en la base de la violencia contra las mujeres. Por eso son importantes las campa?as y los gestos tanto de particulares como de pol¨ªticos, a pesar del porcentaje de recelosos o negacionistas que asume la extrema derecha: la renovaci¨®n este a?o del Pacto de Estado contra la Violencia de G¨¦nero fue respaldado por todos los partidos de la C¨¢mara, a excepci¨®n de Vox.