Dandis del humor: el poder de seducci¨®n de la risa
Veintid¨®s c¨®micos espa?oles reflexionan sobre su principal herramienta de trabajo, la risa, y el cariz de la gracia nacional. Y, de paso, nos explican si es verdad eso de que un buen chiste vale m¨¢s que mil abdominales a la hora de seducir.
El gag humor¨ªstico por excelencia de los ¨²ltimos a?os es la crisis, como si re¨ªrse de la que est¨¢ cayendo fuera a aliviar el problema o, por lo menos, a atenuarlo. Podr¨ªa parecer algo muy espa?ol. Existen antecedentes. Desde El Quijote a las plumas del Siglo de Oro, los momentos de debacle parecen agudizar el ingenio: la s¨¢tira y la iron¨ªa se al¨ªan con el desparpajo y la desverg¨¹enza para dar salida a la indignaci¨®n o apat¨ªa generalizadas. ?Los c¨®micos juegan ahora el papel del buf¨®n, a quien se le permite decir las verdades porque lo hace a trav¨¦s del humorismo?, apunta Ed...
El gag humor¨ªstico por excelencia de los ¨²ltimos a?os es la crisis, como si re¨ªrse de la que est¨¢ cayendo fuera a aliviar el problema o, por lo menos, a atenuarlo. Podr¨ªa parecer algo muy espa?ol. Existen antecedentes. Desde El Quijote a las plumas del Siglo de Oro, los momentos de debacle parecen agudizar el ingenio: la s¨¢tira y la iron¨ªa se al¨ªan con el desparpajo y la desverg¨¹enza para dar salida a la indignaci¨®n o apat¨ªa generalizadas. ?Los c¨®micos juegan ahora el papel del buf¨®n, a quien se le permite decir las verdades porque lo hace a trav¨¦s del humorismo?, apunta Eduardo J¨¢uregui, doctor en Ciencias Pol¨ªticas y Sociales, profesor de Psicolog¨ªa Positiva en Saint Louis University y co-fundador de Humor Positivo, empresa de formaci¨®n especializada en el sentido del humor.
No obstante, ese gracejo con trasfondo cr¨ªtico convive con otro m¨¢s blanco, m¨¢s costumbrista, pero no por ello menos importante, aunque se le tache a veces de no ser tan inteligente. Como afirma Pedro Sangro, autor, junto a Alejandro Salgado, del libro El entretenimiento en televisi¨®n: gui¨®n y creaci¨®n de formatos de humor en Espa?a (Laertes, 2008), podr¨ªa decirse que ?hay humor de sal fina y de sal gruesa?. Y los dos son necesarios. O en palabras de Kiko Amat, considerado uno de los representantes de la socarroner¨ªa literaria de nuestro pa¨ªs, deben coexistir una gracia ?capaz de arrancar las vestiduras del emperador, porque no hay nada m¨¢s insultante para el poder que re¨ªrte en su cara, y otra que pueda generar berzas, como la de bar, la de voy a re¨ªrme para no llorar?.
Que el panorama pol¨ªtico, econ¨®mico y social sea desalentador ?hace m¨¢s necesaria la risa? ?Yo quiero re¨ªrme cuando las cosas van bien y cuando van mal?, clama el c¨®mico David Broncano. ?No comparto ese tremendismo de que ahora la comedia hace m¨¢s falta?. La diferencia reside quiz¨¢ en que ?cuando las cosas van bien, el humor sirve para recrearte en ello. Y cuando van mal, se convierte en imprescindible para sobrellevarlas?, afirma Luis Piedrahita. De la misma manera, para Miki Nadal, ?en recesi¨®n lo que en realidad se necesita es dinero. Lo de la iron¨ªa es solo para olvidarte de que no lo tienes?.
La mayor¨ªa de los c¨®micos de este reportaje coincide en se?alar que la carcajada siempre viene bien, pero hoy por hoy es indudable que ?la gente s¨ª busca m¨¢s evasi¨®n?, tal y como apunta Joaqu¨ªn Reyes, y tambi¨¦n ?desahogarse?, a?ade Goyo Jim¨¦nez, quien recuerda que hasta ?en el Berl¨ªn de entreguerras hab¨ªa m¨¢s de 500 cabarets?. Lo cierto es que ?si nos tom¨¢ramos muy en serio lo que est¨¢ ocurriendo, nos vendr¨ªamos abajo. Re¨ªrse es la ¨²nica alternativa?, apunta Dani Mateo.
De izq. a dcha. Dani Mateo, Miki Nadal, Dani Mart¨ªnez, Goyo Jim¨¦nez y Jos¨¦ Mota.
Gustavo L¨®pez
01. De profesi¨®n: hacer sonre¨ªr (y pensar)?
?Nunca ha habido tanta gente escribiendo comedia ni tantos chavales que de mayores quisieran ser c¨®micos. De hecho, en Espa?a ni exist¨ªa la profesi¨®n de monologuista, mientras que en Estados Unidos s¨ª. Aqu¨ª se llevaba m¨¢s el cuentachistes?, afirma Agust¨ªn Jim¨¦nez. A lo que Goyo Jim¨¦nez a?ade con sorna: ?No paran de salir humoristas, supongo que por efecto de la crisis. Deben pensar¡ como no hay trabajo, vamos a hacer de payaso?. El ¨¦xito de los mon¨®logos ha sido determinante. Paramount Comedy fue pionera en la introducci¨®n de este g¨¦nero. C¨®micos como Alex O'dogherty, Txabi Franquesa, Joaqu¨ªn Reyes, Carlos Areces, Dani Rovira, Agust¨ªn Jim¨¦nez, David Broncano, Ra¨²l Cimas y Dani Mateo tuvieron su primera oportunidad de hacerse profesionales de la risa en este medio. ?Ahora en cada pueblo con m¨¢s de 5.000 habitantes hay un bar que organiza este tipo de actuaciones?, apunta Quequ¨¦. Sin embargo, este?boom?no est¨¢ exento de cr¨ªticas: ?El Club de la Comedia tambi¨¦n sirvi¨® para abrir la veda, y se ha visto en los mon¨®logos en directo una v¨ªa f¨¢cil para ganar dinero. Antes exist¨ªa un circuito de bares muy potente, pero ahora muchos profesionales piden un cach¨¦ elevado. As¨ª que al final los locales se han vaciado y los humoristas se han quedado sin lugares donde actuar. Porque los bares sin monologuistas sobreviven, pero no al rev¨¦s. De hecho, yo he estado 15 a?os actuando en tascas peque?as para poder vivir y llegar a donde estoy. As¨ª que podr¨ªa decirse que hay dos ligas: la del teatro y la del bar, y la segunda sigue siendo la cantera para los que saben ver la oportunidad?, desvela David Guapo.
De entre los nuevos talentos, Javier Coronas destaca que ?hay una gente muy valiente, con nuevas ideas, que viene por detr¨¢s apretando mucho. Son m¨¢s j¨®venes, m¨¢s delgados y con m¨¢s estudios?. Y se?ala a David Broncano como ?la esperanza blanca del humor?.
Por su parte, Joaqu¨ªn Reyes ve el futuro en las redes. ?Nosotros crecimos con la televisi¨®n y por eso nos hemos acabado incorporando al medio. Pero la gente que tiene 20 a?os menos est¨¢ revolucionando el panorama. M¨¢s all¨¢ de los Venga Monjas, que nos hacen mayores a nosotros, ya hay gente como los Burnin¡¯Percebes, que los hacen mayores a ellos. Los que aterricen en el gremio en unos a?os ser¨¢n los que habiten en Internet y actuar¨¢n solo en Youtube?.
Sin embargo, hoy en d¨ªa, es la peque?a pantalla la que sigue permitiendo una mayor proyecci¨®n a los profesionales de la risa. ?Ahora hay comicidad en todo tipo de programas, hasta en los de f¨²tbol y los de pol¨ªtica?, comenta Ra¨²l Cimas. ?Pero se echa de menos la comedia pura?, puntualiza Broncano. ?Hubo un momento en que en Espa?a coincidieron tres?late nights?, recuerda nost¨¢lgico Quequ¨¦. ?Ahora el humor ha derivado en formatos como??Qui¨¦n quiere casarse con mi hijo??Eso no es humor. Al menos, a m¨ª no me hace gracia. Eso es posthumor. Deber¨ªa haber un?Club de la Comedia?en cada canal?, comenta. Coincide con ¨¦l Dani Mart¨ªnez: ?Creo que se trata de una estrategia de las cadenas. Se lleva mucho la telerrealidad, productos que te ense?an c¨®mo comer, c¨®mo educar a tu hijo¡ Pero los contenidos que provoquen risas volver¨¢n, porque son necesarios?. Para Jos¨¦ Mota, incluso m¨¢s: ?El humor en televisi¨®n es un cl¨¢sico, como los vaqueros, que siempre est¨¢n ah¨ª. Est¨¢ claro que los programas c¨®micos nunca desaparecer¨¢n?.
Lo corroboran concursos de reciente emisi¨®n como?Me Resbala, conducido por Arturo Valls; formatos exitosos como Ilustres ignorantes, de Canal?+, y otros que quedan por llegar:?Ciento y la madre,?en Cuatro, presentado por Patricia Conde, y el?talent show?de TVE,?El pueblo m¨¢s divertido de Espa?a, que conducir¨¢n Maril¨® Montero y Mill¨¢n Salcedo (Martes y Trece) y que contar¨¢ con 22 c¨®micos como padrinos de las poblaciones participantes.
De izq. a dcha. Alex O¡¯Dogherty, Ra¨²l Cimas, Rober Bodegas y Santi Mill¨¢n.
Gustavo L¨®pez
Otra historia es la ficci¨®n de humor, que parece no estar tan de moda. Seg¨²n Pedro Sangro, director del M¨¢ster de Gui¨®n para Cine y Televisi¨®n de la Universidad Pontificia de Salamanca, con la crisis, ?se apuesta por adaptaciones literarias, dramas y culebrones, g¨¦neros capaces de enganchar a los espectadores durante semanas, aunque las cifras demuestren que los grandes r¨¦cords de audiencia los han batido series c¨®micas?. Una de ellas es?A¨ªda, que ha explotado hasta la saciedad los esterotipos o arquetipos?typical spanish?m¨¢s extremos. ?Lo que se ha llegado a decir en?A¨ªda?no se podr¨¢ decir nunca m¨¢s en la historia de la televisi¨®n?, subraya Dani Mart¨ªnez, quien interpreta a Sim¨®n, el hermano de Paz, en esta producci¨®n.
Pero si algo triunfa de verdad en la tele a nivel humor¨ªstico son los?infotainment, programas que, seg¨²n Alejandro Salgado, doctor en Comunicaci¨®n, practican un pseudoperiodismo sat¨ªrico, es decir, abordan la actualidad informativa desde el humor, a?adiendo sarcasmo, iron¨ªa y chiste. Esta corriente se inici¨® con Las noticias del gui?ol, El informal, Caiga quien caiga?o?Noche Hache?y ahora triunfa con?Salvados?o?El intermedio. El ¨¦xito de estos espacios radica en la saturaci¨®n que el espectador tiene con respecto a los informativos tradicionales. ?La gente est¨¢ cansada de versiones oficiales y lo que quiere es que se le saquen los colores a los pol¨ªticos?, afirma Joaqu¨ªn Reyes.
Seg¨²n Jos¨¦ Alberto Garc¨ªa Avil¨¦s, profesor de Periodismo en la Universidad Miguel Hern¨¢ndez de Elche, el descaro y la acidez con que se plantean las noticias en estos espacios, sumado a la frescura en la realizaci¨®n, a un estilo din¨¢mico y a la voluntad de transgredir lo establecido, de ir m¨¢s all¨¢ de lo habitual, es la f¨®rmula que triunfa. Pedro Sangro, profesor en la Universidad Pontificia de Salamanca, destaca asimismo que se est¨¢ convirtiendo ?en un periodismo de vanguardia, respetado, pero pol¨¦mico. Se informa, pero tambi¨¦n se da la oportunidad de criticar al poderoso, e incluso de re¨ªrse de ¨¦l: ?La carcajada puede ser muy efectiva para hacernos reflexionar sobre la realidad que estamos viviendo?, a?ade.
Este tipo de programas ha puesto de manifiesto que ?se puede hacer humor sobre todo y todos.?Vaya semanita, si bien recurr¨ªa al?sketch, se atrevi¨® incluso con el conflicto vasco. La s¨¢tira sobre la Casa Real a estas alturas ya es hasta un recurso manido, algo impensable hace unos a?os?, apunta Sangro.
Patrick Zabalbeascoa, investigador del Centro de Discursos y Traducci¨®n de la Universitat Pompeu Fabra y especialista en Humor y Medios audiovisuales, va m¨¢s all¨¢: ?El humor siempre ha sido sospechoso por su poder de subversi¨®n. Cuando se utiliza m¨¢s este recurso quiz¨¢ es tambi¨¦n porque se incrementa la censura. El?infotainment?remite al p¨²blico mensajes que desde los informativos convencionales no es posible construir. La risa es la v¨¢lvula de escape, la manera de explicar la actualidad desde una perspectiva m¨¢s cr¨ªtica?.
De izq. a dcha. David Guapo, Carlos Areces, Javier Coronas, Luis Piedrahita, Txabi Franquesa, Marron, Juanra Bonet y David Broncano.
Gustavo L¨®pez
02. Cuando se liga siendo gracioso (y ni as¨ª)?
?La verdad es que el humor y la belleza f¨ªsica nunca han ido muy de la mano. La gente que se dedica a esta profesi¨®n no es excesivamente agraciada. Guapos, yo y para de contar. As¨ª que la risa se convierte en un arma de seducci¨®n para muchos?, apunta Santi Mill¨¢n. Goyo Jim¨¦nez es de los que reconoce abiertamente que ha utilizado ?esta estrategia, que es tan vieja como el ser humano, para llamar la atenci¨®n de las f¨¦minas?. De hecho, asegura que la frase ??A ti tambi¨¦n te parece que este pa?uelo huele a cloroformo?? le ha abierto varias puertas a la hora de conquistar. Y no es el ¨²nico.
?Desde siempre he intentado atraer haciendo re¨ªr. Hac¨ªa de avanzadilla de mis amigos, me acercaba al grupo de chicas para sondear la situaci¨®n y cuando volv¨ªa, ya avisaba de cu¨¢l quer¨ªa para m¨ª?, admite Dani Mart¨ªnez. Sin embargo, los hay que, como Carlos Areces, no creen en este fen¨®meno: ?Eso de que el humor ayuda a seducir es una leyenda como la del monstruo del lago Ness. Yo nunca he o¨ªdo decir a nadie: ¡°Empec¨¦ a re¨ªrme y me puse cachond¨ªsimo¡±?. Para Luis Piedrahita, definitivamente, el humor, cuando se trata de ligar, no lo es todo: ?Re¨ªrse es lo contrario de ir al dentista, a todo el mundo le apetece. Pero si alguien solamente te hace re¨ªr y no hay atracci¨®n f¨ªsica ni amor, lo acabas relegando a la categor¨ªa de mascota?.
La ciencia le da la raz¨®n. ?Que nos hagan sonre¨ªr o re¨ªr despierta nuestras emociones positivas y permite que veamos al otro como una persona deseable, pero para enamorar es necesario que el sentido del humor est¨¦ en sinton¨ªa con otros atributos?, afirma el psic¨®logo y sex¨®logo Antonio Bolinches. Aunque la risa es uno de los principales factores que facilitan el acercamiento a la persona deseada, no es el primero. ?Las mujeres valoran sobre todo la inteligencia. En segundo lugar, el sentido del humor, y ya en tercero, la personalidad, entendida en clave de magnetismo.
Lo que no quiere decir que el f¨ªsico no importe. Cada persona, consciente o inconscientemente, hace una autoevaluaci¨®n de su atractivo y ve qu¨¦ caracter¨ªsticas suyas resultan agradables en clave de seducci¨®n. El que es guapo, aunque sepa hacer re¨ªr, probablemente no va a necesitar utilizar ese recurso?, a?ade.
En conclusi¨®n: el aspecto influye y con hacerse el gracioso no basta. ?Un exceso, que te lleve a frivolizar constantemente, podr¨ªa ser contraproducente. La mujer podr¨ªa pensar que eres demasiado infantil o superficial?, alerta Bolinches. Por otra parte, ?no a todas les hacen gracia las mismas cosas: lo que sea darle un giro positivo o sorprendente a una situaci¨®n siempre atrae, pero no hay que olvidar que incluso las f¨¦minas m¨¢s atractivas tienen sus zonas fr¨¢giles. Hay que ser cuidadoso antes que graciosillo?.
En cualquier caso, tal y como sostiene Eduardo J¨¢uregui, autor del libro?Amor y humor, ?provocar la risa en el proceso de seducci¨®n es importante. Por algo hablamos precisamente de tontear, que es todo un arte. El flirteo es, en definitiva, un juego: peque?as bromas, gracias, insinuaciones¡ que permiten ir negociando esa intimidad con el otro, y encima con menos riesgo en caso de que nos rechacen?.
De izq. a dcha. Joaqu¨ªn Reyes, Dani Rovira, Quequ¨¦, Agust¨ªn Jim¨¦nez y Jos¨¦ Corbacho.
Gustavo L¨®pez
03. En cualquier caso, toda risa es buena?
?El humor act¨²a de b¨¢lsamo y adem¨¢s es m¨¢s barato que ir al psic¨®logo. Para el c¨®mico tambi¨¦n funciona. Hay d¨ªas que me he subido al escenario hecho un asco: a nosotros tambi¨¦n nos duelen las muelas o nos deja la novia. Hacer re¨ªr a los dem¨¢s es una catarsis y siempre te bajas mejor de lo que subiste?, confiesa Dani Rovira. Jos¨¦ Corbacho est¨¢ de acuerdo y sentencia: ?La vida no es una risa; es muy dura. Pero el sentido del humor es una gran terapia?.
Los expertos aseguran que mantener las buenas vibraciones en plena forma revierte en nuestra salud. Con cada carcajada activamos entre 300 y 400 m¨²sculos, lo que comporta un gasto de energ¨ªa y un impacto positivo sobre el sistema cardiovascular: quemamos calor¨ªas y nuestro coraz¨®n se fortalece. Unos 20 segundos de risa equivalen a tres minutos de ejercicio constante.
Adem¨¢s, al poner en marcha el diafragma y la musculatura abdominal, mejora nuestra respiraci¨®n y facilita la digesti¨®n. Seg¨²n el doctor Ram¨®n Mora-Ripoll, de la Red Espa?ola de Investigaci¨®n en Ciencias de la Risa (REIR), a nivel neuroqu¨ªmico hace que ?se activen neurotransmisores, como la serotonina y la dopamina, de efecto antidepresivo; y que se liberen endorfinas, las hormonas de la felicidad. Tambi¨¦n disminuye la producci¨®n de cortisol (sustancia ligada al estr¨¦s) y se libera m¨¢s oxitocina, la hormona que interviene en la excitaci¨®n sexual?, algo que viene a confirmar por qu¨¦ las personas que hacen re¨ªr podr¨ªan resultar m¨¢s atractivas. Por si fuera poco, tambi¨¦n ?estimula el sistema inmunitario, eleva el umbral del dolor y la tolerancia y mejora la funci¨®n mental?, a?ade Mora-Ripoll.
Si es la larga lista de beneficios f¨ªsicos, a¨²n lo es m¨¢s la de los psicol¨®gicos. Tal y como explica Valle Flores, doctora en Psicolog¨ªa de la Universidad de Valladolid, ?adoptar una mentalidad positiva y experimentar emociones de este signo, de las cuales la risa es quiz¨¢ la mejor expresi¨®n, reduce los niveles de ansiedad. Abandonas la visi¨®n de t¨²nel y se ampl¨ªa tu perspectiva, lo que propicia que seas m¨¢s creativo y que encuentres m¨¢s posibilidades de cara a la resoluci¨®n de problemas. De esa forma, se incrementa el rendimiento y la motivaci¨®n, pero tambi¨¦n el bienestar personal, la autoestima?.
?C¨®mo potenciar esta actitud? Se trata de recurrir ?a las propias fortalezas, capacidades, apoyos sociales¡ para ver las cosas desde otro punto de vista. Por malo que haya sido un d¨ªa, siempre habr¨¢ algo bueno que rescatar?, afirma Valle Flores. O como dice Eduardo J¨¢uregui, tomando prestada la frase de Chaplin, ?la vida es una tragedia en el primer plano y una comedia en el plano general?. Hasta en las situaciones m¨¢s adversas, la risa tiene un efecto terap¨¦utico inmediato. De ah¨ª que sea tambi¨¦n un excelente mecanismo de defensa. ?A qui¨¦n no se le ha escapado la risa en plena crisis nerviosa? ?O en una situaci¨®n tan comprometida como un entierro?
Si bien no existen datos cient¨ªficos sobre cu¨¢ntas veces al d¨ªa es aconsejable re¨ªrse, Ram¨®n Mora-Ripoll sostiene que ?tres minutos de risa diarios son tan importantes como la calidad del sue?o o alimentarse de una manera equilibrada?. Algo que no deber¨ªa costarnos demasiado teniendo en cuenta, como asegura David Guapo, que ?la risa es un producto de primera necesidad y que el espa?ol tiene m¨¢s desarrollado el humor que la capacidad de protesta? (sonr¨ªan, por favor).
04. Radiograf¨ªa de la carcajada espa?ola
Hay quien considera que ?Espa?a siempre ha sido un pa¨ªs con buenos humoristas y disposici¨®n de re¨ªrse de s¨ª mismo?, comenta Santi Mill¨¢n. Tal vez porque, como apunta Juanra Bonet, ?la base de la iron¨ªa es la derrota, el fracaso. De ah¨ª que los espa?oles seamos muy divertidos? y nuestro humor ?bastante cabr¨®n?, puntualiza Javier Coronas. ?Nos sigue gustando re¨ªrnos de las miserias propias, pero vistas en el de enfrente, nunca en nosotros?, matiza a¨²n m¨¢s Jos¨¦ Mota.
Frente a la parodia m¨¢s reivindicativa y que toma, en este momento, la crisis y la corrupci¨®n como temas principales, ?a m¨ª me sigue haciendo gracia que una persona se caiga?, confiesa Juanra Bonet, lo que confirma que ?el humor es como la moda. Ya lleve la etiqueta de inteligente, negro o absurdo, la ra¨ªz es la misma: re¨ªrse de las desgracias ajenas, de lo que nos sorprende, de la exageraci¨®n, de lo inesperado, de cosas tan banales como un pedo?, afirma Dani Rovira. De la misma opini¨®n es Carlos Areces: ?El humor zafio es la cosa m¨¢s patria; siempre est¨¢ de actualidad y te conecta directamente con tu yo infantil. De hecho, hay un tipo de ocurrencias consideradas inteligentes que no me hacen gracia?. Porque como recuerda Kiko Amat, ?hasta la chanza tabernaria, salvaje y brutal tiene escondido un grito de existencia, es tan importante como la denominada seria, con un poso de melancol¨ªa?.
Aun as¨ª, hay que tener en cuenta que conforme han ido evolucionado los g¨¦neros de comedia, el p¨²blico tambi¨¦n lo ha hecho. ?Cuanto m¨¢s formada est¨¢ la gente y m¨¢s cultura audiovisual tiene, se vuelve m¨¢s exigente y demanda consumir, en ese sentido, un tipo de humor m¨¢s elaborado?, comenta Jos¨¦ Mota.
Marron, de?El hormiguero, sostiene que ?los chistes siempre tienen que ir avanzando, no nos podemos quedar estancados en los relatos del espa?ol, el franc¨¦s y el ingl¨¦s. Es labor de los c¨®micos abrir el abanico, ense?ar otras posibilidades para que cada uno elija la que m¨¢s le guste?.
Ahora que ?los creadores y la audiencia son mejores, lo que hace falta es que el poder encaje mejor las bromas. Me extra?a que no haya un apartado en la nueva Ley de Seguridad Ciudadana que pene los chistes con 15 a?os de c¨¢rcel?, dice Goyo Jim¨¦nez. Y Luis Piedrahita reflexiona: ?Si alguien es capaz de disfrutar de un mon¨®logo de 10 minutos sobre una naranja o un pijama, seguro que ser¨¢ menos corrupto?.
Ah¨ª queda. Para quien quiera tomar nota.