El cuento chino de Ailanto
Estampados orientales de nen¨²fares, tilos o diamantes abren la segunda jornada de la Fashion Week de Madrid.
Por mucho que Cibeles se despierte a las diez y media, no ha habido manera de empezar la segunda jornada de la pasarela madrile?a puntuales. Ni por toda la Chinoiserie de Ailanto y sus dise?os grabado, biombo o tapiz, de efecto esmaltado. Los estampados son sin duda el fuerte de I?aki y Aitor y en esta ocasi¨®n han empapado sus dise?os de nen¨²fares, tilos, diamantes mandarines en tonos grafito, plomo, carb¨®n y arena.
Ya que a su favor soplan aires orientales, sus siluetas son rectas y estrechas, no falta el shantung de seda, y frena...
Por mucho que Cibeles se despierte a las diez y media, no ha habido manera de empezar la segunda jornada de la pasarela madrile?a puntuales. Ni por toda la Chinoiserie de Ailanto y sus dise?os grabado, biombo o tapiz, de efecto esmaltado. Los estampados son sin duda el fuerte de I?aki y Aitor y en esta ocasi¨®n han empapado sus dise?os de nen¨²fares, tilos, diamantes mandarines en tonos grafito, plomo, carb¨®n y arena.
Ya que a su favor soplan aires orientales, sus siluetas son rectas y estrechas, no falta el shantung de seda, y frenan a media pierna. Sus mangas, veladas o quimono, hacen de parapeto frente a las espaldas escotadas que al caer la noche, y ya liberadas y fluyendo en vestidos de construcci¨®n cl¨¢sica, se desvelan.
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