Los r¨¦cords del turismo

Espa?a sigue sumando cifras positivas de turismo, una industria que supone ya el 12,8% del PIB nacional, el mayor valor de la serie hist¨®rica, lo que supone 186.596 millones de euros, seg¨²n la patronal Exceltur. Superada la pandemia, el pa¨ªs recibi¨® el a?o pasado m¨¢s de 84 millones de visitantes extranjeros, seg¨²n datos del Gobierno que el INE har¨¢ oficiales este viernes. Son dos r¨¦cords absolutos al que podr¨ªa sumarse rebasar por vez primera a Francia como el pa¨ªs m¨¢s visitado del mundo. Es precisamente la bonanza de estos n¨²meros la que hace m¨¢s necesario que nunca reflexionar sobre la sostenibilidad de un sector cuyo principal reto pasa por no morir de ¨¦xito.

La propia industria, reunida la semana pasada en Fitur ¡ªuna de las mayores ferias sectoriales del mundo¡ª es consciente de que no se puede medir el triunfo solo por el volumen de visitantes si ello no aporta mayor valor a?adido. En ocasiones, de hecho, redunda en perjuicio de las comunidades locales y de su bienestar. La recuperaci¨®n despu¨¦s de la crisis de la covid ha implicado un creciente descontento social en las zonas m¨¢s saturadas, principalmente playas, localidades costeras y algunas grandes ciudades, con destinos que se encuentran claramente al l¨ªmite de su capacidad. Regular mejor los pisos tur¨ªsticos resulta en este sentido inevitable: el a?o pasado aumentaron en 15.000 las plazas de alquiler de este tipo en las 25 principales urbes espa?olas.

Pedir una mejor regulaci¨®n y ser conscientes de los l¨ªmites no implica alentar la turismofobia, sino contribuir a una mejora del sector que redundar¨¢ en beneficio de todos. La investigaci¨®n que Turespa?a pondr¨¢ en marcha este a?o, con 26.000 encuestas, servir¨¢ para conocer mejor el grado de aceptaci¨®n o rechazo de los espa?oles ante el turismo masivo. Los ciudadanos tienen que formar parte de un ¨¦xito que por su naturaleza es colectivo. Por otro lado, datos como que las visitas se hayan repartido m¨¢s a lo largo del a?o ¡ªun avance hacia una mayor y deseable desestacionalizaci¨®n¡ª o los buenos resultados de algunos de los principales museos, r¨¦cord del Prado incluido, muestran todas las posibilidades que existen.

Algunos expertos proponen medir el turismo por la calidad del empleo que genera. La mano de obra y su formaci¨®n es otro desaf¨ªo de una industria cuyas empresas tienen problemas para encontrar trabajadores en un porcentaje del 42,5%, cifra que llega al 55% en la hosteler¨ªa, seg¨²n un reciente estudio del Banco de Espa?a. Pero ese empleo no puede ser precario y ha de disfrutar de unas condiciones laborales y salariales dignas. Junto a ello, es preciso reducir la temporalidad y la alta rotaci¨®n y doblar el esfuerzo para retener talento.

Espa?a es el cuarto pa¨ªs de la UE en el que el turismo representa un mayor porcentaje de la econom¨ªa. La diversificaci¨®n en un mundo cada vez m¨¢s complejo y tecnol¨®gicamente avanzado resulta imprescindible, pero Espa?a no puede dar la espalda a su principal motor de crecimiento: supuso el 70,8% del aumento de la econom¨ªa nacional el a?o pasado. Las perspectivas son todav¨ªa mejores para este a?o, en el que se podr¨ªan superar por vez primera los 200.000 millones de PIB tur¨ªstico (con un crecimiento del 170,8% este siglo). Pero mantener activo ese motor no debe hacerse a cualquier precio, y fiarlo todo a la cantidad de turistas no es la soluci¨®n.