?C¨®mo deber¨ªan vestirse los invitados a la gala del MET si rindieran un verdadero homenaje al punk?

La gala del MET es la gran alfombra roja de la moda, la ¨²nica oportunidad que tenemos de ver a los personajes de la industria desfilando como desfilan sus modelos. La tem¨¢tica del evento gira en torno a la exposici¨®n que poco despu¨¦s inaugura el Metropolitan. Y este a?o, tras el homenaje a McQueen y a la asociaci¨®n Schiaparelli-Prada, es el turno del Punk.

Resulta cuanto menos extra?o ver c¨®mo un movimiento cuyos rasgos definitorios estuvieron ligados a la antimoda y a la oposici¨®n a la cultura establecida acaban siendo homenajeados por los gr...

La gala del MET es la gran alfombra roja de la moda, la ¨²nica oportunidad que tenemos de ver a los personajes de la industria desfilando como desfilan sus modelos. La tem¨¢tica del evento gira en torno a la exposici¨®n que poco despu¨¦s inaugura el Metropolitan. Y este a?o, tras el homenaje a McQueen y a la asociaci¨®n Schiaparelli-Prada, es el turno del Punk.

Resulta cuanto menos extra?o ver c¨®mo un movimiento cuyos rasgos definitorios estuvieron ligados a la antimoda y a la oposici¨®n a la cultura establecida acaban siendo homenajeados por los grandes jefes de la moda dentro de un museo. Sin embargo, ya sabemos que esta industria reinventa y se apropia de cualquier manifestaci¨®n est¨¦tica que merezca ser tenida en cuenta. Quiz¨¢ tuviera raz¨®n el guitarrista de The Clash, Mick Jones, cuando afirmaba que ¡°el verdadero punk dur¨® cien d¨ªas¡±. A¨²n as¨ª, es innegable que su influencia en la moda y el estilo sigue presente cuatro d¨¦cadas despu¨¦s en decenas de tendencias y dise?adores.

Lo que no est¨¢ tan claro es que los ilustres invitados a tan magno evento respeten la tem¨¢tica del mismo. Las alfombras rojas son actualmente el mayor escaparate de las marcas de moda y eso, unido a la atenci¨®n medi¨¢tica que generan, hace que el riesgo se minimice y suela optarse por looks anodinos que pasen desapercibidos ante la cr¨ªtica. Nos preguntamos, sin embargo, c¨®mo ir¨ªan vestidas las celebrities y los grandes nombres de la moda si fueran lo suficientemente osados como para aceptar el dresscode punk y no le tuvieran miedo al trending topic:

Anna Wintour: la lideresa de la industria hizo gala de su papel el a?o pasado con un vestido de Prada que sintetizaba el esp¨ªritu de la exposici¨®n. Este a?o deber¨ªa desfilar orgullosa con una camiseta de Seditionaries, la marca que fundaron Malcolm Mclaren y Vivienne Westwood, la m¨¢s ic¨®nica e irreverente del punk. Suya es la imagen del God Save the Queen de los Sex Pistols, entre otras muchas que definieron la est¨¦tica del movimiento.

Lauren Santo Domingo: la empresaria vender¨¢ en su web, Moda Operandi, los looks de la gala horas despu¨¦s de que sean vistos en la alfombra roja. DelPozo se encuentra entre las exclusivas marcas que comercializa Moda Operandi y Josep Font ser¨¢ la ¨²nica presencia espa?ola en la gala. As¨ª que Lauren deber¨ªa vestirse con otro espa?ol que desfila en Nueva York y, adem¨¢s, est¨¢ incluido en la exposici¨®n: Miguel Adrover. Sus prendas recicladas con vocaci¨®n reivindicativa respetan la idiosincrasia del punk y cuentan, adem¨¢s, con la Gran Manzana como epicentro.

Beyonc¨¦: Queen B. ya nos sorprendi¨® la pasada edici¨®n con un maravilloso Givenchy Alta Costura. Sabemos que detesta pasar desapercibida, por eso estar¨ªa perfecta con un vestido escoc¨¦s de Alexander Mcqueen. Pocas cosas hay m¨¢s punk que el tart¨¢n desestructurado. Y pocas cosas hay m¨¢s Beyonc¨¦ que un traje de formas rotundas.

Marion Cotillard y Jennifer Lawrence: pese a ser las caras visibles del nuevo Dior y de lucir, con toda probabilidad, dise?os de la ¨²ltima colecci¨®n de Simons, las actrices deber¨ªan en esta ocasi¨®n decantarse por las creaciones de Galliano. ?l ser¨¢ el gran ausente de la gala, pero sus fant¨¢sticos vestidos inspirados en los clochards parisinos formar¨¢n parte de la exhibici¨®n.

Miuccia Prada: ir¨¢, como siempre, vestida de s¨ª misma. Nada que objetar. Su actitud est¨¢ muy cerca de la irreverencia del punk, aunque suela camuflarla con altas dosis de sofisticaci¨®n

Hedi Slimane: son muchos los que opinan que la revoluci¨®n Saint Laurent perpetrada por el dise?ador bebe del esp¨ªritu antisistema del punk. Sea o no cierto, cuentan que Slimane har¨¢ una de sus escasas apariciones p¨²blicas acompa?ado de una de sus musas: la actriz de cine independiente Greta Gerwig. Es m¨¢s que probable que ella se vista con esmoquin rockero o vestido neogrunge by Saint Laurent. ?l, por su parte, deber¨ªa incluir en su eterno uniforme de pitillos y chaqueta de cuero negra una camiseta del CBGB. No s¨®lo es acorde a su estilo, se trata, adem¨¢s, del extinto templo de la movida punk neoyorkina y de la cuna de muchos de sus idolatrados m¨²sicos.

Florence Welch: su voz, su f¨ªsico y su estilo piden a gritos que emule a Patti Smith en la portada de ¡°Horses¡±. Ese impoluto traje masculino ser¨ªa una de las apariciones m¨¢s comentadas de la noche.

Rooney Mara: ir¨¢ acompa?ada de Riccardo Tisci, uno de los comisarios de la exposici¨®n. El director creativo de Givenchy es un iconoclasta confeso, una especie de revisionista de la parte m¨¢s intelectual del punk. Cualquiera de las inquietantes sudaderas de su ¨²ltima colecci¨®n ser¨ªa adecuada para la actriz. E ir a una alfombra roja sobre punk con una sudadera suma muchos puntos.

Kristen Stewart: la musa de Gh¨¨squiere y a¨²n imagen de Balenciaga deber¨ªa dejar de lado por un d¨ªa los vestidos de la maison francesa y decantarse por un jersey oversize lleno de agujeros de Comme des Gar?ons. Si la m¨ªtica colecci¨®n Destroy de la marca japonesa hubiera salido a la venta hoy, podr¨ªa haber contado con Kristen para su campa?a.

Kim Kardashian: para disgusto de Anna Wintour, ha sido invitada como acompa?ante Kanye West. Y dado que su presencia resulta pol¨¦mica para muchos, ?qu¨¦ mejor que dar que hablar con un Versace vintage? Ella es la ¨²nica digna sucesora de aquel traje de imperdibles que luci¨® Liz Hurley en el estreno de Cuatro bodas y un funeral. Y aunque ese vestido forma parte de la exposici¨®n, cualquiera de los que dise?¨® Gianni en aquella ¨¦poca servir¨ªa para hacer brillar (m¨¢s, si cabe) a la Kardashian. Si van a hablar de ti, al menos que sea con fundamento.

Hamish Bowles: el editor de Vogue es de los pocos que apuesta por la tem¨¢tica de la gala. Ha asegurado en The Cut que no vamos a verle con cresta mohawk, pero eso no quita para que desprenda esp¨ªritu punk a trav¨¦s de un traje de, por ejemplo, Thom Browne. El dise?ador fetiche de Michelle Obama ha servido de inspiraci¨®n para la exposici¨®n. Sus trajes masculinos son tan atrevidos y neodandies como el propio Hamish.

Marc Jacobs: ¨¦l s¨ª puede que aparezca con una cresta mohawk. Estamos tan acostumbrados a que nos sorprenda que su atuendo que ya casi nunca logra asombrarnos. Por eso, quiz¨¢, deber¨ªa enfundarse en un traje de pinchos de Junya Watanabe. De hecho, s¨®lo las prendas del dise?ador japon¨¦s le har¨ªan volver a ser el centro de todas las miradas.

Gwyneth Paltrow: con un vestido transparente de Antonio Berardi la actriz desat¨® su en¨¦sima pol¨¦mica hace unos d¨ªas. Tal vez ese Valentino que se rumorea que llevar¨¢ no sea demasiado punk, pero un vestido de la ¨²ltima colecci¨®n del d¨²o Chiuri/Piccioli es una apuesta segura. Y puede que por fin haya llegado el momento de cederle el testigo de la pol¨¦mica a otra.

Los osados: entre los invitados que esperamos no nos defrauden con su atrevimiento se encuentran Gwen Stefani, Rihanna, Daphne Guinness y, por supuesto, Vivienne Westwood. De Tilda Swinton s¨®lo esperamos que siga siendo Tilda Swinton, el d¨ªa que deje de serlo, las alfombras rojas perder¨¢n la mitad de su sentido.

Tilda solo tiene que ser ella misma y convencer¨¢ seguro.

Cordon Press