Robert Pattinson: ?Mis favoritas son las historias oscuras, sin esperanza?

No se meti¨® al p¨²blico en el bolsillo. Tampoco logr¨® entretenerlo. Pero s¨ª despert¨® un instinto muy femenino: el maternal. Aquella no fue la noche de Robert Pattinson. El brit¨¢nico, de 27 a?os, se subi¨® al escenario de Soho House, un club privado de Los ?ngeles, para hablar sobre su primera campa?a para una firma de lujo: Dior. Y demostr¨® que lo suyo no son las plateas abarrotadas. Y menos de periodistas. Unos 30 medios internacionales, entre los que se encontraba esta revista, hab¨ªan acudido al estreno de 1000 Lives, el anuncio de Dior Homme que Pattinson protagoniza (en ...

No se meti¨® al p¨²blico en el bolsillo. Tampoco logr¨® entretenerlo. Pero s¨ª despert¨® un instinto muy femenino: el maternal. Aquella no fue la noche de Robert Pattinson. El brit¨¢nico, de 27 a?os, se subi¨® al escenario de Soho House, un club privado de Los ?ngeles, para hablar sobre su primera campa?a para una firma de lujo: Dior. Y demostr¨® que lo suyo no son las plateas abarrotadas. Y menos de periodistas. Unos 30 medios internacionales, entre los que se encontraba esta revista, hab¨ªan acudido al estreno de 1000 Lives, el anuncio de Dior Homme que Pattinson protagoniza (en dior.com desde el 1 de septiembre). ?Soy incapaz de ver al p¨²blico como tal. A mis ojos son individuos, y mi cabeza intenta entablar una conversaci¨®n con cada uno de ellos. Y eso es imposible?, se disculpa al d¨ªa siguiente sentado en un sof¨¢ del hotel Beverly Hills.

En las distancias cortas, el vampiro recupera la seguridad. Adi¨®s a la timidez. Y a las carcajadas fuera de lugar. En el cara a cara, Pattinson ¨Ccon barba, gorra, vaqueros y camiseta¨C mide el tempo y la palabra. E inspira instintos muy diferentes a los maternales.

No le gusta hablar de su vida privada, ni de su pasado como modelo. Su objetivo: construir una carrera s¨®lida, dejar atr¨¢s las etiquetas de it boy y de fen¨®meno de masas. ?Si pudiera ir a Cannes cada a?o, me conformar¨ªa con un sueldo inferior. Me gustar¨ªa que todas mis pel¨ªculas pasaran por ese festival?, nos asegura. Y habla en serio. Sus primeros intentos tras la saga de Crep¨²sculo fracasaron: Agua para elefantes (2011) y Bel Ami (2012) no lo rescataron del circuito mainstream. Pero Cosm¨®polis (2012), la pel¨ªcula de David Cronenberg, s¨ª. ?No se parec¨ªa a nada de lo que hab¨ªa hecho antes. Y eso me fascin¨®?, admite. El porvenir pinta a¨²n mejor. El a?o que viene estrena Mission: Blacklist (Jesper Ganslandt), The Rover (David Mich?d), Queen of the Desert (W. Herzog) y Maps to the Stars, el pr¨®ximo filme de David Cronenberg. ?Es m¨¢s accesible que Cosm¨®polis, aunque no tanto como Una historia de violencia. El gui¨®n es oscuro. A m¨ª me parece c¨®mico, pero hay que tener un sentido del humor muy sui g¨¦neris para verlo as¨ª; no es una comedia?.

La capacidad para captar la iron¨ªa se la debe, en parte, a sus ra¨ªces inglesas. Pattinson creci¨® en Barnes, al suroeste de Londres. De ni?o, sus hermanas lo vest¨ªan de chica. Su fisionom¨ªa ¨Centonces algo afeminada¨C no desentonaba. Poco queda de esos rasgos ani?ados: una mirada azul, enmarcada por unas pesta?as interminables y cierta delicadeza. Pero mucho de su pasado como modelo. Su madre, agente de moda, le introdujo en el sector y Robert pos¨® hasta los 16 a?os. Luego le entr¨® el gusanillo de la interpretaci¨®n y desde su papel en Harry Potter y el c¨¢liz de fuego (2005) no para. Los cr¨ªticos coinciden: es m¨¢s que una cara bonita.

Uno de sus pr¨®ximos proyectos es Queen of the Desert, de Herzog. ?Ahora ¨²nicamente quiere hacer cine de autor?

Quiero trabajar con genios. Estoy intentando recrear mi videograf¨ªa favorita de los 17 a?os. Conoc¨ª a Werner, congeniamos y, dos semanas despu¨¦s, me ofreci¨® el papel de Lawrence de Arabia. Empezaremos a rodar a finales de a?o.

En 2013 no ha estrenado muchas pel¨ªculas. Pero le llueven los papeles. Para The Rover, un western moderno, ha pasado dos meses en un pueblo de Australia cubierto de polvo, sudando y rodeado de moscas. No es una visi¨®n muy alentadora.

Se rod¨® en el desierto. Mi personaje se rompe los dientes, sangra, se llena de barro. En el set, nadie se esforz¨® en que pareciera guapo. Justo lo contrario que en Crep¨²sculo. Y nunca hab¨ªa salido en un filme sin camiseta porque me da verg¨¹enza. Pero en esta cinta, no la llevo nunca.

Es un paso¡­

?S¨ª, desde ahora no me la pondr¨¦ jam¨¢s!

Los fans deben estar tristes porque se ha cortado el pelo.

Era un signo distintivo. Pero fue fruto de la dejadez. No iba a la peluquer¨ªa porque no me apetec¨ªa pagar por un corte. Solamente me lo arreglaba cuando ten¨ªa que rodar pel¨ªculas.

Entonces, ?no se cuida?

Necesito hacerlo m¨¢s. Ayer mismo estaba pensando en las arrugas y en las canas. No las esconde. Pattinson se esfuerza por parecer menos guapo.?

Getty Images

En ese empe?o, se asemeja a Brad Pitt. Y a Nan Goldin, la fot¨®grafa de la campa?a de Dior Homme, le viene como anillo al dedo. La artista, c¨¦lebre por retratar el lado m¨¢s oscuro de la vida, enfatiza su rostro asim¨¦trico y lo envejece.

Ayer en la rueda de prensa admiti¨® sentirse adulto. ?En qu¨¦ sentido?

Es un sentimiento, empez¨® hace ocho meses, cuando cumpl¨ª 27. Llevo a?os tomando decisiones de adulto. Ped¨ªa consejo a mis padres, pero no sab¨ªan qu¨¦ decirme. Afortunadamente, ahora me siento m¨¢s c¨®modo.

Ha interpretado a Edward Cullen en cinco pel¨ªculas, lo suficiente para cogerle cari?o o man¨ªa. ?Fue dif¨ªcil despedirse del vampiro y de la estabilidad de una saga?

No habr¨ªa podido rodar otra m¨¢s. Cada vez se me hac¨ªa m¨¢s duro; sent¨ªa que me estaba repitiendo.

?C¨®mo afrontaba los prejuicios? Al rodar cine adolescente le encasillar¨ªan, pensar¨ªan que era poco inteligente.

Los actores que han reconstruido su carrera despu¨¦s de una franquicia suelen ser listos. Un proyecto como Crep¨²sculo marca: no se trata solo de seguir trabajando, sino de no perder la cabeza. Edward era muy joven, iba al instituto. El p¨²blico pensaba que yo tambi¨¦n, pero en realidad ten¨ªa 21 a?os.

No le gusta hablar de su vida privada. Pero es un fen¨®meno adolescente y representa una marca global. ?C¨®mo se enfrenta al estrellato?

La vida son decisiones. Yo escog¨ª esta profesi¨®n y, a la vez, dispuse no mezclar lo personal y lo profesional. Eso me ha permitido no obsesionarme: no pretendo que los medios y el p¨²blico me conozcan de verdad. Si lo hiciera, me volver¨ªa loco.

No usa cremas, pero s¨ª le gusta comprar y hacer estilismos: cre¨® el de Edward en Crep¨²sculo.

El rodaje era en Canad¨¢ y se retras¨® dos semanas, no ten¨ªa nada que hacer, as¨ª que me fui de compras. Pero no ten¨ªa dinero. Mandaba fotos de las prendas que quer¨ªa con mensajes como ?Creo que Edward deber¨ªa vestir estos vaqueros?. Muchas colaron, ?el estudio acab¨® pag¨¢ndome la ropa!

En el anuncio de Dior, su estilo recuerda al de Jean-Paul Belmondo y al de Steve McQueen. ?Le gusta su est¨¦tica?

Soy muy pr¨¢ctico: lo m¨ªo son las prendas b¨¢sicas, que se pueden llevar durante una semana seguida. Los anuncios de fragancias suelen ser perfectos y nosotros busc¨¢bamos una est¨¦tica dura. Para el rodaje de Dior cont¨¢bamos con muchas opciones, pero yo me empe?¨¦ en llevar todo el rato lo mismo. Acab¨¦ arruinando una chaqueta. Y me salt¨¦ los c¨®digos: llevaba una camiseta debajo de la camisa. Lo ve¨ªa muy a?os 50, muy masculino. Pero en Francia es antiest¨¦tico, lo contrario a lo chic.

Seguro que acaba siendo tendencia. ?Esas son sus d¨¦cadas favoritas, los 50 y los 60?

S¨ª. Me gusta su esp¨ªritu funcional, muchos trajes parec¨ªan uniformes. No soy partidario de la frivolidad. Una vez dijo que preferir¨ªa pasar 10 a?os con una chica que 10 minutos. Sigo pensando lo mismo, pero depende de la persona.

Ha estado muy implicado en el anuncio de Dior. ?Si dirigiera y produjera un filme, de qu¨¦ g¨¦nero ser¨ªa?

Mi perspectiva como director es muy diferente: sue?o con rodar una pel¨ªcula de gran presupuesto¡­ Una de ciencia ficci¨®n.

?Su cinta favorita de este tipo?

Blade Runner y La guerra de las galaxias. La ciencia ficci¨®n me encanta, me fascina c¨®mo crea universos. Cuando eres ni?o y ves El imperio contraataca te identificas con los personajes, te crees uno de ellos incluso cuando la pel¨ªcula ha terminado. Es fascinante. Yo, por ejemplo, sigo queriendo los juguetes de Star Wars. Si alguien me regalara una espada l¨¢ser por mi cumplea?os, flipar¨ªa.

Ahora que lo veo con gorra, creo que ten¨ªa un grupo de rap en el instituto.

[Risas]. S¨ª. Iba a un colegio privado y mis amigos y yo qued¨¢bamos para tocar todos los d¨ªas. Estaba obsesionado: escrib¨ªa rap en clase. Desde los 15 hasta los 17 a?os, me lo tom¨¦ muy en serio. Me sigue gustando y me encantar¨ªa grabar un disco.

Muchos de sus filmes se basan en libros. ?Qu¨¦ literatura le gusta?

Antes le¨ªa mucho. Pero mi concentraci¨®n ha empeorado. Mis favoritos son los escritores rusos y las historias oscuras donde no hay esperanza.

Entonces, ?es usted nost¨¢lgico y pesimista?

No. No s¨¦ por qu¨¦ me gusta este tipo de historias. Pero es as¨ª. El otro d¨ªa rele¨ª Dublineses, de James Joyce. Le dej¨¦ Un caso triste, mi relato favorito, a un amigo. Me dijo que era lo m¨¢s deprimente que hab¨ªa le¨ªdo en su vida. A m¨ª me encanta. Hay algo en ese tipo de historias que me hace conectar conmigo mismo y eso me hace feliz.