S¨ªmbolo de estatus y pieza funcional en el d¨ªa a d¨ªa: la exhibici¨®n que desentra?a el poder imbatible del bolso

¡°En algunos pa¨ªses africanos los intrincados bolsos de cuentas de colores representaban el alto rango de los miembros de la sociedad y a menudo se llevaban alrededor del cuello¡±, explica Lucia Savi, comisaria de la exhibici¨®n temporal Bags: Inside Out que acaba de abrir sus puertas en el museo Victoria & Albert de Lon...

¡°En algunos pa¨ªses africanos los intrincados bolsos de cuentas de colores representaban el alto rango de los miembros de la sociedad y a menudo se llevaban alrededor del cuello¡±, explica Lucia Savi, comisaria de la exhibici¨®n temporal Bags: Inside Out que acaba de abrir sus puertas en el museo Victoria & Albert de Londres con todas las entradas vendidas para las pr¨®ximas semanas. El bolso como s¨ªmbolo de estatus no es un invento moderno: ¡°En China se escenificaba con el tipo de bolsitas que llevaban colgando de la faja, con los materiales empleados para confeccionarlas y decorarlas¡±. Tampoco es un accesorio exclusivo del armario femenino. ¡°A pesar de su variedad y complejidad, cuando escuchamos la palabra bolso, la asociamos casi inmediata y exclusivamente con mujeres¡±, a?ade, ¡°con esta exposici¨®n quer¨ªa desafiar esa noci¨®n¡±.

Complementos cargados de significado, por un lado son un lienzo visible con el que presentarse al mundo, pero tambi¨¦n piezas funcionales empleadas a diario. ¡°Creo que lo que hace que sean objetos tan fascinantes es su doble naturaleza: pueden ser art¨ªculos muy personales, para llevar nuestras posesiones, pero al mismo tiempo est¨¢n presentes en la esfera p¨²blica, destacando qui¨¦n somos y qui¨¦n aspiramos a ser¡±.

El museo expone 300 ejemplos para conquistar a cualquier id¨®latra del accesorio: creaciones desde el siglo XVI hasta hoy, de diversos rincones del mundo. El malet¨ªn rojo de Winston Churchill, la cartera favorita de Margaret Thatcher, un bolso de mano de principios del XVIII con un mensaje a favor de la abolici¨®n de la esclavitud, el Alexa de Mulberry de la mujer que lo bautiz¨®, Alexa Chung¡­ O el primer Birkin de Herm¨¨s, creado en 1984, que a¨²n conserva las iniciales de su due?a, Jane Birkin, y las pegatinas con las que lo decor¨®.

En los cincuenta y sesenta, actrices de Hollywood y celebridades como Grace Kelly y Jacqueline Kennedy Onassis eran tan influyentes que sus bolsos favoritos fueron rebautizados en su honor: ¡°El Kelly de Herm¨¨s y el Jackie de Gucci se convirtieron en unos objetos ic¨®nicos que han mantenido su allure y deseabilidad desde entonces¡±. Pero cuando realmente la industria explora el poder del star system para vender bolsos es a partir de los a?os noventa, con el advenimiento del sacro it bag, ¡°cuando ciertos bolsos se convierten en el s¨ªmbolo ¨²ltimo del consumo conspicuo. Por aquel entonces el Lady Dior personificaba la exclusividad al estar asociado a la princesa Diana mientras que la Baguette de Fendi o el Saddle de Dior eran inmortalizados por Sarah Jessica Parker en la serie estadounidense Sexo en Nueva York¡±. Los bolsos de lujo se convirtieron entonces en elementos tan poderosos como las im¨¢genes de personalidades a las que se asociaban. La Baguette de lentejuelas morada que le roban a Carrie Bradshaw en uno de los cap¨ªtulos m¨¢s famosos de Sexo en Nueva York aparecer¨¢ en las vitrinas de la exposici¨®n que comisaria Savi: ¡°Entre 1997 y 2007 se vendieron alrededor de 600.000 modelos de este bolso¡±.

Mitoman¨ªas a parte, ¡°al yuxtaponer modelos de distintas ¨¦pocas y lugares, quer¨ªamos resaltar c¨®mo ciertas actitudes y valores son universales¡±, indica la experta. Todo para evidenciar la importancia de los bolsos como reflejo relevante en la vida de hombres y mujeres de todo el mundo, ¡°objetos que han llevado consigo tanto en su d¨ªa a d¨ªa, como en momentos importantes¡±.