Es hora de edificar en feminino
Las principales arquitectas espa?olas se re¨²nen en un ciclo para reivindicar su presencia en el futuro de un sector que no apuesta por ellas.
Seg¨²n las encuestas publicadas por el Consejo Superior de Colegios de Arquitectos, las mujeres se concentran en los puestos m¨¢s precarios y peor remunerados de la profesi¨®n. Adem¨¢s, son mayor¨ªa entre los compa?eros asalariados que trabajan por cuenta ajena?, explica In¨¦s S¨¢nchez de Madariaga, doctora en Arquitectura y actual profesora de Urbanismo de la Escuela de Arquitectura de Madrid.
Han pasado casi 80 a?os desde que en Espa?a se licenci¨® la primera f¨¦mina en esta carrera, y las cosas han avanzado poco y despacio. De eso se quejan Ariadna Cantis y Martha Thorne, las profesionale...
Seg¨²n las encuestas publicadas por el Consejo Superior de Colegios de Arquitectos, las mujeres se concentran en los puestos m¨¢s precarios y peor remunerados de la profesi¨®n. Adem¨¢s, son mayor¨ªa entre los compa?eros asalariados que trabajan por cuenta ajena?, explica In¨¦s S¨¢nchez de Madariaga, doctora en Arquitectura y actual profesora de Urbanismo de la Escuela de Arquitectura de Madrid.
Han pasado casi 80 a?os desde que en Espa?a se licenci¨® la primera f¨¦mina en esta carrera, y las cosas han avanzado poco y despacio. De eso se quejan Ariadna Cantis y Martha Thorne, las profesionales que han creado Espacios para arquitectas, un ciclo de conversaciones que comenzar¨¢ el 27 de octubre en Madrid y que pretende dar a conocer datos reales sobre arquitectura y mujeres, crear un foro de opini¨®n y difusi¨®n y generar una hoja de ruta para establecer un cambio necesario. ?En este pa¨ªs es especialmente dif¨ªcil plantear estos temas por nuestra propia negaci¨®n del problema?, explica la comisaria Cantis.
Martha Thorne. Escuela de disco Zollverein (Alemania).
Cordon Press.
Martha Thorne, directora ejecutiva del Premio Pritzker ¨Cconsiderado el Nobel de la arquitectura¨C hace hincapi¨¦ en las cifras. ?Aunque m¨¢s del 50% de los estudiantes de esta carrera son f¨¦minas, en el mundo laboral no est¨¢n proporcionalmente representadas. Tampoco en puestos de responsabilidad acad¨¦mica ¨Cen Espa?a solo hay dos catedr¨¢ticas entre los 150 existentes en todo el territorio¨C ni en premios o galardones. Pero lo realmente preocupante es que cobramos entre un 15% y un 25% menos que nuestros compa?eros. Por lo que no es simplemente cuesti¨®n de esperar a ver si con el tiempo se arreglar¨¢. Hay que actuar?.
Lucha por la igualdad. Como afirma Izaskun Chinchilla, existen muy pocos ejemplos de arquitectura ?hecha? en femenino: ?Lo que han logrado las mujeres, con mucho esfuerzo, es demostrar que pueden hacer las cosas de la misma forma que los hombres hasta ahora. Creo que la incorporaci¨®n real de los valores femeninos a este campo est¨¢ por llegar. Yo me esfuerzo cada d¨ªa en trabajar en aquellos aspectos que la tradici¨®n masculina ha dejado olvidados, como crear lugares acogedores, entender los problemas de g¨¦nero, los de los ni?os y los ancianos en nuestras ciudades, admitir los l¨ªmites medioambientales, empoderar al ciudadano, operar con modelos econ¨®micos donde todas las partes ganan, dise?ar arquitecturas con valores patrimoniales¡ Me alegra mucho cuando alguien encuentra femenino el resultado de estos esfuerzos?, explica. Su colega Anupama Kundoo a?ade: ?Poseemos un talento natural de s¨ªntesis y armonizaci¨®n de distintas preocupaciones que se plasma en nuestras creaciones?.
Imagen de propuesta ganadora de la primera fase del concurso City of Dreams. Organizado por Figment para la construccion de un pabellon en Governors Island, en NY en verano de 2015.
Izaskun Chinchilla. Colaboradores: Adriana Cabello, Alejandro Esparllagas y Alfonso Aracil.
Los datos de los pa¨ªses de nuestro entorno no son mejores. Hace 10 a?os, el Royal Institute of British Architects public¨® un informe, que tuvo mucha repercusi¨®n en Reino Unido, titulado ?Por qu¨¦ las mujeres abandonan la arquitectura? Denunciaba la imposibilidad de conciliaci¨®n y el trato discriminatorio. ?Las cifras no han cambiado mucho desde entonces. Es verdad que en Brasil y Europa del Este la arquitectura s¨ª es una profesi¨®n que, como en Espa?a, se est¨¢ feminizando. No es el caso de Holanda, donde las chicas siguen siendo una minor¨ªa en las escuelas. Pero todas las naciones comparten la dif¨ªcil incorporaci¨®n en el mundo laboral. En este sentido, el lugar donde cuentan con la mejor integraci¨®n es Estados Unidos, seg¨²n los datos recientemente publicados por el American Institute of Architects, que dice que un 25%, por ejemplo, son profesoras universitarias?, explica S¨¢nchez Madariaga.
Herencia nacional. La mayor¨ªa de las participantes en Espacios para arquitectas coincide en la falta de referencias femeninas que hay durante la formaci¨®n, la poca confianza de las instituciones p¨²blicas y privadas en equipos liderados por ellas para contrataciones por cuenta ajena, la necesidad de conciliar en un sector de competitividad desmesurada y rentabilidad econ¨®mica escasa en los primeros a?os, y la poca investigaci¨®n s¨®lida y visible sobre problemas de g¨¦nero.
Anupama Kundoo. Su obra Original Wall House, en Auroville (en el estado indio de Tamil Nadu), representa sus valores.
D.R.
Chinchilla a?ade una puntualizaci¨®n: ?En Espa?a, son frecuentes los estudios que se han forjado a trav¨¦s de varias generaciones de arquitectos. Abuelos brillantes que han dejado estudios bien posicionados a hijos que han sabido actualizarse con sabidur¨ªa e incluso a nietos que, a veces, son dignos herederos. Estos estudios hunden las ra¨ªces de su prestigio en un pasado en el que la figura de la arquitecta no exist¨ªa. Tendr¨¢n que pasar varias generaciones para que esas tradiciones se inicien con protagonistas femeninas?.
Biblioteca de los libros perdidos creada por Kundoo en Barcelona.
D.R.