Espa?a vota contra Espa?a
Algunos colegas retuercen esto para decir que los ministros espa?oles defienden en Bruselas lo contrario que en Madrid pero hacen lo que debe hacer la Presidencia de turno de la UE
El 29 de junio, la ministra sueca de Medio Ambiente, Romina Pourmokhtari, anunci¨® que los Veintisiete hab¨ªan alcanzado una posici¨®n com¨²n sobre la Directiva europea de Restauraci¨®n de la Naturaleza: ¡°Hay una mayor¨ªa cualificada. Gracias a todos por sus esfuerzos. Hoy hemos dado un paso importante en pro de la naturaleza¡±. Pourmokhtari, a pesar de esas palabras, hab¨ªa votado en contra. ?Por qu¨¦? Porque como encargada de presidir aquella reuni¨®n deb¨ªa defender la postura con m¨¢s probabilidades de provocar un acuerdo, aunque a su Gobierno le pareciera un mal acuerdo y fuera a votar en contra. As¨ª...
El 29 de junio, la ministra sueca de Medio Ambiente, Romina Pourmokhtari, anunci¨® que los Veintisiete hab¨ªan alcanzado una posici¨®n com¨²n sobre la Directiva europea de Restauraci¨®n de la Naturaleza: ¡°Hay una mayor¨ªa cualificada. Gracias a todos por sus esfuerzos. Hoy hemos dado un paso importante en pro de la naturaleza¡±. Pourmokhtari, a pesar de esas palabras, hab¨ªa votado en contra. ?Por qu¨¦? Porque como encargada de presidir aquella reuni¨®n deb¨ªa defender la postura con m¨¢s probabilidades de provocar un acuerdo, aunque a su Gobierno le pareciera un mal acuerdo y fuera a votar en contra. As¨ª debe comportarse un Ejecutivo cuando asume la Presidencia del Consejo de la Uni¨®n Europea. Es un mediador, un forjador de consensos, no el que se aprovecha de su papel para intentar que se apruebe su visi¨®n de los asuntos. Lo que hizo la ministra sueca (27 a?os, conservadora) no fue excepcional, es lo que debe hacer la Presidencia. Pero les voy a contar un cuento porque algunos colegas retuercen esto para decir que los ministros espa?oles defienden en Bruselas lo contrario que en Madrid. Este lunes El Mundo titul¨®: ¡°El Gobierno facilita desde la presidencia espa?ola prorrogar las nucleares en¡ el resto de la UE¡±.
Los hechos dicen que el Gobierno firm¨® en 2019 con las el¨¦ctricas un plan de cierre de los reactores nucleares que de forma escalonada acabar¨¢ con ellos en Espa?a en 2035, al final del per¨ªodo para el que fueron construidos. El Partido Popular, que con Mariano Rajoy se neg¨® a mantener abierta Garo?a (las el¨¦ctricas aceptaban la pr¨®rroga si el Estado pagaba los costes), se uni¨® con Casado y Feij¨®o a Ciudadanos y a Vox para pedir esas pr¨®rrogas. La noticia daba a entender que la vicepresidenta Teresa Ribera defiende unas cosas en Madrid y otras en Bruselas (ya saben, gente sin palabra), donde propone que ¡°se pueda subvencionar la ampliaci¨®n de la vida de las centrales nucleares¡±. El Mundo afeaba a Ribera que ¡°la flexibilidad que exhibe en la UE es enormemente contradictoria con la rigidez del programa electoral socialista¡±. Ribera est¨¢ haciendo lo que debe hacer la Presidencia: mediar, buscar consensos, intentar poner de acuerdo a un pa¨ªs antinuclear como Alemania con otro pronuclear como Francia. Aunque lo que termine por aprobarse no sea exactamente lo que ella querr¨ªa. En aras de una reforma del mercado el¨¦ctrico europeo que los Veintisiete, todos, creen necesaria.