Disfrazada de c¨¢ncer
Muchos tuiteros explotan contra el gesto de la modelo Tamara Gorro de ataviarse con una calva y su mejor sonrisa para pedir m¨¢s investigaci¨®n contra la enfermedad
Las caras del c¨¢ncer son siempre aterradoras, incluso para quienes no lo padecen. Desde el inicio, cuando un m¨¦dico en un fr¨ªo pasillo de urgencias encuentra un segundo para anunciar el diagn¨®stico: no hay nada que hacer, el puntal en tu vida morir¨¢ en seis meses. O cuando el amigo que lleva un tiempo muy cansado llama llorando porque los an¨¢lisis de sangre han salido muy mal: ¡°Quieren mirar qu¨¦ hay¡±. O cuando esa otra amiga sigue esperanzada con el ¨²ltimo tratamiento de quimio imposible para su madre, que no puede m¨¢s. O cuando...
Las caras del c¨¢ncer son siempre aterradoras, incluso para quienes no lo padecen. Desde el inicio, cuando un m¨¦dico en un fr¨ªo pasillo de urgencias encuentra un segundo para anunciar el diagn¨®stico: no hay nada que hacer, el puntal en tu vida morir¨¢ en seis meses. O cuando el amigo que lleva un tiempo muy cansado llama llorando porque los an¨¢lisis de sangre han salido muy mal: ¡°Quieren mirar qu¨¦ hay¡±. O cuando esa otra amiga sigue esperanzada con el ¨²ltimo tratamiento de quimio imposible para su madre, que no puede m¨¢s. O cuando desde la otra punta del pa¨ªs suena el tel¨¦fono de madrugada: ¡°Se ha ido¡±. O cuando hay que apretar mucho los dientes para disimular el desconsuelo del adi¨®s en la ¨²ltima visita a quien fue el alma de la fiesta.
El c¨¢ncer es despiadado. Cuando aparece, arranca todas las capas de cebolla con las que se reviste la vida y deja desnudos y solos ante el miedo a quienes lo sufren. De ah¨ª que muchos tuiteros hayan explotado contra el gesto de la modelo Tamara Gorro de ataviarse con una calva falsa, su mejor sonrisa y un maquillaje de ensue?o para pedir m¨¢s investigaci¨®n que permita acabar con la enfermedad en la gala de los Premios ?dolo.
¡°Solo el hecho de reducir la imagen de los pacientes de c¨¢ncer a una calva ya est¨¢ mal¡±, arranca en un hilo en Twitter Yaiza Cumelles, que conoce bien la enfermedad, ¡°esto solo alimenta la idea de que lo que m¨¢s nos debe importar en el diagn¨®stico es el pelo¡±. ¡°Buena intenci¨®n, mala ejecuci¨®n¡±, considera, por no mencionar alguna fundaci¨®n a la que dirigirse, alguna manera pr¨¢ctica de ayudar. ¡°El c¨¢ncer no necesita visibilidad, no es una enfermedad desconocida para la sociedad y no es una enfermedad minoritaria¡±, insiste. Y lo remacha recordando que ¡°el c¨¢ncer no es bonito, no es un look. El c¨¢ncer es doloroso, da miedo, te destroza cada parte de tu vida¡±.
El reel en Instagram de la modelo Tamara Gorro, explicando el porqu¨¦ de su calva, acumula m¨¢s de 6.000 comentarios. Muchos de ellos de personas enfermas que le reprochan el gesto. ¡°Te invito a una sala de quimioterapia a ver el glamour del que hablas¡±; ¡°tu mirada tiene luz, tu piel, color, y tu cara, cejas y pesta?as perfectas. La imagen de la enferma no es as¨ª¡±; ¡°no est¨¢s calva, est¨¢s disfrazada, no est¨¢s sintiendo los dolores, penas, miedos y tristezas que hay detr¨¢s de la mujer calva de verdad¡±¡ Tambi¨¦n, todo sea dicho, algunas personas le agradecen el gesto.
Hace unos d¨ªas muri¨® la periodista Marta Molina de c¨¢ncer a los 46 a?os. ¡°Periodista cronopia cancerosa¡±, se lee en su biograf¨ªa de Twitter. Desde que le diagnosticaron la enfermedad, ya en un estadio demasiado avanzado, Marta fue explicando c¨®mo se sent¨ªa en su blog Los a?os del Cangrejo. Compart¨ª con ella m¨¢ster en EL PA?S, en esas ¨¦pocas en las que todo va demasiado r¨¢pido. Me qued¨¦ con las ganas de decirle que lo sent¨ªa, que ojal¨¢ se pusiese bien y que qu¨¦ puta mierda, en resumidas cuentas. El pudor exagerado ante el dolor ajeno nos impide a veces tomar la decisi¨®n correcta y mostrar un poco de cari?o a los dem¨¢s, como explica el director Cesc Gay en Truman. Me pregunto qu¨¦ hubiera opinado Marta del gesto de Gorro.
A pesar de todo, la iniciativa de la modelo no ha sido en balde. ¡°Gracias, Tamara, por habernos hecho enfadar tanto como para sacar las pocas fuerzas que tenemos para alzar la voy y quejarnos¡±, ironiza Yaiza Cumelles. Y concluye que no por ello se merece ¡°todo el hate que le est¨¢ cayendo¡±. Ella se ha disculpado: ¡°Me sali¨® mal, lo siento¡±.