Irene Escolar: ?Muchas mujeres podr¨ªan sentirse identificadas con Juana la Loca?
La tercera temporada de Isabel, que comienza en septiembre, estrena protagonista. Irene Escolar ser¨¢ Juana la Loca, una mujer sincera y guerrera, como ella.
Vista de perfil, con el Dsquared2 de plumas de marab¨², tiene algo de aristocr¨¢tico: un aire de distinci¨®n a lo Dama del armi?o, de Da Vinci, o de cualquiera de esas nobles de piel sedosa que inmortaliz¨® Rafael Sanzio. Se entiende por qu¨¦ la productora de la serie Isabel (TVE) la ha elegido para interpretar a Juana I de Castilla, apodada la Loca, para su nueva temporada. Como su personaje, Irene Escolar (Madrid, 1988) es de buena familia, est¨¢ m¨¢s que preparada¡ y muy enamorada.
Por sus venas no corre sangre azul, pero s¨ª titiritera, que es m¨¢s espesa y con m¨¢s abol...
Vista de perfil, con el Dsquared2 de plumas de marab¨², tiene algo de aristocr¨¢tico: un aire de distinci¨®n a lo Dama del armi?o, de Da Vinci, o de cualquiera de esas nobles de piel sedosa que inmortaliz¨® Rafael Sanzio. Se entiende por qu¨¦ la productora de la serie Isabel (TVE) la ha elegido para interpretar a Juana I de Castilla, apodada la Loca, para su nueva temporada. Como su personaje, Irene Escolar (Madrid, 1988) es de buena familia, est¨¢ m¨¢s que preparada¡ y muy enamorada.
Por sus venas no corre sangre azul, pero s¨ª titiritera, que es m¨¢s espesa y con m¨¢s abolengo. Es sobrina nieta de Julia y Enrique Guti¨¦rrez Caba y nieta de la enorme Irene, una actriz que marc¨® cuatro d¨¦cadas de interpretaci¨®n en Espa?a. En los documentales sobre su abuela hay im¨¢genes de ella, de beb¨¦, en los brazos de la diva, abrazo angelical que todav¨ªa hoy perdura, pues la fotograf¨ªa de la matriarca preside como un talism¨¢n su camerino. De ella naci¨® el primer impulso de una pasi¨®n incontenible por tramoyas, proscenios y candilejas; de Julia, de Enrique, de sus padres, una gravedad en el habla impropia de su edad. ?En mi casa el teatro siempre se ha valorado. Llevo 15 funciones con personajes muy distintos y complejos, es un trabajo que me ha dado muchas tablas. Ten¨ªa claro que quer¨ªa formarme en los escenarios. Si luego sal¨ªa un personaje de televisi¨®n, ya lo aprovechar¨ªa?.
Vestido de seda y encaje de Zuhair Murad y pendientes con cristales de Swarovski de Alexis Mabille.
Sebastian Sabal-Bruce
Tras sus Mamet, Vargas Llosa y Zorrilla, tras sus Carol, Crystal o Jean, tras compartir funciones con estrellas que no precisan de apellidos para ser reconocidas como Aitana, Terele o Marisa, por fin ha llegado la ocasi¨®n. ?Juana me parece la puerta de entrada so?ada a la televisi¨®n. Puede salir bien o mal, pero es un personajazo. Quiz¨¢s de alguna manera inconsciente me estaba reservando, porque es muy dif¨ªcil encontrar papeles femeninos protagonistas tan potentes. No hay tantos para elegir: o te tocan Lady Macbeth, Medea u Ofelia¡ o te toca Juana. Es un lujo, porque es vehemente, compleja, vulnerable y marc¨® la historia de Europa?. Como un buen cl¨¢sico, sigue vigente hoy en d¨ªa: ?Lo que menos relevante me parece de ella es el amor por su marido. Fue una de las mujeres m¨¢s maltratadas de la historia, traicionada por su padre, su esposo y su hijo¡ y, aun as¨ª, siempre cumpli¨® con ellos. Creo que muchas mujeres se pueden sentir identificadas?.
Vestido rojo con detalles de pedrer¨ªa de Roberto Diz.
Sebastian Sabal-Bruce
El ¨¢rbol geneal¨®gico de los actores, como ocurre en las familias aristocr¨¢ticas, cruza aqu¨ª y all¨¢ sus ramas, aunque con resultados m¨¢s ben¨¦volos, pues no se trata de heredar cromosomas defectuosos, sino personajes inolvidables. Su t¨ªa abuela Julia encarn¨® a Juana en La reina loca de amor (Cayetano Luca de Tena, 1977), impagable grabaci¨®n para TVE que se ha perdido en el archivo. ?Julia y yo lo hemos comentado todo. Nos pas¨¢bamos los libros, analiz¨¢bamos las escenas que ella interpret¨® en su momento. Me dijo que no pod¨ªa dejar escapar este personaje?. El precio que va a tener que pagar puede ser elevado. Isabel es un reto a nivel interpretativo, pues su Juana I de Castilla es el personaje central de la tercera temporada, en la que Irene pondr¨¢ rostro y cuerpo a la reina desde su coronaci¨®n a los 15 a?os hasta su encierro y la proclamaci¨®n como emperador de su hijo Carlos a los 25. Es su salto definitivo a una popularidad que, de momento, ha parecido rehuir. ?No me interesa la fama. ?Que es importante para trabajar? Te doy la raz¨®n. ?A pesar de que no est¨¦ muy de acuerdo? Pues s¨ª. Podr¨ªa ser m¨¢s famosa y haber tenido mucho dinero y que me resultara m¨¢s f¨¢cil conseguir papeles, pero no hubiera sido m¨¢s feliz. Y uno tiene que tener sus prioridades claras y hacer lo que le hace feliz?.
Vestido con detalles de piel y aplicaciones de cristales, de Gucci.
Sebastian Sabal-Bruce
Hasta la fecha, ha aparecido en el papel cuch¨¦ como consorte de su Felipe el Hermoso particular, el tambi¨¦n actor Marti?o Rivas, del que se muestra m¨¢s que enamorada: ?Es inteligent¨ªsimo, tiene una faceta como director sin explotar. Lee much¨ªsimo, es muy listo y me aporta mucho. Es muy cr¨ªtico conmigo y eso me hace crecer?. ?Est¨¢ ella preparada para el qu¨¦ dir¨¢n de las revistas del coraz¨®n? ?Prefiero no salir en ellas, pero si salgo¡ qu¨¦ m¨¢s me da. No es mi trabajo. Se trata de una cosa externa. Es una explotaci¨®n?. Hay una raz¨®n m¨¢s dolorosa para su aversi¨®n hacia ese tipo de periodismo que, como todo, parece remitir a su m¨ªtica familia: ?Recuerdo que una vez, cuando mi abuela estaba ya muy enferma, le hicieron un robado por la calle. Para m¨ª, eso representa la invasi¨®n de la intimidad. Desde entonces, estas fotos me resultan¡ asquerosas?.
Capa larga de vis¨®n y seda con cristales bordados de Dsquared2.
Sebastian Sabal-Bruce
Le gusta pasar inadvertida y no le preocupa mucho la ropa: ?Intento ir c¨®moda, pero favorecida?. Tras gastar toneladas de toallitas desmaquilladoras despu¨¦s de cada funci¨®n, tampoco le seducen las cremas y afeites. ?No me maquillo mucho; me pongo r¨ªmel porque me abre un poco el ojo. El maquillaje que empleas en el teatro no es muy bueno para la piel y ya suficiente me pongo en mi trabajo?. En escena, la cosa cambia: el disfraz, la m¨¢scara, la entusiasman. ?En Isabel es la primera vez que hago un personaje de ¨¦poca. Pepe Reyes, el dise?ador, es un artista, lo hace todo al detalle, al mil¨ªmetro. Da gusto ver su pasi¨®n y la de todo el equipo. Cuando te pones esa ropa que pesa tanto, te transformas. Andas distinto, te mueves distinto, ?y eso ayuda much¨ªsimo!?.
Vestido largo negro con apliques y encaje en la parte superior de Zuhair Murad y pendientes de Bernard Delettrez.
Sebastian Sabal-Bruce
Afirma Irene que se parece a Juana en que dice lo que piensa y no se calla. Est¨¢ muy guapa cuando se enfada: se le sube la sangre a las mejillas con un arrebol encantador. Para lograr ese efecto, solo hay que mentarle la pol¨ªtica cultural de los ¨²ltimos tiempos. ?Hablo porque no todos tenemos la posibilidad de que nos entrevisten y me horroriza lo que est¨¢ ocurriendo. Adem¨¢s, lo hago porque si alguien que me lee no se dedica a esto, me gustar¨ªa que escuchara mi opini¨®n. No entiendo la subida del IVA de los productos culturales. Si valoras a tu pueblo y quieres lo mejor para tu gente, ?por qu¨¦ le pones m¨¢s dif¨ªcil que vaya al teatro o al cine? Son lugares de reflexi¨®n, de uni¨®n, de orientaci¨®n, donde cuestionarse la vida?. Habla y no para de lo mucho que da?a a la profesi¨®n (y a la sociedad en general, eliminando la posibilidad de la inversi¨®n de capital extranjero) la nueva ley de deducciones fiscales al cine; tambi¨¦n se enfurece al recordar a sus amigas, que han tenido que exiliarse por los cinco continentes en busca de trabajo, o de lo mucho que le irrita que la gente joven no se acerque a las salas por la crisis. ?Yo pondr¨ªa las entradas m¨¢s baratas para los j¨®venes y los parados, como pasa en Berl¨ªn?. Suspira una ¨²ltima vez, hastiada: ?No puedo entender por qu¨¦ hay que ponerle trabas a todo, con lo f¨¢cil que ser¨ªa hacer las cosas bien?. Como su abuela, como la gran Irene, menuda y luchadora: lo lleva en la sangre.