Dos grandes fortunas y una secta: la improbable historia de amor de Joaquin Phoenix y Rooney Mara
Ella, nacida en la opulencia y descendiente de dos de las familias m¨¢s poderosas de Estados Unidos. ?l, hijo de hippies errantes y marcado por la tragedia. As¨ª se form¨® la pareja de culto por excelencia de Hollywood.
¡°Aqu¨ª, en alg¨²n lugar, no s¨¦ d¨®nde, hay un sucio drag¨®n, y me gustar¨ªa arrancarle las alas, amarrarlo con una manta y dormir con ¨¦l para siempre¡ Te quiero. Gracias¡±. Exc¨¦ntrico, ins¨®lito y muy rom¨¢ntico. El final del discurso con el que Joaquin Phoenix declar¨® su amor incondicional a Rooney Mara tras recibir un premio a toda su carrera en el pasado festival de Toronto, sintetiza mejor que cualquier figura ret¨®rica el alma del romance m¨¢s at¨ªpico entre est...
¡°Aqu¨ª, en alg¨²n lugar, no s¨¦ d¨®nde, hay un sucio drag¨®n, y me gustar¨ªa arrancarle las alas, amarrarlo con una manta y dormir con ¨¦l para siempre¡ Te quiero. Gracias¡±. Exc¨¦ntrico, ins¨®lito y muy rom¨¢ntico. El final del discurso con el que Joaquin Phoenix declar¨® su amor incondicional a Rooney Mara tras recibir un premio a toda su carrera en el pasado festival de Toronto, sintetiza mejor que cualquier figura ret¨®rica el alma del romance m¨¢s at¨ªpico entre estrellas del s¨¦ptimo arte. Iconos del cine de culto, polinominados al Oscar y figuras inescrutables de las colinas de Los ?ngeles, la pareja contradice todos los mandamientos del manual de celebridad hollywoodiense. A saber: no posan en p¨²blico, no hablan sobre su relaci¨®n y sus gui?os rom¨¢nticos se reducen a apodos tan et¨¦reos y cuestionables como ¡°sucio drag¨®n¡±, cuyo origen m¨¢s probable ¨Cy deseable- est¨¢ en el personaje de Lisbeth Salander (The girl with the dragon tatoo, de la saga Millennium) al que dio vida Mara. Una historia de amor tan misteriosa como consolidada entre dos personas que comparten perfil profesional, pero contextos familiares opuestos. Ella, criada en la abundancia y descendiente de dos de las familias m¨¢s poderosas de Estados Unidos. ?l, hijo de hippies errantes y con una infancia marcada por la tragedia. Aqu¨ª hay una pel¨ªcula estupenda.
¡°Distante, g¨¦lida, juguetona, opaca, t¨ªmida, divertida, impenetrable, precavida, amable e ilegible¡±. Seg¨²n el periodista David Amsden, es necesario contar con la lista completa de adjetivos para poder definir a Rooney Mara. La protagonista de filmes como Carol es, a sus 34 a?os, un perfecto enigma para el p¨²blico mayoritario pese a su nutrido curr¨ªculum, su innegable impacto estil¨ªstico en la alfombra roja y haber aparecido en los televisores y marquesinas de todo el mundo anunciando el ¨²ltimo perfume de Givenchy. Pese a sus nominaciones al Oscar y, aunque pueda desconcertar al cin¨¦filo de pro, en Estados Unidos su nombre resuena con mayor fuerza en la prensa deportiva que en la cinematogr¨¢fica.
Rooney Mara es fruto del matrimonio que uni¨® a dos de las familias m¨¢s poderosas del pa¨ªs. Los Mara, por el lado paterno, son los due?os del equipo de f¨²tbol americano New York Giants, una de las franquicias deportivas m¨¢s valiosas sobre la tierra. Los Rooney, por la materna, poseen los Pittsburgh Steelers, un club no menos hist¨®rico en la NFL. La joven naci¨® y creci¨® en el municipio rural de Bedford, a una hora al norte de Manhattan, una de las comunidades m¨¢s ricas de Estados Unidos por las n¨®minas millonarias de sus ilustres vecinos. A pesar de haberse criado en la opulencia, Mara estudi¨® en un colegio p¨²blico y no dej¨® que sus apellidos la convirtieran en una Paris Hilton de turno. Se gradu¨® en psicolog¨ªa y organizaciones no gubernamentales y pas¨® varios meses viajando por el mundo. Al contrario que su hermana, la tambi¨¦n actriz Kate Mara (Cuatro fant¨¢sticos), que comenz¨® su carrera como int¨¦rprete siendo una adolescente e incluso se atrev¨ªa a cantar el himno estadounidense en la previa de los partidos de los Giants, Rooney esper¨® a terminar el instituto para iniciar su recorrido profesional.
La amistad entre los actores, ahora pareja, se remonta a 2012, cuando coincidieron en el rodaje de Her, el drama rom¨¢ntico de Spike Jonze en el que el personaje de ¨¦l establec¨ªa una relaci¨®n rom¨¢ntica con un sistema operativo inteligente al que prestaba su voz Scarlett Johansson. La relaci¨®n, sin embargo, no empez¨® del todo bien. En una reciente entrevista con la edici¨®n estadounidense de Vanity Fair, Phoenix confes¨® que al principio pensaba que ella le detestaba. Cuando fue consciente de que ¡°solo era t¨ªmida y que a ella tambi¨¦n le ca¨ªa bien¡±, no tard¨® en quedar prendado de sus encantos. ¡°Ella es la ¨²nica chica a la que he buscado en Internet. Solo ¨¦ramos amigos, amigos por email. Nunca antes hab¨ªa hecho eso, buscar a una chica en la red¡±, a?adi¨®.
La historia de Joaquin Phoenix es bastante diferente. Cuando lleg¨® al mundo, sus padres ped¨ªan dinero para poder comer mientras que sus hermanos River y Rain, no escolarizados, actuaban en las calles de San Juan, Puerto Rico, cantando y tocando la guitarra a cambio de la generosidad de los viandantes. Los Phoenix, hippies contraculturales, formaban parte de una secta religiosa, los Ni?os de Dios, y se convirtieron en evangelizadores n¨®madas por diferentes ciudades del continente americano. Su defensa del amor libre y la utilizaci¨®n del sexo para confraternizar con los dem¨¢s integrantes del culto y captar nuevos miembros pronto se tradujo en denuncias de abuso sexual. Algunas, con ni?os como v¨ªctimas. El propio River Phoenix, nominado al Oscar por Un lugar en ninguna parte, confes¨® que hab¨ªa perdido la virginidad a los cuatro a?os. Cuando Joaquin todav¨ªa no alcanzaba la edad escolar, la familia volvi¨® a Estados Unidos escondida en un barco de cargamento. El ¨¦xito de River en la interpretaci¨®n ¨Cfue una de las promesas m¨¢s brillantes del Hollywood de los noventa¨C les sac¨® de la pobreza extrema. El fallecimiento a los 23 a?os del actor a causa de una sobredosis marcar¨ªa para siempre a su hermano peque?o, que tambi¨¦n empezaba a hacer sus pinitos en el s¨¦ptimo arte.
La qu¨ªmica y complicidad entre Mara y Phoenix fue visible tanto dentro de la pantalla como en la gira de promoci¨®n de Her, pero por aquel entonces la joven manten¨ªa una relaci¨®n con el director de cine Charlie McDowell, actual pareja de Lily Collins y ex de Emilia Clarke. En 2016, durante el rodaje italiano de la pel¨ªcula donde se reencontrar¨ªan, Mar¨ªa Magdalena, el amor se abri¨® paso definitivamente. Los fot¨®grafos captaron las primeras fotos juntos entrando en las instalaciones de un spa para compartir un retiro detox a principios de 2017 y en primavera confirmaron su relaci¨®n al desfilar en la alfombra roja del festival de Cannes. Saltando dos a?os en el tiempo, hasta la premiere internacional de Joker celebrada en el reciente certamen de Venecia, el romance no solo se ha consolidado sino que Mara ya luce un anillo de compromiso en su dedo anular. A pesar de que hace no mucho una fuente cercana a la pareja asegur¨® que el matrimonio era ?demasiado mainstream? para ellos, la prensa ya ha confirmado los rumores de boda.
El perfil de Phoenix es uno de las m¨¢s controvertidos del cine actual. Su talento es tan innegable como su fama de ser exc¨¦ntrico y de dif¨ªcil trato, bien ganada si uno revisa sus apariciones y entrevistas de promoci¨®n o sus encontronazos con compa?eros de reparto como Robert De Niro. Dice haber superado su adicci¨®n al alcohol y una amistad t¨®xica con el ganador del Oscar Casey Affleck (Manchester frente el mar), que le llev¨® a estar involucrado en una demanda de acoso sexual por parte de dos trabajadoras del fallido falso documental I¡¯m Still Here. Desde que comenz¨® a salir con la joven neoyorquina, el mismo int¨¦rprete que confes¨® que hab¨ªa querido ¡°quitarse del medio¡± en diferentes ocasiones, ahora no solo repele la controversia sino que protagoniza portadas que llevan como titular la cita: ¡°Amo mi jodida vida¡±.
Puede que sea resultado del convulso historial vital del actor el hecho de que su realidad actual parezca simple hasta el hast¨ªo. Mara y Phoenix pasan la mayor parte de su tiempo en su mansi¨®n de Hollywood Hills, se alimentan a base de productos org¨¢nicos (la actriz es vegana) y sus pocas apariciones p¨²blicas suelen tener que ver con manifestaciones activistas en defensa de los derechos de los animales. Se levantan a las seis de la ma?ana y las nueve de la noche suelen estar en la cama despu¨¦s de meditar, pasear al perro, practicar karate, leer guiones y ver series documentales sobre cr¨ªmenes reales en Netflix. Quiz¨¢ hemos abaratado demasiado la definici¨®n de exc¨¦ntrico. Si Gloria Swanson levantara la cabeza¡