Jamie Oliver y la revoluci¨®n de los ?superalimentos?
No hay revoluci¨®n sin h¨¦roes. El chef brit¨¢nico enarbola ahora la bandera de los superalimentos para ofrecer recetas m¨¢s saludables
Dormir. Ese es el sorprendente rosebud del brit¨¢nico Jamie Oliver, Cocinero Kane con una fortuna personal valorada en 180 millones de euros y que, a sus 40 a?os, resume con ese verbo su voluntad de cambio tranquilo en el liderazgo de su imperio gastron¨®mico (y omn¨ªvoro): canal de televisi¨®n, libros (19 t¨ªtulos), restaurantes (51), l¨ªnea de salsas y aceite de oliva y hasta hornos (el m¨¢s barato cuesta 1.800 euros). ?No dorm¨ªa lo suficiente?, comprendi¨® al echar la mirada atr¨¢s, como cualquier mortal, tras cumplir 40 a?os. ?En realidad, todo esto paso? antes de...
Dormir. Ese es el sorprendente rosebud del brit¨¢nico Jamie Oliver, Cocinero Kane con una fortuna personal valorada en 180 millones de euros y que, a sus 40 a?os, resume con ese verbo su voluntad de cambio tranquilo en el liderazgo de su imperio gastron¨®mico (y omn¨ªvoro): canal de televisi¨®n, libros (19 t¨ªtulos), restaurantes (51), l¨ªnea de salsas y aceite de oliva y hasta hornos (el m¨¢s barato cuesta 1.800 euros). ?No dorm¨ªa lo suficiente?, comprendi¨® al echar la mirada atr¨¢s, como cualquier mortal, tras cumplir 40 a?os. ?En realidad, todo esto paso? antes de mi cumplea?os [el 27 de mayo]. Me di cuenta de que ya no me sent¨ªa al cien por cien porque me hab¨ªa acostumbrado a dormir tres o cuatro horas?, confiesa a S Moda. ?As¨ª que tome? la decisi¨®n de disfrutar de al menos siete horas de descanso tantas noches como fuera posible. Cuando tienes cuatro hijos, nunca es f¨¢cil; pero desde entonces me he sentido genial?. Y es que Oliver (Essex, 1975) siempre parece tener la receta para encontrarse bien funciona, ?por que? no comunicarlo a su inmensa audiencia con el poder medi¨¢tico que le ha granjeado la televisi¨®n?
PLATOS DIFERENTES
Su ¨²ltimo libro, Recetas sanas para cada d¨ªa (Grijalbo), abunda en la idea de transformar la realidad a trav¨¦s del yo estomacal. La alimentaci¨®n como campo para la revoluci¨®n y el recetario de cocina como un nuevo El Capital¡ ?No es un libro de dieta. Cuando lo pillas y te pones a cocinar, enseguida te das cuenta de que no vas a pasar hambre?. ?se ha sido desde el principio el gran atractivo de Jamie como cocinero estrella: m¨¢s cerca de la bonhom¨ªa de nuestro Karlos Argui?ano que del sargento Gordon Ramsay, ha sabido integrar la ligereza mediterr¨¢nea (en su versi¨®n italiana) con la sofisticaci¨®n oriental para convertir la cocina en un campo. Y si a ¨¦l le de juegos hipster donde mancharse, re¨ªr y disfrutar lejos de la factor¨ªa del fish&chips. Y todo ello con la sonrisa m¨¢s fotog¨¦nica de las islas brita?nicas (con permiso de Ewan McGregor): si alguna vez existi¨® el primer fofisano en desplegar su sex appeal, ¨¦se fue Jamie. ?Procuro cocinar sano entre semana, y cuando llega el fin de semana no tengo problema en relajarme. Todo tiene que ver con buscar un equilibrio?. Tanta importancia merece ese margen para el relax que los men¨²s diarios de su libro apenas alcanzan de media las 1.600 calor¨ªas, dejando hueco al picoteo o la copa de vino, cocinando con producto local y a un precio medio por plato de 3,50 euros.
EL MEN? ES LA CUESTI?N
?Que? le queda por hacer? ?Mucho: no acabamos de enfrentar el problema de la obesidad, necesitamos un gobierno que de? el paso adelante y lidere esa lucha. Voy a dedicar mis pr¨®ximos 20 a?os a reducir esa epidemia, en especial entre los m¨¢s peque?os?. Una capacidad para asumir retos a largo plazo que ya ha puesto a prueba con ¨¦xito. Su m¨¢s conocida gesta fue contra McDonald¡¯s, a la que acuso? de lavar sus hamburguesas con hidr¨®xido de amon¨ªaco. Ahora ha puesto la diana en la industria del az¨²car, una cruzada que impulsa con decisi¨®n desde la Jamie Oliver Food Foundation. ?Abogo por una tasa a los refrescos azucarados, porque es lo que los ni?os beben demasiado a menudo. Nadie deber¨ªa hacer negocio suministrando eso?.
Ser padre de cuatro hijos, fruto de su relaci¨®n con la ex modelo Juliette Norton, y un crecimiento personal que en su caso podr¨ªamos llamar tambi¨¦n metab¨®lico han hecho evolucionar su mirada sobre la cocina: del confort food a los superfood, del hedonismo culinario a un dom¨¦stico con calma y buena letra. ?Basta con aumentar el uso de vegetales, cambiar el pan blanco y la pasta por versiones integrales y rebajar el consumo de carne roja?, asegura. Una canci¨®n que en Espa?a nos suena y que el cocinero renueva con la apuesta por lo que llama ?superalimentos?. ?No son ingredientes m¨¢gicos. Por citar algunos, hablar¨ªa de los huevos y el tofu, llenos de nutrientes, o la batata: util¨ªzala en lugar de la patata y notar¨¢s la diferencia?. La prueba de que otro mundo nutricional es posible.