Desmontando tab¨²es sobre el embarazo
Un nuevo libro pone en tela de juicio muchas convenciones sobre lo que conviene durante la gestaci¨®n. Entre otras: el alcohol, la cafe¨ªna, el ejercicio, los kilos de m¨¢s o el reposo.
Comencemos por el alcohol: Un equipo de m¨¦dicos daneses indica que un vasito de vino al d¨ªa no perjudicar¨¢ a tu beb¨¦. Incluso alg¨²n exceso ocasional (m¨¢s de cinco bebidas) no parece causar problemas de desarrollo, de acuerdo con el estudio de Dinamarca. Dicho lo cual, ?no bebas! porque ning¨²n nivel de alcohol se considera seguro...
Comencemos por el alcohol: Un equipo de m¨¦dicos daneses indica que un vasito de vino al d¨ªa no perjudicar¨¢ a tu beb¨¦. Incluso alg¨²n exceso ocasional (m¨¢s de cinco bebidas) no parece causar problemas de desarrollo, de acuerdo con el estudio de Dinamarca. Dicho lo cual, ?no bebas! porque ning¨²n nivel de alcohol se considera seguro durante el embarazo, e incluso un vasito de vino podr¨ªa afectar negativamente el cociente intelectual de tu hijo y resultar perjudicial para su desarrollo a largo plazo, seg¨²n una investigaci¨®n elaborada en Sud¨¢frica.
Continuemos con los antidepresivos (y perd¨®n por el mareo de enlaces que acompa?an estos p¨¢rrafos): pueden provocar complicaciones muy serias en el embarazo, se?alan algunos expertos. ?Queda claro? No, porque otros cient¨ªficos aseguran que no pasa nada por tomarlos. Aunque si echas un vistazo a este estudio, se te quitar¨¢n las ganas de un plumazo. Pero¡ ?un momento! Una investigaci¨®n en la que participaron casi 30.000 mujeres de varios pa¨ªses del norte de Europa concluye que no existe un v¨ªnculo notable entre el consumo de antidepresivos y los riesgos para el beb¨¦.
?Confusa? Bienvenida al mundo de los estudios y contra-estudios, recomendaciones basadas en investigaciones precarias, en ocasiones de varias d¨¦cadas de antig¨¹edad. En este mundo se adentra el nuevo libro de la profesora de la Universidad de Chicago Emily Oster. Experta en desgranar estad¨ªsticas, tras quedarse embarazada no quiso tomar decisiones importantes sin apoyarse en datos s¨®lidos. Su libro, Expecting Better, es el resultado de navegar durante muchas horas por bases de datos como PubMed para poner en tela de juicio buena parte de las convenciones sobre lo que se debe evitar o no durante el embarazo. Entre otras: el alcohol, la cafe¨ªna, los kilos de m¨¢s, el reposo o el mito de las 40 semanas: la duraci¨®n del embarazo puede variar hasta cinco semanas de forma natural.
Oster no sugiere que las embarazadas hagan lo que les d¨¦ la gana e ignoren el bienestar de sus beb¨¦s, sino que cuestionen las recomendaciones que reciben, porque a menudo se basan en la tradici¨®n o reflejan un esfuerzo para que sean v¨¢lidas para el mayor p¨²blico posible, sin atender a las particularidades de cada mujer.
El trabajo de Oster ha causado gran revuelo en EEUU, en particular por sus opiniones relativas al alcohol, el ejercicio y el consumo de caf¨¦. Algunas de las cuestiones que eval¨²a ya estaban bajo cuerda. El reposo, por ejemplo ¨Cque se recomienda para prevenir, supuestamente, el parto prematuro¡ªno cuenta con un apoyo cient¨ªfico s¨®lido y podr¨ªa provocar da?os. En cuanto a la fertilidad, Oster se?ala que desciende con la edad, pero no tan r¨¢pido como se podr¨ªa esperar. Una revisi¨®n documentada recientemente por una autora que defiende que los datos ¡°oficiales¡± sobre el declive en la fertilidad a partir de los 35 son una exageraci¨®n.
En opini¨®n de Oster, no hay suficientes estudios que respalden que beber con moderaci¨®n afecte negativamente al feto. As¨ª, las mujeres embarazadas pueden sentirse c¨®modas con una o dos bebidas a la semana en el primer trimestre y una bebida alcoh¨®lica a diario despu¨¦s, escribe. Una opini¨®n que no respalda el Colegio de Obstetras y Ginec¨®logos de EEUU, que recalca que no hay ninguna cantidad de alcohol considerada como segura.
Sus opiniones sobre el ejercicio tambi¨¦n han sido criticadas. Tras revisar numerosos estudios, llega a la conclusi¨®n de que el ejercicio est¨¢ bien, pero no pasa nada por abstenerse durante nueve meses, ignorando as¨ª los amplios beneficios que se obtienen de la actividad f¨ªsica, se est¨¦ o no embarazada. Oster concluye, por otra parte, que es menos importante el peso que se gana durante el embarazo que el que se tiene al comenzar. No engordar lo suficiente podr¨ªa ser m¨¢s peligroso, se?ala la autora, con la que conversamos por email.
¨C Buena parte de los estudios en los que se apoyan las recomendaciones sobre los cuidados en el embarazo son incompletas, sostiene en su libro. ?Pero no podr¨ªa decirse lo mismo de otras especialidades m¨¦dicas?
¨C Creo que el embarazo es un desaf¨ªo particular por las dificultades (?con buena raz¨®n!) de experimentar con mujeres embarazadas. Esto es especialmente cierto en torno a elecciones de estilo de vida como el consumo de cafe¨ªna, alcohol, etc. Creo que las mujeres deber¨ªan pensar detenidamente sobre las decisiones que les preocupan m¨¢s, y por lo menos tratar de involucrarse m¨¢s con sus doctores a la hora de tomarlas.
¨C Insiste en que es importante para su tranquilidad mental disponer de datos antes de tomar decisiones. Sin embargo, puede que muchas mujeres no deseen lidiar con esto y prefieran consejos directos y claros (aunque falibles). Puede que la instituci¨®n m¨¦dica no cambie hasta que m¨¢s mujeres pidan que no se les trate como a ni?as y exijan m¨¢s explicaciones.
¨C Creo que este es un problema que no podemos atribuir s¨®lo a los m¨¦dicos. Hay muy pocos esfuerzos en los medios y en la sociedad para ayudar a la gente a comprender y diseccionar datos. Creo que ayudar¨ªa que los doctores tuvieran m¨¢s tiempo para analizar los detalles con sus pacientes, y estar dispuestos a admitirlo cuando las estad¨ªsticas no sean perfectas. Ayudar a la gente a comprender la informaci¨®n para que puedan participar en estas conversaciones es crucial.
¨C ?Cree que los ginec¨®logos est¨¢n, en general, informados sobre las limitaciones de los estudios en los que se apoyan algunas de las recomendaciones m¨¢s populares?
¨C S¨ª. Pero tambi¨¦n pienso que los pacientes muchas veces quieren creer que hay respuestas certeras. Y esto a veces conduce a que parezca que los doctores est¨¢n seguros, cuando en realidad no lo est¨¢n. Cuando la informaci¨®n es incompleta, no deber¨ªamos tener miedo de dec¨ªrselo a la gente.
¨C?Cu¨¢les son, en su opini¨®n, las tres principales falacias sobre el embarazo?
¨C El reposo. A muchas mujeres se les pone en reposo para evitar el parto prematuro, y no es una buena idea.
Evitar el caf¨¦. No hay datos que apoyen esto. Hasta dos tazas al d¨ªa est¨¢ bien, y m¨¢s en los ¨²ltimos trimestres.
Evitar el pescado. El pescado es bueno siempre que no consumas aquellos con muy alto contenido en mercurio como el at¨²n, pez espada o tibur¨®n.
*@nataliamartin es periodista. Si quieres ponerte en contacto con ella escribe a natalia@vidasencilla.es