Belleza, blogs, y drogas. El ¡±heroin chic¡± se reinventa a lo gonzo
La pol¨¦mica editora de belleza Cat Marnell transforma el look que triunf¨® en los 90 en un diario personal de autodestrucci¨®n, marcas de cosm¨¦tica y fiestas salvajes.
Todos daban por muerto y enterrado al heroin chic en la prensa femenina. Aquella tendencia que, a mediados de los 90 y en pleno apogeo del grunge, ensalz¨® tener el pelo descuidado, una cadera huesuda y unas ojeras marcadas bajo una piel p¨¢lida. Glorificar el lifestyle heroin¨®mano reinaba en editoriales firmadas por Corinne Day y Kate Moss se erig¨ªa como musa y rostro del momento. La ca¨ªda en desgracia de este look no lleg¨® ni por las alarma...
Todos daban por muerto y enterrado al heroin chic en la prensa femenina. Aquella tendencia que, a mediados de los 90 y en pleno apogeo del grunge, ensalz¨® tener el pelo descuidado, una cadera huesuda y unas ojeras marcadas bajo una piel p¨¢lida. Glorificar el lifestyle heroin¨®mano reinaba en editoriales firmadas por Corinne Day y Kate Moss se erig¨ªa como musa y rostro del momento. La ca¨ªda en desgracia de este look no lleg¨® ni por las alarmas de la anorexia, ni por las denuncias de ¡°sexualizar¡± a cuerpos casi infantiles. El mercado sufri¨® las consecuencias de mostrar sin descanso zapatillas gastadas y vestidos ro¨ªdos. Las marcas tem¨ªan las consecuencias y la todopoderosa Anna Wintour dijo basta. ¡°La ausencia de maquillaje y el pelo sucio no es lo que los Leonard Lauder quieren ver¡± (en alusi¨®n al presidente de Este¨¦ Lauder y anunciante de peso en la prensa de moda) afirm¨® al New York Times. Fot¨®grafos, creadores y compradores siguieron su mantra. El ¡°glamour¡± volvi¨® a las revistas y con ¨¦l, las ventas. La industria respir¨® aliviada.
Casi dos d¨¦cadas despu¨¦s, poco ha quedado de aquel minimalismo grunge de los 90. Heidi Slimane capt¨® parte del heroin chic en versi¨®n rock masculina y Kate Moss dej¨® de ser la chica filiforme de las editoriales. El culto a la delgadez extrema se ha difuminado, que no extinguido, y los coletazos del heroin chic se han celebrado m¨¢s en internet, idolatrando a posibles herederas como Cory Kennedy o las Olsen.
Cat Marnell y Jane Pratt, en una foto de Instagram
Pero ?qu¨¦ ocurre cuando una editora de belleza recomienda productos para salir airosa de ex¨¢menes capilares antidroga, graba un Do It Yourself sobre esnifar sales de ba?o y asegura que vomitaba cada d¨ªa por miedo a engordar? Pues que las lectoras de hoy d¨ªa asisten la reinvenci¨®n de un estilo adaptado a consejos de belleza en columnas period¨ªsticas. As¨ª lo ve, y escribe, Cat Marnell, ex editora de belleza de xoJane, Lucky Magazine y talentosa colaboradora de Nylon, Glamour o Teen Vogue. La afilada y c¨ªnica pluma de esta delgad¨ªsima rubia de 29 a?os, a la que el New York Magazine compar¨® con ¡°una bailarina que ha visto mejores d¨ªas¡± , ha vuelto a poner sobre la mesa los ideales del estilo de los 90.
Siguiendo el patr¨®n editorial de la web de Jane Pratt, Marnell ha alternado en sus textos de xoJane consejos sobre bronceadores, m¨¢scaras de pesta?as o perfumes con historias sobre c¨®mo esnif¨® hero¨ªna en un viaje de trabajo o por qu¨¦ prefiere usar la pastilla del d¨ªa despu¨¦s a otros anticonceptivos. Aunque en todo momento se defini¨® como un ¡°desastre narcisista¡± y alertaba de que su estilo de vida no era el m¨¢s aconsejable del mundo, el editor responsable de la web, SAY Media, decidi¨® que era el momento de llevar a la bloguera m¨¢s le¨ªda de xoJane a rehabilitaci¨®n. Un proceso que ella misma narr¨® a su vuelta al trabajo, pero que apenas dur¨® un mes.
Ellie Goulding, Sky Ferreira y Cory Kennedy en la Mercedes Fashion Week de NY
Getty Images
A principios de junio, Marnell anunci¨® su partida. ¡°No puedo pasarme otro verano lidiando con fechas de entrega en mi ordenador cuando podr¨ªa estar en la azotea de Le Bain (un club de Nueva York) mirando las estrellas y fumando polvo de ¨¢ngel con mis amigos¡± afirm¨® al New York Post. El revuelo estaba asegurado. Jezebel se preguntaba si una drogadicta pod¨ªa convertirse en el sello editorial de una revista y el Women Wears Daily ha vaticinado que xoJane seguir¨¢ funcionando pese a no contar con su m¨¢xima estrella.
Tal y como ocurri¨® tras el pol¨¦mico ¡°Cocaine Kate¡±, la fama de Marnell se ha disparado. Mientras twittea y postea fotos sobre sus correr¨ªas nocturnas ¨Cuna de las guionistas de la serie de HBO Girls y amiga, Lesley Arfin, lleg¨® a comentarle en Instagram que ¡°por favor dejase las drogas¡±-, la estilista ya ha tenido ofertas para tener su propio reality de televisi¨®n a lo Rachel Zoe y ya prepara sus memorias.
¡°Obsesionada¡± con Edie Sedgwick, Marnell escribe ahora una columna semanal en Vice bajo el t¨ªtulo de Amphetamine Logic. Un diario personal y bajada a los infiernos en los que aparece alguna menci¨®n a los cosm¨¦ticos que usa, pero en la que b¨¢sicamente explota su relaci¨®n con las drogas. Su ¨²ltima entrada refleja c¨®mo ofreci¨®, sin ¨¦xito, pastillas a Lindsay Lohan en la fiesta de Purple Magazine en la Fashion Week de Nueva York.
Queda por ver si esta reinterpretaci¨®n del heroin chic versi¨®n 2.0 sigue despertando el inter¨¦s medi¨¢tico que ha levantado, o si la fama de Marnell se disipa a base de reiterar si va puesta de dexedrina o speed. Es el fen¨®meno que el antrop¨®logo Thomas de Zengotita bautiz¨® como blob en su ensayo Mediated. Sabemos que el blob ha completado su proceso cuando nos volvemos indiferentes a cualquier fen¨®meno que aparezca en los medios, tras una cobertura prolongada. ?Ser¨¢ Cat Marnell el nuevo blob del mundo de la moda anglosaj¨®n?