?Fashionisto? y activista LGTB: as¨ª es el hijo de Magic Johnson

EJ Johnson llega justo en el momento en el que se proclama el fin del circo en torno a los desfiles, como ese invitado que aparece tarde y no quiere enterarse que la fiesta se ha acabado. Empecemos situ¨¢ndolo. Earvin Johnson III, de 22 a?os, es uno de los tres hijos del exjugador de baloncesto Magic Johnson y uno de los integrantes de RichKids of Beverly Hills, un reality guionizado sobre una panda de consentidos hijos de millonarios de Los ?ngeles. Seg¨²n la cr¨ªtica el programa no se salva ni con el filtro de la iron¨ªa, pero ...

EJ Johnson llega justo en el momento en el que se proclama el fin del circo en torno a los desfiles, como ese invitado que aparece tarde y no quiere enterarse que la fiesta se ha acabado. Empecemos situ¨¢ndolo. Earvin Johnson III, de 22 a?os, es uno de los tres hijos del exjugador de baloncesto Magic Johnson y uno de los integrantes de RichKids of Beverly Hills, un reality guionizado sobre una panda de consentidos hijos de millonarios de Los ?ngeles. Seg¨²n la cr¨ªtica el programa no se salva ni con el filtro de la iron¨ªa, pero este estudiante de hosteler¨ªa y organizaci¨®n de eventos ha logrado capitalizar su presencia medi¨¢tica para hacerse hueco en el mundillo de la moda. Ha abierto un blog, ejerce de corresponsal de las pasarelas de Nueva York para la cadena E! y su Instagram est¨¢ cuajado de selfies tomados en yates. Hasta aqu¨ª, una historia como la de tantas otras starlets que se mueven en el demimonde de los saraos y la telerrealidad.

Lo que distingue a EJ del resto es que no ser inventivo no le supone un impedimento para darlo todo. Posa con una mano en la cintura, se autodefine como ¡°fashionisto¡± y tiene un Herm¨¨s Birkin en cada color. Es clich¨¦ andante, y sin embargo, no es prescindible.

Earvin se autodefine como ¡°fashionisto¡± y tiene un Herm¨¨s Birkin en cada color.

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Si el televisivo clan Kardashian-Jenner ha resultado clave para normalizar a los transg¨¦nero en los medios y la sociedad estadounidense, EJ Johnson ha contribuido a dar visibilidad al colectivo LGBT de este pa¨ªs. Hace un par de a?os hizo se publicaron fotos suyas de la mano con un amigo, y los medios hicieron p¨²blica su homosexualidad. Sus padres Magic y Cookie Johnson entonces declararon que estaban muy orgullosos de ¨¦l. El exjugador de baloncesto, al que fue diagnosticado el VIH en 1991 y ha cambiado la percepci¨®n de la enfermedad, es desde hace unos a?os un firme activista promatrimonio homosexual. EJ comparte las causas paternas: tiene una secci¨®n de su blog dedicada a ellas donde informa sobre su trabajo con organizaciones de lucha contra el SIDA y derechos humanos.

EJ, que se someti¨® a una operaci¨®n de reducci¨®n de est¨®mago el a?o pasado, se maquilla y lleva escotes, camisas transparentes, perlas, minifaldas y botas por encima de la rodilla. Viste con ropa tradicionalmente de mujer pero no llega al travestismo, ¨¦l simplemente ignora el g¨¦nero adjudicado a ciertas prendas. Lo mismo que proponen esta temporada firmas como Gucci, Givenchy y J.W. Anderson.

El asfalto (y los ¡®photocalls¡¯) son su particular pasarela.

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La fotograf¨ªa de estilo callejero ha llegado a un punto de saturaci¨®n. A los pioneros del fen¨®meno les da pereza la cacer¨ªa que se organiza a la salida de los desfiles y est¨¢n buscando alternativas. Garance Dor¨¦ se aleja del circuito para documentar otros temas, como su pelo. Tommy Ton ha terminado su colaboraci¨®n con Style.com (ahora integrado en la web del Vogue estadounidense) y ha abierto su propia web independiente. Mientras los editores juran que se vestir¨¢n de forma aburrida para escapar del acoso de los fot¨®grafos de nueva hornada, EJ asegura que el asfalto es su pasarela. Esto hace de ¨¦l algo as¨ª como el g¨®tico flam¨ªgero de la moda actual. Al igual que este estilo tard¨ªo se despidi¨® entre delirios decorativos, ¨¦l se viste de se?uelo para las c¨¢maras. Antes muerto que sencillo. Como ¨¦l mismo dice en su blog, vaya donde vaya "continuar¨¢ siendo fabuloso".

Magic Johnson y su hijo posando juntos en un evento en Beverly Hills.

Cordon Press