Llueve mucho, ?pido comida a domicilio?
Una publicaci¨®n en X vuelve a abrir el debate sobre las condiciones laborales de los ¡®riders¡¯
Las lluvias de los ¨²ltimos d¨ªas, las que dejaron sin salir a muchas procesiones de Semana Santa, han hecho crecer en casi 3.000 hect¨®metros c¨²bicos las reservas de agua de la Pen¨ªnsula, algo m¨¢s de la mitad del consumo de las ciudades en todo un a?o. La lluvia no torrencial trae buenas noticias: hoy, los embalses est¨¢n a un 63% de su capacidad y en abril de 2023 estaban a un 52%.
Nunca l...
Reg¨ªstrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PA?S, puedes utilizarla para identificarte
Las lluvias de los ¨²ltimos d¨ªas, las que dejaron sin salir a muchas procesiones de Semana Santa, han hecho crecer en casi 3.000 hect¨®metros c¨²bicos las reservas de agua de la Pen¨ªnsula, algo m¨¢s de la mitad del consumo de las ciudades en todo un a?o. La lluvia no torrencial trae buenas noticias: hoy, los embalses est¨¢n a un 63% de su capacidad y en abril de 2023 estaban a un 52%.
Nunca llueve a gusto de todos, y la demostraci¨®n la hemos podido ver en el patio de X. La cuenta @soycamarero public¨® una imagen de una nota pegada en ¡ªparece¡ª un ascensor donde el autor dec¨ªa que una noche volviendo a casa llov¨ªa tanto que ¡°no se distingu¨ªan los carriles¡±, pero que durante el trayecto hab¨ªa visto a 10 repartidores en bicicleta o en moto, uno de ellos entrando en su portal: ¡°Me dio mucha verg¨¹enza que uno de esos pedidos lo hubiera hecho uno de mis vecinos¡±, remarc¨® en negrita, ¡°tengan empat¨ªa¡±, clamaba, tambi¨¦n en negrita, ¡°no pongan en riesgo la vida de alguien solo porque se les antoje pedir comida a las 23.30¡å, a?ad¨ªa. La nota a sus vecinos culminaba con una invitaci¨®n a ir al supermercado en jornadas as¨ª. El autor recibi¨® la primera respuesta con un recorte pegado sobre su misiva: un vecino le tach¨® de paternalista y le critic¨® por usar el espacio de la comunidad para afear la conducta de los habitantes del edificio y no para algo que afecte directamente a la convivencia del bloque.
La publicaci¨®n de @soycamarero era simple: la foto y la pregunta ¡°?Qu¨¦ opin¨¢is?¡±. Se abri¨® entonces un debate con m¨¢s de 2.000 intervenciones sobre las condiciones laborales de los repartidores, los riders. Algunos tuiteaban posibles soluciones, como Abraham Mendieta: ¡°Es sencillo: una aerol¨ªnea cancela vuelos cuando las condiciones clim¨¢ticas suponen un riesgo evidente. ?Por qu¨¦ no hacerlo en su vertiente cotidiana, cuando el beneficio no supera al peligro?¡±. En la misma l¨ªnea, public¨® otro: ¡°?Debe prohibir Glovo y compa?¨ªa los repartos cuando diluvia? La gente es ego¨ªsta por naturaleza. Tr¨¢eme el puto KFC que quiero ver el f¨²rgol, me la pela si diluvia, nieva o graniza, estoy pagando un servicio. Yo por ejemplo no pido cuando llueve¡±. Un usuario indic¨®: ¡°El vecino del comentario debajo tiene toda la raz¨®n: nadie obliga a esos repartidores, y esto es solo un desahogo moralista¡±.
Incluso compartieron la opini¨®n de un rider: ¡°Como repartidor os digo que no hag¨¢is caso. Prefiero mojarme un d¨ªa y comer, que quedarme sequito en casa y con la cuenta a cero. Si quer¨¦is ayudar de verdad y agradecer el servicio, pod¨¦is dejar propina¡±. Emilio S¨¢nchez Hidalgo public¨® en 2019 un reportaje en Verne sobre estos repartidores. Habl¨® con varios y todos coincid¨ªan en el peligro al que se enfrentan en los d¨ªas de lluvia y en las penalizaciones a las que se arriesgan si deciden no trabajar.
Quiz¨¢ la soluci¨®n a este debate pase por el sentido com¨²n: si hace mal tiempo y a uno le apetece una pizza pero no salir de casa a por ella, deber¨ªa poder pedir tranquilo sin temer por la integridad f¨ªsica y la estabilidad laboral del repartidor. Esto pasa por que la decisi¨®n de que un rider tome el riesgo no sea del consumidor y por que las empresas de reparto protejan a sus trabajadores, que no sean falsos aut¨®nomos y tengan un contrato digno; pero tambi¨¦n por que valoren el peligro al que se enfrentan en d¨ªas con climatolog¨ªa adversa ¡ªda igual si es lluvia, un vendaval o si hay 40 grados de temperatura¡ª y cancelar la venta a domicilio si es preciso o darles un complemento salarial por ese d¨ªa.
Hay que luchar por un objetivo: que nadie tenga que trabajar en condiciones precarias para poder comer.