Mirar fotos del pasado y escuchar canciones de hace a?os: ?es la nostalgia la ¨²ltima consecuencia de la pandemia?
Los encierros intermitentes y la ausencia de relaciones sociales tal y como las conoc¨ªamos antes nos est¨¢n llevando a echar la vista atr¨¢s cada vez con m¨¢s frecuencia.
¡®Princesas¡¯, (Fernando Le¨®n de Aranoa, 2005)
Los encierros intermitentes y la ausencia de relaciones sociales, al menos tal y como las conoc¨ªamos antes, nos est¨¢n llevando a echar la vista atr¨¢s cada vez con m¨¢s frecuencia. La nostalgia ha dejado de ser la excusa para poner Lo que pas¨® pas¨®?de Daddy Yankee mientras haces bicicleta est¨¢tica un viernes, para pasar a convertirse en el tema de repetici¨®n en el que tu amiga y t¨² ca¨¦is, una y otra vez, cuando sal¨ªs a dar un paseo con mas...
¡°Tener nostalgia en s¨ª no es malo. Eso es que te han pasado cosas buenas y que las echas de menos. Yo, por ejemplo, no tengo nostalgia de nada porque nunca me ha pasado algo tan bueno como para echarlo de menos. Eso s¨ª que es una putada. ?Se podr¨¢ tener nostalgia de algo que a¨²n no te ha pasado? Porque a m¨ª a veces me pasa. Me pasa que me imagino como van a ser las cosas, los chicos por ejemplo, o con la vida en general. Y luego me da pena de lo bonitas que iban a ser, porque iban a ser preciosas. En serio, preciosas. Y luego cuando lo pienso, me da nostalgia, porque iban a ser tan bonitas¡Cuando me doy cuenta de que a¨²n no han pasado y a lo mejor no pasan nunca, me pongo s¨²per triste. S¨²per triste, t¨ªa¡±,
¡®Princesas¡¯, (Fernando Le¨®n de Aranoa, 2005)
Los encierros intermitentes y la ausencia de relaciones sociales, al menos tal y como las conoc¨ªamos antes, nos est¨¢n llevando a echar la vista atr¨¢s cada vez con m¨¢s frecuencia. La nostalgia ha dejado de ser la excusa para poner Lo que pas¨® pas¨®?de Daddy Yankee mientras haces bicicleta est¨¢tica un viernes, para pasar a convertirse en el tema de repetici¨®n en el que tu amiga y t¨² ca¨¦is, una y otra vez, cuando sal¨ªs a dar un paseo con mascarilla.
El hast¨ªo que define al presente y la incertidumbre que nos hace dudar sobre el futuro est¨¢ provocando que nos regodeemos en el pasado, en lugar de hablar de todos los planes que haremos cuando todo esto termine. Al igual que le suced¨ªa a Caye, el personaje que interpretaba Candela Pe?a en ¡®Princesas¡¯, quiz¨¢ nos da miedo pensar en todas las cosas que nos imaginamos haciendo dentro de unos a?os porque, en el fondo, tememos que a lo mejor no pasen nunca o, al menos, no tan pronto como las necesitamos.
¡°Tengo la sensaci¨®n de que los mejores a?os de mi vida ya han pasado. Echo de menos viajar como viaj¨¢bamos antes porque creo que las cosas van a tardar mucho en volver a ser como eran. Cuando miro im¨¢genes de mi ¨²ltimo viaje a Jap¨®n me da como un pinchacito en el coraz¨®n porque no s¨¦ si se va a repetir, y veo lo feliz que era y tampoco s¨¦ si eso va a volver. Es todo un poco amargo¡±, relata Amparo, periodista de 37 a?os.
Y aunque Amparo reconoce ser una persona melanc¨®lica de por s¨ª, la nostalgia ya hab¨ªa llamado a su puerta meses antes de la pandemia y a ra¨ªz de una ruptura de pareja, situaci¨®n que no la ayuda a desvincularse del todo del pasado: ¡°El presente que tenemos tampoco hace que tengamos muchos alicientes en el ahora y eso te lleva irremediablemente al pasado y a decir ¡®qu¨¦ bien estaba y qu¨¦ poco lo valoraba¡¯¡±, a?ade.
A Nuria, guionista de 36 a?os, le sucede tambi¨¦n algo similar. Los meses de confinamiento y de restricciones sociales, desempolvan de forma involuntaria recuerdos que de otra forma no volver¨ªan con tanta insistencia a su cabeza: ¡°En mi caso creo que se mezcla la nostalgia con la autoconciencia porque echo en falta aspectos de mi vida que ya estaban desapareciendo antes de la pandemia, como salir de fiesta hasta las tantas de la madrugada. El hecho de que el toque de queda me afecte poco o nada me hace ser m¨¢s consciente de mi juventud perdida¡±.
Pero, lejos de bloquearla o alejarla del momento presente, a Nuria la nostalgia le est¨¢ resultando ¨²til de alguna forma: ¡°Me recuerda la importancia del paso del tiempo. Me doy cuenta de que 20 a?os han pasado en un suspiro y me anima a ponerme las pilas para que dentro de otros veinte, mi yo del futuro pueda decirme ¡®lo hiciste bien¡¯ y a?ade ¡°Aunque la juventud o el culo en su sitio no volver¨¢n, lo que jam¨¢s echar¨¦ de menos es el miedo y el s¨ªndrome de impostora. Los a?os te dan aplomo y seguridad y, puestos a elegir, me quedo con mis arrugas y lo que s¨¦ ahora¡±.
Las redes no ayudan a salir de la espiral
Si has sido una persona medianamente activa en redes sociales durante la ¨²ltima d¨¦cada, internet tiene la capacidad de recordarte qu¨¦ hac¨ªas y d¨®nde estabas por estas mismas fechas hace ocho, nueve o diez a?os. Y a no ser que t¨² misma les ordenes que dejen de meter el dedo en la llaga porque no est¨¢ precisamente el horno para bollos, Facebook, Instagram o Google Fotos est¨¢n ah¨ª esperando a que, en un momento de debilidad, compartas aquella foto del viaje de fin de curso que llevan intentando mostrarte desde hace 14 notificaciones push.
¡°Creo que la nostalgia es un lujo que no debemos permitirnos por salud mental, pero a la vez es muy dif¨ªcil huir de ella. Porque aunque no intentes recrearte en esas emociones, tu entorno cercano tambi¨¦n hurga en el pasado y te comparte im¨¢genes que t¨² misma ten¨ªas olvidadas¡±, opina Nuria.
¡°Hace tiempo que desactiv¨¦ de mis redes sociales este tipo de recordatorios porque la verdad que no nos hacen ning¨²n favor a los nost¨¢lgicos. Si quiero revisitar el viaje que hice hace tres a?os, ya lo har¨¦ por m¨ª misma. No necesito que venga Instagram a met¨¦rmelo con calzador¡±, apunta Amparo.
Por el contrario, Sheila, T¨¦cnico de Recursos Humanos de 31 a?os, reconoce que desde que empez¨® la pandemia utiliza la nostalgia como un recurso para levantarse el ¨¢nimo y sentirse mejor: ¡°Estoy abonada a las listas milennials de Spotify. Me motiva mucho escuchar las canciones que bail¨¢bamos cuando ¨¦ramos m¨¢s j¨®venes porque me transportan a las primeras veces que sal¨ªamos de fiesta¡±, se?ala.
¡°Eso s¨ª. Cuando me da por recordar c¨®mo era la vida previa a la pandemia, me doy cuenta de todas las cosas que han desaparecido. Veo v¨ªdeos y me acuerdo de que antes lo normal era evadirse de la semana saliendo de fiesta o tomando unas cervezas con amigas. Y eso ya no est¨¢¡±, lamenta.
Pero si las personas de veintitantos en adelante sentimos nostalgia de las fiestas, los conciertos y los viajes que hemos dejado de hacer ?qu¨¦ sucede con toda esa gente joven que acaba de empezar a la universidad y que ni siquiera puede salir y mezclarse con total libertad? ?Siente la generaci¨®n Z nostalgia por todas las cosas que quer¨ªan vivir y que ahora no pueden? ?Se puede sentir realmente nostalgia de las cosas que no han pasado, tal y como le suced¨ªa a Caye de Princesas?
¡°Para m¨ª es como si la juventud estuviese en entredicho desde que empez¨® la pandemia. Tengo 20 a?os y no puedo relacionarme con pr¨¢cticamente nadie ni conocer a gente nueva, cuando al final, es esa libertad la que esperamos disfrutar cuando cumplimos la mayor¨ªa de edad. Lo que quieres es poder hacer todas esas cosas que has visto en tus primos y hermanas mayores y que ahora para ti est¨¢n vetadas¡±, concluye Juan, estudiante del F.P de Iluminaci¨®n y Tratamiento de la Imagen y a?ade que, a pesar de la mala prensa que acumula su generaci¨®n a lo largo de esta pandemia, ¡°no todos nos saltamos las restricciones a la torera¡±.