Dejar de destruir la biodiversidad: el gran prop¨®sito de la industria del lujo en el mundo post-Covid
Mantener el equilibrio de la naturaleza, imprescindible para evitar nuevas enfermedades, es uno de los retos m¨¢s acuciantes de la moda y el holding Kering, propietario de Gucci, lo considera una prioridad.
Para la moda, la fauna y la flora han sido fuentes recurrentes de inspiraci¨®n. El amor no es correspondido: el impacto de la producci¨®n de prendas afecta al desequilibrio de los ecosistemas. El problema, en el centro de la actualidad por su nexo con la aparici¨®n de nuevas enfermedades como la covid-19, preocupa cada vez m¨¢s a la industria. En una situaci¨®n de emergencia clim¨¢tica ya no se trata solo de reducir la huella de la actividad econ¨®mica, sino de entender qu¨¦ recursos conviene no gastar. ?Ahora mismo uno de los retos m¨¢s importantes hace referencia a la biodiversidad?,...
Para la moda, la fauna y la flora han sido fuentes recurrentes de inspiraci¨®n. El amor no es correspondido: el impacto de la producci¨®n de prendas afecta al desequilibrio de los ecosistemas. El problema, en el centro de la actualidad por su nexo con la aparici¨®n de nuevas enfermedades como la covid-19, preocupa cada vez m¨¢s a la industria. En una situaci¨®n de emergencia clim¨¢tica ya no se trata solo de reducir la huella de la actividad econ¨®mica, sino de entender qu¨¦ recursos conviene no gastar. ?Ahora mismo uno de los retos m¨¢s importantes hace referencia a la biodiversidad?, expone Marie-Claire Daveu, directora de sostenibilidad del grupo Kering. ?De hecho, hay estudios cient¨ªficos que demuestran que los virus tienen mucho que ver con la falta de ecosistemas sanos. La naturaleza funciona como una cadena y si falta alg¨²n recurso, fallan de alg¨²n modo todos los dem¨¢s?. As¨ª lo apunta tambi¨¦n la organizaci¨®n no gubernamental WWF, que explica c¨®mo los h¨¢bitats bien conservados se autorregulan: ?Los virus se distribuyen entre las distintas especies, pero tambi¨¦n tienen muchas posibilidades de acabar en alguna que bloquea su dispersi¨®n. Adem¨¢s, existen predadores que eliminan a los ejemplares m¨¢s d¨¦biles y enfermos. Todo ello contribuye a mantener controlados los efectos de posibles enfermedades en la poblaci¨®n y a reducir el riesgo de transmisi¨®n a otras especies?.
Esos eslabones hoy est¨¢n m¨¢s amenazados que nunca. Seg¨²n la plataforma sobre diversidad biol¨®gica de la ONU, un mill¨®n de especies est¨¢n en riesgo de extinci¨®n (entre un 12% y un 20% del total de la fauna marina y terrestre). Las consecuencias de su desaparici¨®n ser¨ªan catastr¨®ficas para todos: ?Dependemos de la biodiversidad para alimentarnos, para obtener energ¨ªa, para mantener la calidad del aire, el suministro de agua dulce y la regulaci¨®n del clima. Sin embargo est¨¢ disminuyendo a un ritmo mayor que nunca antes en la historia?, se?ala el informe del pasado mes de julio de la consultora McKinsey, Biodiversidad: la pr¨®xima frontera de la moda sostenible. El efecto negativo de la industria textil y del calzado, apunta, se condensa en tres etapas: la producci¨®n de materias primas, la preparaci¨®n y el procesamiento de materiales y el final de la vida ¨²til de las prendas.? Seg¨²n una encuesta de McKinsey, dos terceras partes de los compradores de moda afirman que han cambiado de mentalidad tras la pandemia: ahora se preocupan m¨¢s que antes por su impacto sobre el cambio clim¨¢tico.
Romper la armon¨ªa de los sistemas biol¨®gicos es relativamente sencillo por esa interconexi¨®n de la que hablaba Daveu. Talar ¨¢rboles para disponer de espacio en el que cultivar algod¨®n incidir¨¢ en el efecto invernadero, que har¨¢ a su vez que la temperatura del planeta se eleve, aumentando as¨ª el riesgo de extinci¨®n de las especies. La complejidad de los enlaces, la existencia de diversas m¨¦tricas y la multitud de agentes involucrados, dificulta la soluci¨®n. Pero la amenaza aparece contemplada en los informes de sostenibilidad de un n¨²mero cada vez mayor de compa?¨ªas de lujo: ?Desde su creaci¨®n, la Fundaci¨®n Herm¨¨s considera la preservaci¨®n de la biodiversidad y los ecosistemas una prioridad clave?, dice Olivier Fournier, presidente de la divisi¨®n. La maison colabora con WWF, que gestiona dos programas a gran escala y largo plazo, financiados por la marca francesa. ?Desde Kering estamos lanzando un plan de tres estadios?, expone Daveu, ?no generar impacto en regiones que necesitan conservaci¨®n; trabajar con cient¨ªficos para restaurar zonas da?adas y poco biodiversas; y colaborar de forma directa con la cadena de suministro, para conocer con detalle qu¨¦ recursos se est¨¢n explotando?. Una mentalidad que deber¨¢ estar en el cambio de paradigma y que, tras la crisis actual, recibe m¨¢s apoyo que nunca.