?Est¨¢ acabando el idilio de la cr¨ªtica con Tom Ford?
El dise?ador tejano no para de cosechar cr¨ªticas con su ¨²ltima colecci¨®n.
Se las daba de escurridizo jugando al secretismo y esa pudo ser la clave de su ¨¦xito en su vuelta al ruedo el oto?o pasado.?Tras sus traum¨¢ticas salidas de Gucci e Yves Saint Laurent, la posterior tirada de sus perfumes, gafas y pintalabios sin necesidad de una l¨ªnea de ropa -femenina, porque masculina la lleva haciendo desde 2007-, y su celebrada primera incursi¨®n en el cine con A single Man, todo hac¨ªa presagiar que aunque l...
Se las daba de escurridizo jugando al secretismo y esa pudo ser la clave de su ¨¦xito en su vuelta al ruedo el oto?o pasado.?Tras sus traum¨¢ticas salidas de Gucci e Yves Saint Laurent, la posterior tirada de sus perfumes, gafas y pintalabios sin necesidad de una l¨ªnea de ropa -femenina, porque masculina la lleva haciendo desde 2007-, y su celebrada primera incursi¨®n en el cine con A single Man, todo hac¨ªa presagiar que aunque la lista de invitadas a su primer desfile en solitario estuviera m¨¢s cerca de la hermandad que de la convocatoria de prensa, prohibiera tajantemente c¨¢maras y smartphones -aunque las hubo r¨¢pidas y se filtraron varias instant¨¢neas ¨C y soltara a cuentagotas sus dise?os una vez parida la colecci¨®n, lo suyo ser¨ªa un ¨¦xito. Y lo fue. Escasas y elegidas han sido las publicaciones que han contado durante este a?o con sus vestidos y trajes para shootings y pocas, muy pocas, las famosas que los han lucido en fiestas y eventos. Su maniobra silenciosa le vali¨® en su momento la ovaci¨®n de la cr¨ªtica: poco ruido y muchas nueces.
Katy Perry con uno de los dise?os de Ford en la gala de los premios MTV.
GTresonline
Hace una semana, y cambiando Nueva York por Londres, el mismo Tom Ford presentaba su segunda colecci¨®n femenina, para la primavera-verano 2012, ?rizando el rizo de la exclusividad y cerrando el c¨ªrculo a un pu?ado de editoras de moda. Cuando se anunci¨® en febrero que el americano iba desfilar en la London Fashion Week, todos pensamos que lo har¨ªa m¨¢s abiertamente que la ¨²ltima vez. Que se dejar¨ªa de trabas y maniobras de censura; pero no. Y esta vez las presentes, mucho menos obnubiladas que la primera vez y quiz¨¢ cansadas de descifrar sus looks sin m¨¢s instrumentos que papel y boli, se han revuelto en sus p¨²lpitos. ?Hombre ya!
Cathy Horyn , del New York Times y admiradora confesa de Ford, relegaba su cr¨®nica del desfile?a un par de l¨ªneas mientras se regalaba alabando los dise?os de un joven creador pr¨¢cticamente desconocido: "Tom Ford organiz¨® otro de sus ¨ªntimos shows que causan en todo el mundo p¨¢nico por perd¨¦rselo o amargura por no estar en el primer sitio. Pero la atenci¨®n deber¨ªa estar tambi¨¦n puesta en Thomas Tait, cuyas prendas de primavera fueron imaginativas e inspiradoras".?Jess Cartner-Morley, del Guardian, calificaba la colecci¨®n de "apagada", entre otras lindezas, y la ¨²ltima en sumarse al quejido, Virginie Mouzat de Le Figaro, fusila cada una de las prendas de Tom en su ¨²ltimo art¨ªculo.?