El tango que se visti¨® de ¡®reggae¡¯
'Libertango', de Astor Piazzolla, naci¨® con voluntad n¨®mada. Grabado en Mil¨¢n, se transform¨® en las Bahamas en uno de los ¨¦xitos de Grace Jones
Astor Piazzolla (1921-1992) no vino al mundo para hacer amigos. Admiradores, s¨ª, por lo menos despu¨¦s de que se aceptara universalmente que, m¨¢s que ¡°el asesino del tango¡±, era su salvador: internaliz¨® formas de la m¨²sica cl¨¢sica, el lenguaje del jazz, la t¨ªmbrica del rock.
Dicen que se le agri¨® el car¨¢cter al sentirse rechazado por el establishment tanguero de su pa¨ªs. Pero el ¨¦xito no le cambi¨® los modos bruscos, la acumulaci¨®n de rencores, hasta la violencia. En sus ...
Astor Piazzolla (1921-1992) no vino al mundo para hacer amigos. Admiradores, s¨ª, por lo menos despu¨¦s de que se aceptara universalmente que, m¨¢s que ¡°el asesino del tango¡±, era su salvador: internaliz¨® formas de la m¨²sica cl¨¢sica, el lenguaje del jazz, la t¨ªmbrica del rock.
Dicen que se le agri¨® el car¨¢cter al sentirse rechazado por el establishment tanguero de su pa¨ªs. Pero el ¨¦xito no le cambi¨® los modos bruscos, la acumulaci¨®n de rencores, hasta la violencia. En sus Memorias (Alba Editorial), redactadas por Natalio Gorin, se cuenta una agresi¨®n p¨²blica en Palma de Mallorca a su representante, el italiano Aldo Pagani, al grito de ¡°Yo soy un artista, nadie me hace esperar¡±.
Pagani le retratar¨ªa crudamente: ¡°Arriba del escenario, Piazzolla es Dios. Y abajo un hijo de puta.¡± Por principio, el m¨¢nager siempre tiene reservado el papel de malo de la pel¨ªcula (y ciertamente, sus contratos explotaban la debilidad comercial del artista). Pero Pagani fue esencial en la carrera de Astor. Comprendi¨® que, con sus maneras agrias y sus formaciones extensas, Argentina no pod¨ªa mantener a Piazzolla.
Necesitaba ser lanzado desde Europa. Y eso supon¨ªa difuminar sus posiciones pol¨ªticas: hab¨ªa crecido deslumbrado por Mussolini y era capaz de tocar himnos fascistas como Giovinezza. M¨¢s adelante, aceptar¨ªa almorzar con el general Videla, un faux pas que motiv¨® que Cort¨¢zar le retirara el saludo. Superada ya la dictadura militar, segu¨ªa empecinado: ¡°A nosotros, los argentinos, nos falt¨® un personaje como Pinochet¡±.
Libertango fue la primera andanada de la ¨¦poca Pagani. Daba t¨ªtulo a un LP registrado en Mil¨¢n, en 1974, con m¨²sicos locales. Fiel a su temperamento, Piazzolla describir¨ªa el repertorio como ¡°pavadas¡± y lamentar¨ªa no haber contado con sus acompa?antes habituales. Ni caso, oiga: el bandone¨®n exprime gotas de melancol¨ªa sobre un majestuoso fondo de cuerdas, todo anclado por el latido del bajo y la bater¨ªa. Alegato hondo y sombr¨ªo, que hace suspirar por una banda sonora que nunca se materializ¨®: Piazzolla iba a musicar El ¨²ltimo tango en Par¨ªs, un encargo frustrado por cuestiones econ¨®micas.
Hoy mismo, Libertango es la pieza de Astor m¨¢s reproducida en Spotify. Se trata de la versi¨®n milanesa, concentrada en 2,45 minutos. Ni rastro de la adaptaci¨®n de Horacio Ferrer, poeta uruguayo y colaborador de Piazzolla, que a?adi¨® un hinchado recitado a la melod¨ªa, en verboso homenaje al anhelo de libertad: ¡°De ni?o la ador¨¦, dese¨¢ndola crec¨ª/ mi libertad, mujer de tiempo y luz/ la quiero hasta el dolor y hasta la soledad.¡± Pero s¨ª se detecta el empuj¨®n que supuso la m¨¢s difundida interpretaci¨®n de Libertango: la de Grace Jones.
F¨¢cil de imaginar lo que pensar¨ªa Astor de la grabaci¨®n de la Jones, I¡¯ve Seen That Face Before, con Libertango reducido a subt¨ªtulo. En vez de bandone¨®n, acorde¨®n; el ritmo se reduce a la osamenta del dub jamaicano Y la libertad ya no es el objeto del deseo, desplazada por las angustias nocturnas de la beautiful people de Par¨ªs. La protagonista advierte de que est¨¢ siendo seguida y se encara con el extra?o, un tal Joel: ¡°?Qu¨¦ buscas, encontrarte con la muerte?/ ?Qui¨¦n te crees que eres? / T¨² tambi¨¦n detestas la vida¡±. Parece existencialismo de segunda divisi¨®n pero dicho en franc¨¦s, con la voz abisal de Grace, tiene su impacto. Pueden buscar Tu cara me es conocida, una spanish version que poco aporta, aparte de recordarnos que la joven Grace Beverly Jones estudi¨® para convertirse en profesora de espa?ol.
?En qu¨¦ momento se cruzaron las trayectorias de Astor y Grace? Seg¨²n I?ll Never Write My Memoirs (Simon & Schuster), la autobiograf¨ªa de la Jones, fue una ocurrencia de Jean-Paul Goode, fot¨®grafo franc¨¦s y padre de su ¨²nico hijo, Paulo. Tras su etapa como reina de la disco music, Grace se estaba reinventando en el sello Island, reconstruyendo temas de rock en los estudios Compass Point, en las Bahamas. Libertango a?ad¨ªa un contrapunto de gravedad al cancionero elegido.
Goode desarroll¨® la belleza brutal de Grace en v¨ªdeos y portadas que potenciaban su androginia, su animalidad, su misterio. El clip correspondiente a Libertango se rod¨® en la terraza del ¨¢tico de Nueva York que compart¨ªan. Hizo falta la intuici¨®n de Roman Polanski para devolver la pieza a su hogar espiritual. En Frantic (1988), Harrison Ford era el doctor inocente que, de vacaciones en Par¨ªs, se ve envuelto en una intriga internacional. Durante sus pesquisas, acude a una discoteca donde, mientras suena Libertango, cede a la sensualidad de una nativa tambi¨¦n implicada en el asunto.
Frantic se rod¨® en 1988. Dos a?os despu¨¦s, tambi¨¦n en Par¨ªs, Piazzolla sufri¨® una isquemia. En la Casa Rosada, Carlos Menem dictamin¨® que esa gloria nacional deb¨ªa morir en su patria. Mand¨® un avi¨®n de Aerol¨ªneas Argentinas a recogerle. Astor, incapacitado para hablar o moverse, no pudo resistirse, aunque cabe imaginar su furia: siempre odi¨® a los pol¨ªticos peronistas.