El Ayuntamiento de Barcelona intenta evitar un nuevo ¡®Gamonal¡¯
Los vecinos logran una primera reuni¨®n pero sin la presencia de los ¡®okupas¡¯
La violenta reacci¨®n tras el desalojo del Centro Social Okupado Can Vies ¡ªen el barcelon¨¦s barrio de Sants¡ª ha disparado las alarmas en el Ayuntamiento de Barcelona y entre los cuerpos policiales. Las protestas empezaron el lunes ¡ªhoras despu¨¦s del desalojo¡ª y se mantuvieron hasta ayer, con el apoyo de algunos vecinos que el mi¨¦rcoles, en los momentos de mayor violencia, hac¨ªan sonar las cacerolas desde sus balcones contra la presencia policial. En Barcelona temen que Sants se convierta en un Gamonal, el barrio de Burgos que a trav¨¦s de la violencia logr¨® frenar la construcci¨®n de un bulevar a principios de a?o.
Con esta obsesi¨®n, el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, orden¨® ayer que se destinen todos los esfuerzos a intentar frenar los disturbios. ¡°Nos est¨¢n llegando presiones de todas partes¡±, explicaba una de las personas que a menudo hacen de puente entre el Ayuntamiento y los movimientos sociales.
Despu¨¦s de tanto empe?o, la asociaci¨®n de vecinos del barrio ¡ªel Centro Social de Sants¡ª movi¨® ficha ayer e intent¨® mediar para conseguir una reuni¨®n entre el Ayuntamiento y Can Vies. El colectivo okupa declin¨® la invitaci¨®n porque coincid¨ªa con la asamblea que ten¨ªan prevista para decidir nuevas protestas. Aun as¨ª, fuentes del colectivo reconocieron que ¡°si el Centro Social de Sants ofrece mediaci¨®n, hay que tenerla en cuenta¡±. Esta asociaci¨®n de vecinos apoya Can Vies y critica abiertamente un desalojo que no consideraba necesario.
La reuni¨®n se produjo finalmente ayer por la tarde entre los representantes del centro social, la Federaci¨®n de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) y el concejal del distrito de Sants-Montju?c, Jordi Mart¨ª. Termin¨® sin acuerdo, pero con una propuesta: detener el derribo de lo que queda de Can Vies.
¡°La imagen de la excavadora ha sido el desencadenante de toda la reacci¨®n ciudadana, porque ha sido interpretada por los sectores juveniles como un s¨ªmbolo de que se est¨¢ destruyendo un centro social autogestionado¡±, argument¨® ayer el presidente de la FAVB, Llu¨ªs Rabell.
No est¨¢ nada claro que la suspensi¨®n del derribo sea suficiente para reanudar el di¨¢logo con el colectivo okupa ¡ªque es el primer sorprendido por el apoyo que ha logrado en las calles¡ª, pero es un paso adelante, ¡°y al menos hay que intentarlo¡±, seg¨²n consider¨® Rabell.
Al cierre de esta edici¨®n, todav¨ªa no hab¨ªa terminado la asamblea de Can Vies, pero, seg¨²n fuentes cercanas, ¡°es posible que se pida otra condici¨®n¡± para suspender las protestas y abrir un proceso de negociaci¨®n que podr¨ªa ir enfocado a exigir ¡°la puesta en libertad de todos los detenidos¡±.
El diputado de la CUP David Fern¨¢ndez tambi¨¦n se ofreci¨® para ayudar en la mediaci¨®n, pero advirti¨® de que antes ser¨¢ necesario ¡°desmilitarizar¡± el barrio. Tambi¨¦n ha habido ofertas para mediar del S¨ªndic de Greuges (Defensor del Pueblo).
Aunque se consiga abrir un proceso de negociaci¨®n, ser¨¢ muy dif¨ªcil acercar posiciones, porque el principal objetivo de los okupas era seguir en el edificio, ya casi demolido.
Adem¨¢s de una factura de 155.000 euros en mobiliario urbano, los tres primeros d¨ªas de protestas se han saldado con el ataque a una docena de sedes de Converg¨¨ncia en toda Catalu?a y con 38 detenidos, 18 de los cuales segu¨ªan ayer en dependencias policiales. El balance podr¨ªa ser superior en funci¨®n de lo sucedido anoche, durante la jornada de protesta convocada en forma de cacerolada.
Seg¨²n el abogado de ocho de los arrestados, Eduardo C¨¢liz, las detenciones se produjeron de manera ¡°aleatoria e indiscriminada¡± tras convertir el barrio de Sants en un ¡°estado de excepci¨®n¡±. El letrado tambi¨¦n critic¨® la violencia utilizada por los agentes y denunci¨® que a uno de sus clientes le partieron la nariz.
Los comerciantes del barrio lamentaron ayer los incidentes y apelaron ¡°a la responsabilidad de los movimientos sociales¡±.
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