Olivier Polge, nariz de Chanel: ?Ahora me puedo permitir hacer una fragancia que no guste a todo el mundo?

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Cuando Olivier Polge (Grasse, Francia, 48 a?os) tuvo que decidir a qu¨¦ quer¨ªa dedicarse, se decant¨® por el mundo del arte. No fue hasta uno de sus veranos de estudiante, tras unas pr¨¢cticas, cuando descubri¨® que le tiraba el negocio familiar. Su padre, el maestro perfumista Jacques Polge dirig¨ªa la divisi¨®n de fragancias de Chanel desde 1978 y hab¨ªa creado para la maison algunos iconos como ?go?ste, Allure o Coco. Polge hijo se form¨® y se fue a hacer las Am¨¦ricas para regresar, 20 a?os despu¨¦s, con sus superventas personales bajo el brazo. Recogi¨® el testigo e ide¨® sus propios ¨¦xitos: Gabrielle, Boy o la revisi¨®n del cl¨¢sico N?5 L¡¯Eau. ¡°Aunque mi padre es perfumista, no me ense?¨® perfumer¨ªa. Su lecci¨®n ha sido que lo m¨¢s importante para un perfumista es interesarse por otras cosas. Como en cualquier trabajo creativo es indispensable construir tu sensibilidad conectando con otras formas de arte¡±, explica por videollamada desde sus oficinas en Par¨ªs. Precisamente la capital gala y el estilo de sus mujeres inspiran su ¨²ltima creaci¨®n, Paris-Paris.

Las parisinas probablemente sean las mujeres m¨¢s recurrentes a la hora de inspirarse. ?C¨®mo ha enfocado esta propuesta para que resulte relevante?

Me gusta la combinaci¨®n de algo masculino y algo femenino. Creo que aqu¨ª hay una interacci¨®n interesante entre la flor y la madera. Intent¨¦ hacerlo Chanel, siempre tratando de recordar que ya desde el principio Gabrielle introdujo varios aspectos de la moda de hombre en el estilo de las mujeres. Hay algo aparentemente simple en su estilo que Paris-Paris trata de expresar.

?En las fragancias sucede como en el dise?o, que es complicado conseguir algo minimalista, como hizo Coco con sus creaciones al liberarlas de lo superfluo?

Quiz¨¢ lo m¨¢s dif¨ªcil es conseguir algo que hable por s¨ª solo, aunque luego no se sepa cu¨¢ntos hilos esconde para parecer casual.

Aparece la rosa, ?c¨®mo la trabaja aqu¨ª?

Es Rosa damascena, pero no es la misma que en N?5, porque es mucho m¨¢s aterciopelada. Esta es muy fresca, tiene cierto aspecto especiado, limonero, chispeante.

La fragancia pertenece a la colecci¨®n unisex de Les Eaux. ?Dir¨ªa que el perfume no tiene g¨¦nero?

No lo dir¨ªa exactamente as¨ª. Es todav¨ªa relevante decir que hay ciertas facetas m¨¢s femeninas o m¨¢s masculinas en un aroma u otro, aunque puedan ser llevados indistintamente por un hombre o una mujer. A m¨ª me gusta dejar la elecci¨®n a la gente. Esta por ejemplo, en la que la rosa es importante, es compatible con la masculinidad. La rosa aparece tradicionalmente en muchas fragancias masculinas.

Chanel N?5 fue uno de los primeros grandes ¨¦xitos en perfumer¨ªa en torno a las notas sint¨¦ticas, a los aldeh¨ªdos. Un siglo despu¨¦s muchos quieren volver a lo natural 100%, como soluci¨®n de sostenibilidad. ?Qu¨¦ opina del debate?

Es complejo, aunque todos coincidamos en la necesidad de sostenibilidad. En Chanel tenemos una manera sincera de hablar de nuestras fragancias, siempre pensamos que esos aldeh¨ªdos del N?5, aunque sean sint¨¦ticos, aportan una firma a la composici¨®n. Y son muy sostenibles. No se puede contraponer natural a sint¨¦tico, frente a sostenible o no sostenible. Es un tema complejo y no hay una respuesta sencilla, me da miedo esa gente que te dice que tiene la soluci¨®n. Hay que ser muy humilde y saber que el ingrediente ¡®limpio¡¯ no est¨¢ siempre donde crees que est¨¢. Lo m¨¢s importante es empezar midiendo el impacto de cada materia prima. Cada vez hay m¨¢s nivel de exigencia y eso est¨¢ muy bien, pero siempre recordando que los perfumes son menos peligrosos que los coches, que los carburantes, que la siderurgia¡­

?C¨®mo ha cambiado la industria desde que empez¨®?

Habl¨¢bamos de la sostenibilidad, que ya ocupa el 30% de mi tiempo. Hoy analizamos cada materia prima y cada f¨®rmula desde distintos ¨¢ngulos. Adem¨¢s cuando empec¨¦ solo se hac¨ªa un tipo de perfume; cada marca buscaba su superventas, todos est¨¢bamos intentando crear el mismo tipo de lanzamiento. Lo que ha cambiado es que ahora, en una marca como Chanel por ejemplo, tenemos muchas l¨ªneas. Y creo que esto ha aportado riqueza y frescura a la creatividad. Un d¨ªa puedo estar trabajando en un Les Exclusifs, otro puedo hacer Paris-Paris (que est¨¢ dentro de una est¨¦tica distinta), Gabrielle¡­

Entonces, se personaliza para llegar a consumidores m¨¢s concretos.

S¨ª. Ahora puedo permitirme hacer una fragancia que no busque gustar a todo el mundo. Cuando empec¨¦ nos centr¨¢bamos en el gusto de los europeos y de los americanos, pero ahora tambi¨¦n tenemos en cuenta el gusto asi¨¢tico o de Oriente Medio. Aporta diversidad, me gusta.