Etiop¨ªa: cuando la tierra seca y la falta de lluvias obliga a marcharse
El cambio clim¨¢tico est¨¢ detr¨¢s de las migraciones de muchos de los j¨®venes de la regi¨®n et¨ªope de Arsi, un ejemplo de la pobreza y la falta de perspectivas provocadas por el calentamiento del planeta
Sequ¨ªas, lluvias irregulares, tierra improductiva, inseguridad alimentaria, pobreza... Este cuadro desolador est¨¢ mermando gravemente la calidad de vida de la poblaci¨®n de Arsi, en la regi¨®n de Orom¨ªa (en el centro de Etiop¨ªa), seg¨²n un informe presentado este jueves por Ayuda en Acci¨®n y el Instituto sobre Conflictos y Acci¨®n Humanitaria (IECAH). Y ante estas circunstancias la respuesta de muchos habitantes, sobre todo los m¨¢s j¨®venes, es marcharse. ¡°La gente toma la decisi¨®n de migrar por muchas variables, entre ellas la pobreza o el hambre, pero tambi¨¦n por el cambio clim¨¢tico, que ha tomado un papel muy relevante y debe ser tenido en cuenta¡±, ha explicado Francisco Rey, codirector del IECAH, en la presentaci¨®n.
La migraci¨®n en Arsi, ya sea a otros lugares del pa¨ªs o al extranjero, es una de las m¨¢s altas de Etiop¨ªa, asegura el informe. Y las causas son varias, desde la inseguridad alimentaria (escasez de alimentos) a la falta de oportunidades laborales provocadas por el cambio clim¨¢tico, que hace, por ejemplo, que las precipitaciones se reduzcan. Gran parte de los 3,2 millones de personas que viven en esta zona dependen de la agricultura y ganader¨ªa a peque?a escala y las consecuencias del calentamiento global son cada vez m¨¢s devastadoras para las tierras y el ganado, desarrolla el estudio, titulado Cambio clim¨¢tico, juventud y movilidad humana: un ejemplo a trav¨¦s del caso de Arsi, Etiop¨ªa.
¡°La agricultura, de la que vive el 80% de la poblaci¨®n y que supone el 37% del PIB, es de subsistencia y dependiente de la lluvia. Por culpa de las sequ¨ªas y las inundaciones, la tierra da cada vez menos, mientras la poblaci¨®n no para de crecer¡±, ha ahondado este jueves Ermiyas Tadesse, director de Programas de Ayuda en Acci¨®n Etiop¨ªa, durante la presentaci¨®n del informe.
Las remesas ayudan a iniciar y mantener actividades econ¨®micas sin depender ¨²nicamente de las condiciones meteorol¨®gicas, pero solo son beneficiosas si los nuevos negocios son sostenibles
Estas circunstancias, a su vez, derivan en una carencia de ingresos y, por tanto, en una mayor pobreza. Adem¨¢s de las dificultades en la agricultura, otras de las trabas son la presi¨®n social vinculada a la mentalidad local sobre la idea de ¨¦xito familiar y la falta de servicios de calidad, como educaci¨®n y formaci¨®n profesional. ¡°As¨ª que no hay mucha m¨¢s opci¨®n, aparte de migrar¡±, ha concluido Tadesse.
De acuerdo con la encuesta, el 58% de los participantes consideraba que sus bienes eran insuficientes para cubrir sus necesidades b¨¢sicas diarias. En el caso de las mujeres j¨®venes, estas circunstancias tienen un mayor impacto, ya que el 60% decide marcharse por la falta de ingresos y el 28% porque fracasan sus cultivos. ¡°Sobre todo las j¨®venes est¨¢n en desventaja en t¨¦rminos de control y acceso a la tierra. No alcanzan a tener ingresos suficientes para vivir y, adem¨¢s, son ellas quienes sufren los efectos del cambio clim¨¢tico de forma desproporcionada, ya que deben hacer frente no solo a sus propias necesidades, sino tambi¨¦n a las de sus familias¡±, ha explicado David Perejil, investigador del IECAH y coautor del informe, en la presentaci¨®n.
Los principales destinos de los migrantes son las zonas urbanas e industrializadas de Etiop¨ªa ¡ªAsella, Adama, Mojo o la capital, Ad¨ªs Abeba¡ª y los pa¨ªses ¨¢rabes vecinos, que demandan mano de obra poco cualificada para los hombres, y trabajadoras dom¨¦sticas, en el caso de las mujeres. Arabia Saud¨ª recibe entre el 80% y el 90% de la migraci¨®n laboral et¨ªope. ¡°Se marchan para enviar remesas a sus familias, que permanecen en sus lugares de origen, y tener m¨¢s opciones econ¨®micas. En este sentido, es importante se?alar que la migraci¨®n de Arsi suele ser un proyecto familiar, en el que todos los miembros del grupo contribuyen al proceso. Por lo tanto, el fracaso o el ¨¦xito de quien emigra afecta a todos¡±, ha asegurado Perejil.
El estudio ha identificado varias historias de ¨¦xito, en las que la familia vio aumentar sus ingresos y logr¨® adaptarse a esta nueva organizaci¨®n del clan, gracias a la migraci¨®n de uno o varios de sus miembros. ¡°Emigr¨¦ a Arabia Saud¨ª por dos razones¡±, empieza la joven Birtukan Bikila, en un testimonio recogido en v¨ªdeo por Ayuda en Acci¨®n. ¡°Mi familia me mand¨® a estudiar pensando que la universidad cubrir¨ªa todos mis gastos, pero no fue as¨ª. Solo asumen los gastos de comida y alojamiento, no dan dinero¡±, contin¨²a. ¡°Por eso me fui¡±, declara. ¡°Mientras estaba en Arabia Saud¨ª, mandaba dinero a mi familia, para que comprasen uniformes, cuadernos de ejercicios, fertilizantes. Tambi¨¦n les compr¨¦ dos bueyes y les constru¨ª una casa con l¨¢minas de hierro corrugado¡±, explica la joven.
El alto coste de migrar
Sin embargo, incluso en las mejores situaciones, migrar supone un alto coste, ya que quienes emprenden el viaje se enfrentan a abusos, violaciones de los derechos humanos y tienen el riesgo de morir en el camino. ¡°Adem¨¢s de recibir malos tratos en los pa¨ªses de tr¨¢nsito o destino, suelen ser v¨ªctimas de redes de trata de seres humanos que los someten a trabajos forzados¡±, aclara Juli¨¢n Donoso, del equipo de programas de Ayuda en Acci¨®n, en conversaci¨®n con este diario. ¡°Las mujeres son especialmente vulnerables, pues a menudo se ven obligadas a trabajar en condiciones de semiesclavitud, como empleadas dom¨¦sticas o prostitutas¡±, se?ala.
Migrar supone un alto coste, ya que quienes emprenden el viaje se enfrentan a abusos, violaciones de los derechos humanos y tienen el riesgo de morir en el camino
Adem¨¢s, seg¨²n este responsable, las remesas familiares solo consiguen reducir ocasionalmente la exposici¨®n a los efectos del cambio clim¨¢tico, mejorar (o, al menos, mantener) la calidad de vida y desarrollar iniciativas que refuercen las capacidades y aumenten la resiliencia de los beneficiarios. ¡°Ayudan a iniciar y mantener actividades econ¨®micas sin depender ¨²nicamente de las condiciones meteorol¨®gicas, pero solo son beneficiosas si los nuevos negocios son sostenibles¡±, recalca. Esto se debe, en parte, a la escasa oferta de iniciativas que apoyen a los migrantes y a sus familias en el uso de estos recursos, proporcion¨¢ndoles las habilidades y los conocimientos necesarios para ello.
Y si los emigrantes consiguen regresar a casa, su reintegraci¨®n plantea retos importantes, se?ala el informe. ¡°El retorno tampoco es f¨¢cil, porque deben soportar tensiones en el ¨¢mbito familiar¡±, esclarece Donoso. ¡°Las mujeres se ven estigmatizadas por la comunidad debido a la naturaleza del trabajo realizado y los varones suelen sufrir problemas mentales, ya que se culpan a s¨ª mismos por no ser capaces de mantener a sus familias¡±, se?ala.
M¨¢s all¨¢ de migrar, estas comunidades intentan tambi¨¦n paliar su pobreza con otras estrategias como el trabajo diario en la ciudad (23%), la venta de activos productivos (18%) o la venta de le?a (10%). A ellas se suman otras decisiones m¨¢s dolorosas, como el trabajo infantil y el matrimonio de menores, seg¨²n este informe.
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