Putin ataca Kiev
Los lectores opinan sobre el reciente bombardeo de la capital ucrania, la productividad en el trabajo, la utilidad de pagar impuestos y las deficiencias del transporte p¨²blico
La voladura del puente que une Crimea con Rusia ha sido la excusa de Vlad¨ªmir Putin para bombardear Kiev. Putin ha advertido de una dura respuesta si se producen nuevos ataques a infraestructuras rusas, advertencia que va dirigida tambi¨¦n a los nuevos territorios ocupados que Rusia y...
La voladura del puente que une Crimea con Rusia ha sido la excusa de Vlad¨ªmir Putin para bombardear Kiev. Putin ha advertido de una dura respuesta si se producen nuevos ataques a infraestructuras rusas, advertencia que va dirigida tambi¨¦n a los nuevos territorios ocupados que Rusia ya considera parte de su territorio tras un fraudulento refer¨¦ndum. Putin, que est¨¢ perdiendo en el terreno militar, sabe que donde m¨¢s da?o puede hacer es provocando da?os a la poblaci¨®n civil. Una respuesta cobarde que busca causar el mayor da?o posible entre los m¨¢s inocentes. La guerra ha entrado en una espiral muy peligrosa. Tal y como se est¨¢ desarrollando, con un Putin cada vez m¨¢s acorralado y m¨¢s aislado internacionalmente, no es nada descartable que pueda hacer uso de armas nucleares para detener los avances de las tropas ucranias. En este escenario, falta por ver cu¨¢l ser¨ªa la respuesta de Occidente al empleo de armas at¨®micas por parte de Rusia y si eso derivar¨ªa en una guerra nuclear a gran escala.
Patricio Simo Gisbert. Valencia
Un acto de rebeld¨ªa
Hoy he cometido una osad¨ªa. He cruzado varias l¨ªneas rojas y he incumplido algunas de mis normas. No ha sido f¨¢cil, pero, pasado el shock, ya puedo admitir cu¨¢l ha sido mi delito: he ignorado todas y cada una de las tareas que ten¨ªa programadas para el d¨ªa. He permitido que mi bandeja de entrada se atragante con varios correos absurdos revestidos de m¨¢xima urgencia. He puesto mi tel¨¦fono en silencio y he dejado a mi port¨¢til sentado en el banquillo. ¡°Hoy no nos toca¡±, le he explicado. Parad¨®jicamente, esta jornada de descanso ha sido m¨¢s productiva que todas las semanas de ajetreo que llevo acumuladas. A veces, no hacer nada es hacer mucho.
Irene Mireia Vera P¨¦rez. Leioa (Bizkaia)
Medicinas e impuestos
Por los medicamentos que tomo a diario para controlar la tensi¨®n, el colesterol, la alergia y la pr¨®stata, la Seguridad Social paga a la industria farmac¨¦utica 117 euros al mes. Sin embargo, la farmacia me da esas medicinas por 11,80 euros. La diferencia sale de mis impuestos y de los que pagan empresas y otros ciudadanos. As¨ª que la matraca que nos dan las derechas asegurando que es mejor bajar impuestos y que el dinero est¨¦ en nuestro bolsillo solo busca en realidad lo contrario: que yo pague 117 euros en vez de 11,80.
Jaime de Nepas. Majadahonda (Madrid)
Un sistema deficiente
Esta ma?ana he tenido que correr para coger el autob¨²s, que se me escapaba. ?La alternativa? Esperar 22 minutos al siguiente en una l¨ªnea por la que supuestamente pasan cada ocho minutos. A mi pesar, esta imagen se repite a diario. No nos cansamos de promover los desplazamientos sostenibles y de luchar por reducir el n¨²mero de coches en las ciudades. Pero cuando la alternativa es un sistema que cada d¨ªa genera m¨¢s quejas es dif¨ªcil abogar por el transporte p¨²blico.
Cl¨¤udia L¨®pez Mill¨¢n. Barcelona