De Harry Potter a neonazi infiltrado: la nueva carrera de Daniel Radcliffe
El int¨¦rprete de Harry Potter persevera en su intento de dejar atr¨¢s al aprendiz de mago. Sus dos ¨²ltimos y arriesgados trabajos coinciden con el estreno de una nueva entrega de la franquicia de J.K. Rowling.
Spider-Man, Juego de Tronos, H¨¦rcules, Star Wars¡ ?A qu¨¦ actor no le gustar¨ªa unir su nombre a estas exitosas sagas? Algunos dir¨ªan que a aquellos que ya hayan llevado sobre sus hombros otra de similar dimensi¨®n. No es ese el caso de Daniel Radcliffe, conocido globalmente como Harry Potter, que en los ¨²ltimos d¨ªas ha ofrecido su talento a todas estas franquicias. Ya sea por insistencia de la prensa o por un verdadero deseo profesional, ...
Spider-Man, Juego de Tronos, H¨¦rcules, Star Wars¡ ?A qu¨¦ actor no le gustar¨ªa unir su nombre a estas exitosas sagas? Algunos dir¨ªan que a aquellos que ya hayan llevado sobre sus hombros otra de similar dimensi¨®n. No es ese el caso de Daniel Radcliffe, conocido globalmente como Harry Potter, que en los ¨²ltimos d¨ªas ha ofrecido su talento a todas estas franquicias. Ya sea por insistencia de la prensa o por un verdadero deseo profesional, el actor ingl¨¦s parece dispuesto a intentar volver a ser relevante en la industria del cine, ahora sin la capa colgada de su cuello. As¨ª lo hizo Harrison Ford, que se baj¨® del Halc¨®n Milenario para enfundarse una chaqueta de cuero, agarrar el l¨¢tigo y buscar tesoros legendarios como Indiana Jones. Y as¨ª lo intentan compa?eros de reparto como Emma Watson, Hermione Granger, que adem¨¢s de liderar el movimiento feminista en Hollywood, protagonizar¨¢ el pr¨®ximo a?o la gran apuesta de Disney, La Bella y la Bestia en imagen real. Tambi¨¦n su inseparable Ron Weasley, encarnado por Rupert Grint, intentar¨¢ desquitarse de la casa Griffyndor sustituyendo al mism¨ªsimo Brad Pitt en la adaptaci¨®n televisiva del filme de Guy Ritchie, Snatch: Cerdos y diamantes. Pero mientras se confirman nuevas apariciones, a Radcliffe no le falta trabajo en el cine independiente. En los pr¨®ximos meses lo veremos protagonizando apuestas arriesgadas, que se desmarcan por completo de la trayectoria de cualquier estrella juvenil. Si fuiste un fan del trabajo del actor ingl¨¦s mientras todav¨ªa resid¨ªa en Hogwarts, aqu¨ª tienes un adelanto de sus pr¨®ximos estrenos. Pero no lo llames Harry, ¨¦l prefiere Daniel.
El pr¨®ximo 17 de noviembre regresar¨¢ a las pantallas la franquicia Potter, esta vez en forma de precuela bajo el t¨ªtulo de Animales fant¨¢sticos y d¨®nde encontrarlos. El ganador de un ?scar Eddie Redmayne (La teor¨ªa del todo) tomar¨¢ el relevo como cabeza de cartel en un lanzamiento que coincide en el tiempo con los nuevos proyectos de Radcliffe. Un buen plan de sesi¨®n doble para los fan¨¢ticos, eso s¨ª, menos escrupulosos. El primero de sus estrenos es la muy pol¨¦mica Swiss Army Man, cuyo argumento ha polarizado al p¨²blico en dos bandos: el de los fans entregados y los cr¨ªticos ac¨¦rrimos. En el festival de Sundance, cuyos espectadores no son precisamente parecidos a los de Cine de Barrio, se produjo una huida masiva de la sala. El filme cuenta la historia de un n¨¢ufrago que entabla una rom¨¢ntica amistad con un cad¨¢ver flatulento y juerguista con el se encuentra en una isla desierta. Este octubre llegar¨¢ tambi¨¦n a las salas Imperium, donde interpretar¨¢ a un agente del FBI infiltrado en un grupo neonazi. Un cad¨¢ver y un skinhead; s¨ª, parece que los hechizos quedaron atr¨¢s. ¡°Creo que me dan un prestigio inmerecido por hacer papeles diferentes porque la gente me ha visto interpretar al mismo durante mucho tiempo. Pero es lo que la mayor¨ªa de los actores quieren, tener una carrera tan variada como sea posible. Solo tengo la fortuna de encontrarme en una posici¨®n en la que puedo hacerlo¡±, explic¨® en The Independent.
Pero en la carrera por garantizarse un futuro laboral respetado, Radcliffe parte con varios segundos de penalizaci¨®n. Esos que tanto el p¨²blico como la prensa adjudicamos a quienes fueron ni?os prodigio y deben demostrarnos m¨¢s que el resto. Una especie de s¨ªndrome ¡®hijo del jefe¡¯ que nos hace ser m¨¢s suspicaces con sus logros que con los de otros contempor¨¢neos de perfil similar, como Eddie Redmayne,?Jesse Eisenberg o Miles Teller, todos ellos ya bien reconocidos por la cr¨ªtica. ¡°Ten¨ªa mucho que demostrar despu¨¦s de Potter. Probar que puedes ser un actor y no un puto desastre cuando creces. Esa es la ¨Calgo injusta¨C imagen que la gente tiene de los actores j¨®venes. Hay muchos ni?os actores que crecen bien¡±, confes¨® en una entrevista. Una redenci¨®n por haber saboreado las mieles de la fama antes de aprobar la ESO con la que tambi¨¦n lidia, por ejemplo, Elijah Wood (Frodo en El se?or de los anillos) y que otros como Leonardo DiCaprio han terminado por salvar despu¨¦s de una marat¨®n extenuante, de 20 a?os de duraci¨®n, que disipara las suspicacias sobre su talento como actor.
Probablemente este sea tambi¨¦n un proceso a largo plazo para Radcliffe. La green card hollywoodiense, el permiso de residencia en el olimpo del cine es dif¨ªcil de conseguir. ?l mismo no lo ha puesto f¨¢cil. Primero sumergido en una fuerte adicci¨®n al alcohol (ya superada) que le hac¨ªa perder el control en lugares p¨²blicos, y despu¨¦s desmarc¨¢ndose del supuesto modelo de conducta que significaba para los ni?os. Su discusi¨®n con una madre an¨®nima que le echaba en cara que fumara por la calle se hizo c¨¦lebre en la puritana industria del espect¨¢culo, a la que ha acusado de ¡°racista¡± y ¡°hom¨®foba¡±. Porque, aunque siempre haciendo gala de una exquisita educaci¨®n, el actor de 27 a?os no ha escondido nunca sus opiniones. En varias ocasiones se ha manifestado en contra de l¨ªderes pol¨ªticos como David Cameron, Silvio Berlusconi y hasta Donald Trump, a qui¨¦n ha calificado como ¡°m¨¢s impuro¡± que el terrible villano Lord Voldermort.
La mutaci¨®n art¨ªstica de Daniel Radcliffe comenz¨® antes incluso del final de la saga escrita por J.K. Rowling. En 2007 se subi¨® desnudo a las tablas de Broadway con la obra Equus. La pol¨¦mica que acompa?¨® esa aparici¨®n no pareci¨® importarle y continu¨® protagonizando papeles arriesgados tambi¨¦n en el cine. En la comedia de terror Horns le pusieron cuernos (literalmente) para dar vida a un antih¨¦roe con poderes sobrenaturales. Despu¨¦s dar¨ªa un paso adelante interpretando al poeta homosexual Allen Ginsberg, emblema de la Generaci¨®n Beat en Kill your darlings. Hasta acept¨® protagonizar un cameo en Y de repente t¨², interpretando a un paseador de perros. Roles inesperados para uno de los actores j¨®venes m¨¢s ricos sobre la tierra. ?l lo achaca a una cuesti¨®n de predilecciones. ¡°Mi gusto no es generalista. La gente me pregunta: ¡®?Por qu¨¦ haces pel¨ªculas tan extra?as?¡¯. Pero yo no creo que sean raras, son las historias que me interesan. ?No es una buena cualidad? Yo creo que s¨ª. Es mejor que querer interpretar siempre al h¨¦roe atractivo. ?Piensas que soy raro? Me gusta¡±.
El int¨¦rprete londinense se siente a gusto fuera de la zona de confort, aprovechando su fama y seguridad econ¨®mica para sacar adelante historias exc¨¦ntricas que de otra forma no ver¨ªan la luz. De cara a la cr¨ªtica le ha ido mejor as¨ª. Los proyectos estudio que ha rodado en este tiempo con grandes presupuestos han sido dos sonados fracasos de cr¨ªtica y p¨²blico, como Victor Frankenstein y Ahora me ves 2. Pero no sorprende que Radcliffe siga buscando un nuevo papel en una franquicia, ya que si limita su trabajo al cine independiente, el gran p¨²blico seguir¨¢ relacion¨¢ndolo con el aprendiz de mago. Est¨¢ en juego el reconocimiento global. Porque aunque pueda parecer parad¨®jico, el absoluto protagonista de una saga que ha recaudado m¨¢s de siete mil millones de euros no es una estrella del cine. Ni mucho menos. Quiz¨¢ sea mejor as¨ª.