Las mujeres de India que trabajan en red para elevar su poder econ¨®mico

A medida que nos embarcamos en un nuevo a?o, he estado pensando en lo que necesita una persona o una sociedad para actuar con decisi¨®n en un mundo de interminables retos y obst¨¢culos. A lo largo de mi vida profesional, he sido testigo de muchos triunfos contra todo pron¨®stico, logros extraordinarios que suelen comenzar con un peque?o grupo de personas intentando solucionar un problema. En los mejores casos, las comunidades locales, el Gobierno y el sector privado se alinean e invierten en programas y pol¨ªticas que generan m¨¢s oportunidades para que estos grupos prosperen.

El extraordinario ¨¦xito de los grupos de autoayuda de mujeres en India representa uno de los mejores resultados en este ¨¢mbito. Creados por mujeres decididas a desarrollar un mejor futuro para ellas y sus familias, estas agrupaciones han prosperado gracias a un innovador apoyo financiero y de infraestructura por parte del Gobierno indio. Con m¨¢s de 80 millones de mujeres participando en 7,5 millones de grupos, el pa¨ªs est¨¢ apoyando el programa de desarrollo comunitario m¨¢s grande del mundo, convertido en un componente clave de su econom¨ªa.

Elevar el poder econ¨®mico de una mujer fortalece su autonom¨ªa personal y la faculta a desempe?ar un mayor papel en su familia y su comunidad

Especialmente en las ¨¢reas rurales, las mujeres enfrentan barreras de g¨¦nero para participar plenamente en sus comunidades y ganarse el sustento. Muchas, incapaces de abrir una cuenta bancaria o acceder al cr¨¦dito, dependen de pr¨¦stamos informales de parientes, amigos o prestamistas. M¨¢s a¨²n, las estructuras familiares y las normas sociales tradicionales limitan la participaci¨®n de las mujeres en actividades necesaria para iniciar o ampliar un emprendimiento peque?o.

El acceso al ahorro y al cr¨¦dito

Los grupos de autoayuda comenzaron a formarse en la d¨¦cada de los ochenta del siglo pasado para abordar estas barreras mediante el acceso al ahorro y al cr¨¦dito, de manera que las mujeres pudieran ganarse un sustento y sacar de la pobreza a sus familias. Los resultados hablan por s¨ª solos: los grupos de autoayuda de mujeres han contribuido a las extraordinarias cifras de reducci¨®n de la pobreza en India, desde un 55,1% a un 16,4% (415 millones de personas) a lo largo de los ¨²ltimos 15 a?os.

Al principio, los grupos nuevos depend¨ªan de sus miembros, si bien a menudo empobrecidas, juntando el poco dinero que ten¨ªan para iniciar sus actividades. El Gobierno indio puso su parte para aliviar esta dificultad, ofreciendo pr¨¦stamos no asegurados sin que fuera necesaria una entidad comercial formal y registrada. Un factor importante es que estos pr¨¦stamos se ofrecen a una tasa de inter¨¦s muy competitiva del 12%, que se reduce a un 7% si el grupo paga sus pr¨¦stamos en un plazo de 30 d¨ªas a partir de la fecha de vencimiento. Con este apoyo, cada grupo de autoayuda promedio fue capaz de endeudarse en cerca de 200.000 rupias (2.266 euros), y en 2021 el l¨ªmite para pr¨¦stamos sin garant¨ªas se aument¨® desde los 10.000 d¨®lares (9.395 euros) a los 25.000 (23.489 euros).

Muchas mujeres, incapaces de abrir una cuenta bancaria o acceder al cr¨¦dito, dependen de pr¨¦stamos informales de parientes, amigos o prestamistas.

Durante la ¨²ltima d¨¦cada, en India se han puesto a disposici¨®n de los grupos de autoayuda m¨¢s de 60.000 millones de d¨®lares y las mujeres de estos grupos han ahorrado en total unos 6.000 millones de d¨®lares. El acceso a pr¨¦stamos con bajos intereses sigue ayudando a que una creciente cantidad de mujeres creen fuentes sostenibles de ingreso, acumulen bienes y ahorros, y fortalezcan su seguridad financiera. Y las miembros individuales de esos grupos est¨¢n desarrollando algo m¨¢s que destrezas financieras; tambi¨¦n est¨¢n elevando su autoestima y su influencia dentro de la comunidad.

Por ejemplo, un grupo de autoayuda del pueblo de Chak Singar Barari, en el Estado de Bihar, pudo estructurar su emprendimiento para que cada miembro recibiera entre 3.000 y 4.000 rupias por mes. Cada mujer tiene su propia historia: Sunila Devi matricul¨® a sus hijos en escuelas privadas, Chitrekha Devi estudia para lograr un diploma de bachiller y Pushpa Devi ha comenzado su propia y ambiciosa empresa de alquiler de sistemas m¨®viles de sonido, lo que le permite dar empleo a otras personas.

Aumento del poder econ¨®mico

Si multiplicamos esas historias por millones, podemos ir entendiendo los efectos de estos grupos sobre la sociedad. A medida que cada mujer aporta m¨¢s al ingreso de su hogar, tiene m¨¢s que decir en las decisiones respectivas. Y, como colectivo, muestran lo que es posible cuando se da respuesta a una de las mayores barreras a la igualdad de g¨¦nero: el aumento del poder econ¨®mico de las mujeres.

Sabemos que, en ¨²ltimo t¨¦rmino, elevar el poder econ¨®mico de una mujer fortalece su autonom¨ªa personal y la faculta para desempe?ar un mayor papel en su familia y su comunidad. Los grupos de autoayuda apoyados por el Gobierno indio demuestran los efectos transformativos de las medidas pol¨ªticas que apuntan a satisfacer las necesidades de las mujeres marginadas. Ahora la tarea es imitar sus logros.

Las metas deber¨ªan estar claras: en este caso, hacer que el cr¨¦dito sea asequible y accesible, desarrollar y fortalecer las destrezas financieras y el historial de cr¨¦dito de las mujeres, as¨ª como su seguridad financiera. Y los distintos actores deben apoyar con decisi¨®n. Si miramos de cerca los detalles de los grupos de autoayuda de India, veremos la dedicaci¨®n puesta por todas las partes implicadas ¡ªlos distintos sectores econ¨®micos, los Estados y los grupos de inter¨¦s organizados¡ª para hacer converger a las personas, los recursos y las herramientas necesarias para tener ¨¦xito a esta escala. Participaron entidades gubernamentales federales y estatales, junto con bancos y otras instituciones financieras, investigadores y una amplia red de colaboraci¨®n de organizaciones voluntarias y no gubernamentales en comunidades de todo el pa¨ªs.

Esta combinaci¨®n de determinaci¨®n, colaboraci¨®n y voluntad pol¨ªtica se puede aplicar a otras barreras que obstaculizan la igualdad de g¨¦nero. Una de las m¨¢s persistentes que escucho de las mujeres, de manera m¨¢s reciente durante una visita a Dakar, en Senegal, es que las emprendedoras tambi¨¦n necesitan servicios de desarrollo de negocios, formaci¨®n de habilidades y acceso a mercados y cadenas de suministro. El programa de India muestra que eso es factible: en la actualidad, cerca de un 20% de las miembros de grupos de autoayuda cuentan con estos apoyos adicionales, y se est¨¢n implementando iniciativas para promover cooperativas y empresas de propiedad femenina.

Todos nos merecemos la oportunidad de vivir una vida sana y productiva. Mi prop¨®sito para este a?o es seguir siendo inspirada por las decididas iniciativas de personas individuales y por nuestra capacidad colectiva ¡ªcomo lo ha demostrado el notable ¨¦xito de los grupos de autoayuda en India¡ª para innovar a medida que luchamos por un mundo m¨¢s sano, feliz y equitativo.

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