Las 5 claves para distinguir un perfume verdadero de uno falso
Que no te den gato por liebre. Aunque te juren que lo que tienes entre manos es aut¨¦ntico, no caigas en la versi¨®n ¡®cool¡¯ del timo de la estampita.
¡°La mejor manera de saber que te est¨¢s llevando un perfume de verdad es comprarlo en los canales autorizados. Ah¨ª el 100% son legales porque, a diferencia de otros sectores como el textil, en perfumer¨ªa no hay sobreproducci¨®n en origen que luego se distribuya por canales clandestinos¡±, sentencia Val D¨ªez, directora general de Stanpa (Asociaci¨®n Nacional de Perfumer¨ªa y Cosm¨¦tica). La picaresca de algunos vendedores no conoce l¨ªmites. En algunos mercadillos llegan a ofrecer las falsificaciones como ¡°perfumes robados¡± para que el comprador crea que est¨¢ ha...
¡°La mejor manera de saber que te est¨¢s llevando un perfume de verdad es comprarlo en los canales autorizados. Ah¨ª el 100% son legales porque, a diferencia de otros sectores como el textil, en perfumer¨ªa no hay sobreproducci¨®n en origen que luego se distribuya por canales clandestinos¡±, sentencia Val D¨ªez, directora general de Stanpa (Asociaci¨®n Nacional de Perfumer¨ªa y Cosm¨¦tica). La picaresca de algunos vendedores no conoce l¨ªmites. En algunos mercadillos llegan a ofrecer las falsificaciones como ¡°perfumes robados¡± para que el comprador crea que est¨¢ haciendo el gran negocio del d¨ªa. ¡°Puede que hasta le ense?en uno de verdad, pero el que le venden, que va empaquetado, sea falso¡±, explica Fernando Magari?os, abogado de Stanpa. O sea, la versi¨®n cool del timo de la estampita de toda la vida.
Comprar una fragancia fuera del circuito legal para ahorrarse unos euros, ya sea en mercadillos, top manta y por Internet en e-commerce de dudosa procedencia, es adquirir siempre una falsificaci¨®n. ¡°Y ¨¦stas siempre se elaboran en laboratorios o almacenes clandestinos, sin ninguna norma de higiene y con los trabajadores en condiciones de explotaci¨®n laboral. No solo en China. Tambi¨¦n existen en Espa?a¡±, asegura Jes¨²s Mart¨ªn Moreno, jefe del Grupo de Propiedad Industrial de la Polic¨ªa Nacional. ¡°El vendedor es el ¨²ltimo eslab¨®n de redes ilegales de distribuci¨®n que se saltan las normas sanitarias, las laborales y las fiscales. El problema con el que muchas veces topamos al hacer estas intervenciones es que el ciudadano de la calle se apiada del vendedor, que suele ser un inmigrante ilegal en una situaci¨®n de absoluta vulnerabilidad. No se plantea que esta actividad hace da?o tambi¨¦n al que tiene su perfumer¨ªa legal, al del transporte, el almac¨¦n¡¡±.
Aunque ¨²ltimamente los piratas afinan bastante al copiar, distinguir un perfume de verdad de la falsificaci¨®n es bastante f¨¢cil, incluso sin tener el original a mano. Fernando Magari?os da algunas claves para descubrir, a ojo de buen cubero, si un perfume es falso:
1. El celof¨¢n
Un vistazo al pl¨¢stico que envuelve la colonia basta para percatarse de que es un trucho. ¡°En los originales el celof¨¢n tiene cuerpo, los pliegues son exactos y queda adherido al embalaje. En la falsificaci¨®n, suele ser fino y quedar aire entre el cart¨®n y el celof¨¢n. Se nota f¨¢cilmente porque al frotarlo, suena¡±.
2. El estuche
Las marcas comerciales juegan duro en el punto de venta. Imagina un duty free: decenas de cajas intentando atraer la atenci¨®n del cliente. Todo vale: el brillo, la impresi¨®n impecable de las letras, la generosa textura del cart¨®n que se ve a trav¨¦s del celof¨¢n¡ En el mercadillo, en cambio, las cajas dan una impresi¨®n m¨¢s chusca. ¡°El cart¨®n es de peor calidad, de menor gramaje. Tambi¨¦n sucede con el ensamblaje del interior y que impide que la botella se mueva durante los traslados¡±. Si sospechas que una marca de lujo jam¨¢s acabar¨ªa una caja as¨ª de mal, lo m¨¢s probable es que lo que tengas entre manos sea un fake.
3. El frasco.
Fundamental: es el recipiente donde se almacena algo que vas a ponerte sobre la piel. Y que, en parte, se absorber¨¢. ?Te pondr¨ªas un perfume que viniera en una lata de gasolina? ¡°En los verdaderos, el cristal es de calidad, liso, transparente y de una pieza, para evitar pegamentos que puedan contaminar el perfume¡±, revela Magari?os. Pasa la mano por el canto de una falsificaci¨®n. Notar¨¢s un peque?o relieve. Es la uni¨®n de las dos partes del frasco. ¡°Se hacen con dos moldes y se pegan. Adem¨¢s, el tubo dispensador suele estar muy curvado. Se debe a que en el punto de fabricaci¨®n, todos los dispensadores se cortan a la misma altura. Pero no todos los frascos son iguales, por eso, en muchos caso sobra mucho tubo dispensador. Y puede estar ensanchado por efecto de algunos ingredientes nocivos presentes en el perfume¡±.
4. El etiquetado.
La ley obliga a todos los fabricantes a desglosar los ingredientes de cualquier cosm¨¦tico. Los perfumes no son una excepci¨®n. ¡°Si no vienen en el exterior de la caja, vendr¨¢ el s¨ªmbolo de un libro que quiere decir que est¨¢n en el interior. En las falsificaciones, pueden no estar. Y puede que tampoco est¨¦ el n¨²mero de lote ni el c¨®digo de trazabilidad, que es un c¨®digo diferente al Ean (el consabido c¨®digo de barras) y que pone el fabricante para saber qu¨¦ recorrido ha tenido ese producto en concreto desde su fabricaci¨®n.
5. Interior.
Para fabricar un perfume, un nariz puede tirarse un a?o trabajando. En las f¨¢bricas, se trabaja con extrema pulcritud para no degradar la mezcla ni permitir que se cuelen microorganismos u hongos, ¡°que puede suceder al tratarse de esencias procedentes de flores¡±, apunta Val D¨ªez. Las condiciones de higiene de un taller clandestino dejan mucho que desear. Por no hablar de que, evidentemente, ¡°no se atienen al reglamento 1223/2009 de la UE, que determinan qu¨¦ sustancias y en qu¨¦ medida se pueden incluir en los perfumes¡±. Puede haber ingredientes t¨®xicos, alerg¨¦nicos, que provoquen fotosensibilidad¡ e incluso, potencialmente, cancer¨ªgenos o perjudiciales para la reproducci¨®n. ¡°Hablamos de la diferencia entre usar un alcohol de alta calidad o uno de uso industrial. Y plomo, ars¨¦nico, cadmio¡Se ha detectado incluso or¨ªn de caballo para lograr el color amarillo de algunos perfumes¡±.
Claves m¨¢s que suficientes para desenmascarar a una copia aunque te la vendan como buena. ¡°Nos han vendido que el pirata es bueno, una especie de Robin Hood que roba a las marcas, que ganan millones, para poner en la calle esos mismos productos pero m¨¢s baratos. Pero, en realidad es un delincuente que explota a sus trabajadores, no respeta la propiedad industrial, viola las normas fiscales y pone en riesgo la salud p¨²blica¡±, sentencia David Ortega, responsable de asuntos europeos de la OCU. La polic¨ªa se lo pone dif¨ªcil, pero la elecci¨®n final depende del consumidor. Ya sabes: que no te den gato por liebre. Aunque huela bien.