ck one Summer, la fragancia de una generaci¨®n para un verano irrepetible

La llegada del verano pone en marcha un peculiar ritual que se repite a?o tras a?o: cambiar a un armario m¨¢s colorista y desinhibido, salir m¨¢s, adorar al sol y buscar cualquier momento libre para darnos un refrescante chapuz¨®n en la playa, la piscina o cualquier lago azul que se precie. Si hay algo que describa los d¨ªas de m¨¢s calor es la necesidad de cambio, de estrenar, de vivir experiencias nuevas, chispeantes, sorprendentes. Vivirlas y recordarlas el resto del a?o con esp¨ªritu diferenciado. ...

La llegada del verano pone en marcha un peculiar ritual que se repite a?o tras a?o: cambiar a un armario m¨¢s colorista y desinhibido, salir m¨¢s, adorar al sol y buscar cualquier momento libre para darnos un refrescante chapuz¨®n en la playa, la piscina o cualquier lago azul que se precie. Si hay algo que describa los d¨ªas de m¨¢s calor es la necesidad de cambio, de estrenar, de vivir experiencias nuevas, chispeantes, sorprendentes. Vivirlas y recordarlas el resto del a?o con esp¨ªritu diferenciado. Por esto y porque nuestro cuerpo pide una fragancia m¨¢s ligera y estival surgen las recreaciones olfativas veraniegas. Ef¨ªmeras y especiales, como el propio verano.

ck one Summer surgi¨® en respuesta a esa b¨²squeda de emociones refrescantes, hedonistas y opuestas a la rutina del resto del calendario. La caja y la botella destilan ese azul Capri innegablemente veraniego, que evoca el mar, la piscina o el cielo raso de un d¨ªa perfecto bajo el sol. La tipograf¨ªa en naranja nos transporta al atardecer, esa hora m¨¢gica de la puesta del sol donde se pone el broche final a una jornada pl¨¢cida en la playa (o en ese desierto que presagia una fiesta salvaje bajo la luz de la luna o al auspicio de las hogueras). La hora m¨ªstica donde arranca la fiesta y que, por qu¨¦ no, se celebra con una copa y m¨²sica de chill out sobre la arena. El sopor de la tarde contrasta con el fr¨ªo helado de los cubitos de hielos. Huele a verano, sabe a vacaciones y la m¨²sica sugiere optimismo despreocupado. ck one Summer encierra todas esas emociones en una fragancia tropical, refrescante y subversiva. Un aroma que se liga innegablemente al verano. De salida, acordes de mojito con lima y dulce guayaba. A continuaci¨®n surge una frondosa vegetaci¨®n templada por el sol que libera una avalancha picante con notas de pimienta que culminan en un atrevido fondo de azafr¨¢n, aceite de guaiac y almizcle cremoso. La fiesta es para todos. La fragancia, tambi¨¦n.

Porque ck one Summer sigue la estela de su hermana mayor, la m¨ªtica ck one. La primera fragancia creada espec¨ªficamente para ser compartida por hombres y mujeres. Sin distinci¨®n de sexos, razas o edad. Si pertenec¨ªas a la tribu, esa era tu fragancia. Tu se?a de identidad. Nacida en 1994 supuso una ruptura en el universo de la perfumer¨ªa. Una revoluci¨®n que ven¨ªa de la mano del dise?ador Calvin Klein, todo un pionero en el arte de provocar con la publicidad. No hay m¨¢s recordar a una jovenc¨ªsima Brooke Shields con sus vaqueros y nada m¨¢s o los anuncios para Obsession firmados por Bruce Weber con modelos desnudos cual dioses griegos. ck one se apuntaba a la l¨ªnea de no dejar a nadie indiferente pero con una imagen m¨¢s mundana: j¨®venes guapos, andr¨®ginos, vestidos con camisetas simples y ropa interior. Terriblemente delgados y dispuestos a disfrutar de la fiesta sin l¨ªmite, a ensalzar la amistad por encima de prejuicios, a amarse sin cortapisas. All¨ª estaban Kate Moss, Stella Tennant y Donovan Leitch, entre otros, convertidos en los modelos antitops. Y para ellos ¨C y miles y miles de j¨®venes como ellos ¨C nac¨ªa un eau de toilette para compartir. Como se comparte la ropa en un piso de estudiantes o el ¨²ltimo cigarrillo cuando se agota el presupuesto. El ¨¦xito no se hace esperar. Se convierte r¨¢pidamente en la fragancia m¨¢s vendida del mundo. Se venden 20 frascos al minuto, 24 horas al d¨ªa, 7 d¨ªas a la semana. La generaci¨®n andr¨®gina ya tiene su propia fragancia. El resto ya es historia. Dos d¨¦cadas despu¨¦s la fiesta sigue. Aunque en verano cambie de look.