El PP responde con ETA

El diagn¨®stico y las nuevas propuestas del presidente del Gobierno en el debate del estado de la naci¨®n no encontraron eco en el principal partido de la oposici¨®n. El PP opt¨® por la impugnaci¨®n de toda la acci¨®n del Gobierno e ignor¨® las medidas planteadas por Pedro S¨¢nchez. En un co...

El diagn¨®stico y las nuevas propuestas del presidente del Gobierno en el debate del estado de la naci¨®n no encontraron eco en el principal partido de la oposici¨®n. El PP opt¨® por la impugnaci¨®n de toda la acci¨®n del Gobierno e ignor¨® las medidas planteadas por Pedro S¨¢nchez. En un contexto de inflaci¨®n desbocada mundial y una reordenaci¨®n del mercado energ¨¦tico global por la guerra de Ucrania, el PP se limit¨® a se?alar que el problema es Pedro S¨¢nchez. El primer debate del estado de la naci¨®n en siete a?os, y en una coyuntura absolutamente extraordinaria, se transform¨® en una sesi¨®n m¨¢s de control al Gobierno.

En el estreno silente de N¨²?ez Feij¨®o ¡ªestaba como senador y no como diputado, no pod¨ªa intervenir¡ª, la portavoz popular, Cuca Gamarra, empez¨® pidiendo un minuto de silencio en memoria de Miguel ?ngel Blanco, asesinado por ETA hace 25 a?os. Su gesto fue secundado por toda la C¨¢mara puesta en pie. Pero no se trataba de provocar un momento de concordia, como se vio cuando Gamarra sigui¨® su discurso extendi¨¦ndose sobre una banda terrorista felizmente desaparecida. La ley de memoria democr¨¢tica, que el Ejecutivo pact¨® con Bildu entre fuertes cr¨ªticas, fue la excusa para comprobar que Feij¨®o sigue la senda de Aznar, Rajoy y Casado en el uso partidista del terrorismo.

Gamarra acus¨® al Gobierno de ser el responsable directo de la inflaci¨®n y de los altos precios de la energ¨ªa. Puso en duda la veracidad de los datos m¨¢s positivos de la econom¨ªa espa?ola ¡ªla evoluci¨®n del PIB, las cifras r¨¦cord de empleo¡ª, repiti¨® la propuesta de bajar impuestos a los hidrocarburos y la electricidad, que est¨¢n entre los m¨¢s bajos de Europa, especialmente tras la reciente bajada del IVA, reclamada precisamente el PP. Es posible que la decisi¨®n de S¨¢nchez de reconocer los problemas de los ciudadanos y la gravedad de la inflaci¨®n descolocara a los populares que hilvanaron una respuesta de manual sin responder a los asuntos clave: el apoyo o la cr¨ªtica a los impuestos a la banca y las el¨¦ctricas y la bater¨ªa de medidas sociales anunciadas.

Se pueden ¡ªse deben¡ª discutir las recetas para afrontar esta ¨¦poca dif¨ªcil. Y esta era otra ocasi¨®n para un debate de altura que no se produjo este martes. Decir que con los impuestos y la inflaci¨®n S¨¢nchez llena ¡°sus arcas¡±, las arcas p¨²blicas, y sugerir que unas elecciones acabar¨¢n con todos los problemas es una caricatura argumental que no aporta nada a quienes temen por sus sueldos e hipotecas. La sesi¨®n evidenci¨® tambi¨¦n que no se atisba soluci¨®n pactada al bloqueo del Consejo General de Poder Judicial y el Tribunal Constitucional que el PP mantiene desde hace m¨¢s de tres a?os. Ese bloqueo es intolerable en una democracia. Este es, sin duda, uno de los asuntos que definen ¡°el estado de la naci¨®n¡±.