Tilda Swinton: ?De los animales se pueden aprender las cosas m¨¢s importantes de la vida?
La m¨¢s at¨ªpica y camale¨®nica de su generaci¨®n, actriz y musa de la vanguardia art¨ªstica, adorada por la moda, posa y habla en exclusiva para S Moda revelando su sensibilidad. Estrena Okja, s¨¢tira sobre los transg¨¦nicos, en la que interpreta a una heredera con similitudes a Ivanka Trump.
Una familia arist¨®crata la vio nacer hace 56 a?os. Es hija de un general escoc¨¦s y nieta de una modelo del pintor John Singer Sargent. Es una mujer de ojos anfibios. Con esa clase de vertebrados tambi¨¦n comparte una inusual capacidad de adaptaci¨®n al medio. Se desenvuelve igual de bien en el agua y en la tierra. Fue compa?era de promoci¨®n de Lady Di en una escuela de se?oritas brit¨¢nicas, pero luego se march¨® a ?frica para trabajar como cooperante. Pas¨® r¨¢pidamente por la Royal Shakespeare Company, pero no tard¨® en entender que lo suyo iba a ser el cine.
...
Una familia arist¨®crata la vio nacer hace 56 a?os. Es hija de un general escoc¨¦s y nieta de una modelo del pintor John Singer Sargent. Es una mujer de ojos anfibios. Con esa clase de vertebrados tambi¨¦n comparte una inusual capacidad de adaptaci¨®n al medio. Se desenvuelve igual de bien en el agua y en la tierra. Fue compa?era de promoci¨®n de Lady Di en una escuela de se?oritas brit¨¢nicas, pero luego se march¨® a ?frica para trabajar como cooperante. Pas¨® r¨¢pidamente por la Royal Shakespeare Company, pero no tard¨® en entender que lo suyo iba a ser el cine.
Su presencia en las listas de las mejores vestidas del planeta resulta semiobligatoria. Ha sido imagen de Chanel. Militante por los derechos LGTB en la Rusia de Putin. Impulsora de documentales y performances. Depositaria de esa escurridiza calidad a la que llamamos cool. Madre de dos gemelos que ya suman 20 a?os. Ganadora de un Oscar. Int¨¦rprete de tres personajes masculinos. Musa de Derek Jarman en el sentido m¨¢s literal: sol¨ªa estrecharle la mano mientras escrib¨ªa sus guiones. Ha encarnado a un hermafrodita ideado por Virginia Woolf. A la l¨ªder de una secta new age. A la bruja blanca de Narnia. A una pediatra divorciada. A la esposa de David Bowie. A una vampira de Detroit. A una mujer centenaria. A la directora de una revista de moda. A la m¨¢s chismosa columnista de Hollywood.
La actriz ha sumado a esa peculiar familia a Lucy Mirando, heredera de un imperio agroalimentario decidido a terminar con el hambre en el mundo, a condici¨®n de que le reporte cuantiosos beneficios. En Okja (Netflix), interpreta a otra de esas sutiles malvadas que tanto le fascinan. Dice que esta s¨¢tira sobre nuestro presente, donde vuelve a ponerse a las ¨®rdenes del cineasta surcoreano Bong Joon-ho despu¨¦s de Snowpiercer, tambi¨¦n puede entenderse como una gran historia de amor rom¨¢ntico. ?Solo que entre una ni?a y un cerdo gigante?, sonr¨ªe. Todo empieza con un proyecto piloto. La multinacional selecciona a 26 campesinos de todos los rincones del planeta y entrega un animal a cada uno, con el compromiso de que lo devuelvan diez a?os m¨¢s tarde. Esta espectacular operaci¨®n de marketing se ir¨¢ al traste cuando una ni?a coreana, que ha crecido con el animal en una casa perdida en la monta?a, se niega a entregar a su querida mascota para que hagan entrecots transg¨¦nicos con ella.
Okja lleva semanas arrastrando la pol¨¦mica. Principalmente, porque la financi¨® Netflix, que la estren¨® el 28 de junio. Durante su presentaci¨®n mundial en el Festival de Cannes, el presidente del jurado, Pedro Almod¨®var, critic¨® abiertamente que la plataforma sabotease el circuito tradicional del cine neg¨¢ndose a estrenarla en pantalla grande. ?Me parecer¨ªa una enorme paradoja premiar un filme que no pueda verse en una sola sala?, advirti¨® desde el primer d¨ªa. La pel¨ªcula se march¨® con las manos vac¨ªas. A Swinton no le interesa prolongar la pol¨¦mica, pero no se resiste a poner algunos puntos sobre las ¨ªes. Entre otras cosas, porque este es su beb¨¦: la ha producido ella. Adem¨¢s, Okja est¨¢ lejanamente emparentada con uno de los filmes que la incitaron a dedicarse a la actuaci¨®n: Al azar de Baltasar, de Robert Bresson, la historia de amistad entre una ni?a y un asno. ?Nunca he visto mejor interpretaci¨®n que la de ese burro?, sostiene la actriz.
La pel¨ªcula habla de la relaci¨®n entre humanos y animales. ?Han sido importantes a lo largo de su vida?
He vivido la pr¨¢ctica totalidad de mi existencia en compa?¨ªa de animales. Algunos de ellos eran humanos. De todos cuantos no forman parte de nuestra especie, creo que uno puede aprender la mayor¨ªa de cosas importantes en la vida. Perspectiva. Paciencia. Lealtad. El valor de una buena siesta. El valor de una buena comida. La capacidad de atrapar una pelota en el aire. Autosuficiencia. Interdependencia. Instinto grupal. Empat¨ªa. Sentido del humor. Optimismo.
En algunas de sus pel¨ªculas, Bong Joon-ho ha descrito las distintas formas que puede adoptar el fascismo. ?Tambi¨¦n en Okja?
S¨ª. La pel¨ªcula habla del fascismo que implican los enga?os y las manipulaciones del corporativismo, de la estafa al pueblo que comporta la causa del mayor provecho posible y de esa condescendencia antidemocr¨¢tica que demuestran los herederos de las grandes fortunas respecto al 99% restante de la poblaci¨®n.
Gianfranco Tripodo \n","caption":"\u201cThank you for directing this little movie\u201d [\u00abGracias por dirigir esta peque\u00f1a pel\u00edcula\u00bb], le dijo Tilda Swinton a Gianfranco Tripodo, nuestro fot\u00f3grafo, cuando acabaron la sesi\u00f3n para esta entrevista en un hotel de Mil\u00e1n.","title":"tilda swinton 1"}
Desde luego. Cada vez somos m¨¢s conscientes de la posibilidad de que cierto tipo de gran capitalismo adopte una deriva inequ¨ªvocamente fascista. Para impedir esa posibilidad, lo mejor es practicar una oposici¨®n frontal. Donde haya exclusi¨®n, promover la inclusi¨®n. Donde haya ataques emocionales, utilizar un discurso racional. Donde exista la meritocracia competitiva, abogar por la cooperaci¨®n democr¨¢tica.
?Es cierto que se inspir¨® en Ivanka Trump, hija del presidente estadounidense, para interpretar a su personaje en la pel¨ªcula?
En realidad, la descubr¨ª en televisi¨®n durante la convenci¨®n republicana de 2016. Ya estaba caracterizada como mi personaje durante el rodaje de la pel¨ªcula. Lo que vi no fue una influencia en absoluto. Al rev¨¦s, me pareci¨® que la vida estaba imitando al arte, hasta el punto de preguntarme si no piratearon nuestro metraje en busca de inspiraci¨®n¡
?Hasta qu¨¦ punto le da miedo Trump?
No me siento asustada. Solo un poco agotada. Pero me siento optimista. Prefiero mirar adelante.
?C¨®mo reacciona ante la pol¨¦mica que Okja protagoniz¨® en el Festival de Cannes?
Los mayores festivales del mundo deben acoger este tipo de di¨¢logo sobre el futuro del cine, en todas sus formas. Para eso sirven. Parte del cometido de un certamen pasa por celebrar el pasado, con sus ciclos de pel¨ªculas. Otro objetivo es reflejar el presente, con sus estrenos de pel¨ªcula. Y una tercera debe centrarse en el futuro, a trav¨¦s de estas conversaciones dial¨¦cticas. ?Qu¨¦ lugar mejor que Cannes para debatir sobre las formas en que podemos proteger el cine, pero tambi¨¦n las maneras de hacerlo avanzar?
?Entiende la resistencia a aceptar a plataformas como Netflix en el circuito tradicional que representan los festivales de cine? ?O le parece un s¨ªntoma de conservadurismo?
Entiendo y apoyo la vigilancia de quienes se muestran preocupados por proteger la experiencia de ver una pel¨ªcula en una sala. Y, a la vez, creo que debemos adoptar una perspectiva m¨¢s escrupulosa en este debate. Algunos de los cineastas m¨¢s visionarios de todo el mundo encuentran apoyo a sus pel¨ªculas en Netflix y no en otros estudios. Por ejemplo, Okja no existir¨ªa sin ese apoyo. Si queremos recrimin¨¢rselo a alguien, deber¨ªa ser a esos otros estudios que no prestan su ayuda, y no a las pel¨ªculas en s¨ª. Y todav¨ªa menos a los cineastas¡
?Logra imaginar un futuro sin salas de cine?
No puedo imaginar un futuro donde los seres humanos dejemos de querer sentarnos en la oscuridad para observar la magia del cine proyectada en una pantalla grande. El cine es una vieja dama fabulosamente el¨¢stica. Me parece la m¨¢s humana de las formas de arte, porque nos invita a ponernos en la piel del otro. Yo creo que necesitamos el cine y su escala. Pero tambi¨¦n dir¨ªa que hay lugar para todos. Ni el cine sonoro, ni la televisi¨®n, ni el DVD lograron arrinconar su lugar en nuestra vida colectiva y en nuestra imaginaci¨®n.
En los ¨²ltimos a?os, parece haber escogido pel¨ªculas y personajes m¨¢s c¨®micos. ?Le interesa hacer re¨ªr m¨¢s que en otras ¨¦pocas?
Sinceramente, siempre he encontrado que mi trabajo era bastante divertido. Entretenernos es uno de los grandes obsequios que debemos perseguir en la vida. De ni?a, mis primeras interpretaciones fueron c¨®micas. Esos fueron los papeles que me dieron el ¨ªmpetu para empezar a actuar cuando era una estudiante.
Otra constante de los ¨²ltimos tiempos son sus transformaciones f¨ªsicas. Por ejemplo, en El Gran Hotel Budapest, Snowpiercer o Y de repente t¨², en la que muchos ni siquiera la reconocieron.
Interpretar es algo muy simple. Solo se trata de disfrazarse y ponerse a jugar. No es m¨¢s sofisticado ni m¨¢s serio que un grupo de ni?os simulando ser piratas o hadas. Pero, dependiendo del calibre de la pel¨ªcula, puede implicar detalles meticulosos, como la adopci¨®n de una voz determinada o un trabajo preciso respecto a tu propio cuerpo. Por ejemplo, en Julia, en la que interpretaba a una mujer alcoh¨®lica, com¨ª muchos pasteles para que mi cuerpo no pareciera excesivamente saludable. En caso contrario, no hubiera resultado cre¨ªble. En otras pel¨ªculas de registro m¨¢s exagerado, como Snowpiercer o El Gran Hotel Budapest, te puedes permitir otro tipo de transformaciones prost¨¦ticas. Todo esto forma parte de mi trabajo de forense durante la preproducci¨®n. Pero no hace falta ser un genio para hacerlo¡
En pocos meses ha encadenado una pel¨ªcula Marvel y varios t¨ªtulos de arte y ensayo. Ha protagonizado campa?as de moda, pero tambi¨¦n ha producido un documental sobre el escritor John Berger. ?Qu¨¦ la lleva a participar en proyectos tan diversos?
Lo que est¨¢ describiendo es, simplemente, mi vida. Me limito a seguir mi olfato y a crear nuevas relaciones con los dem¨¢s. O a veces desarrollo otras m¨¢s antiguas. As¨ª funciona mi existencia¡
Cuando le proponen un nuevo papel para un filme, ?qu¨¦ preguntas suele hacerse? Una vez dijo que escog¨ªa sus papeles en funci¨®n de si le apetec¨ªa ?encontrarse con el director desayunando en el hotel?¡
Hay otras. ?Qu¨¦ significa el personaje respecto al resto de la pel¨ªcula? ?Qu¨¦ energ¨ªas e ingredientes voy a necesitar? ?Cu¨¢ntos di¨¢logos ser¨¦ capaz de eliminar?
?La ropa de un personaje es importante?
Mucho. La ropa es una manera r¨¢pida de dar a entender qu¨¦ elecciones puede adoptar un personaje. Eso tambi¨¦n sucede en la vida. En las pel¨ªculas hay que construir r¨¢pidamente un sentido de familiaridad con el personaje antes de empezar a contar la historia. En ese proceso, cada detalle cuenta.
Pese a ser un icono del estilo, suele decir que no sabe nada de moda y que pasa la mayor parte de su tiempo en tejanos. ?C¨®mo ha evolucionado su gusto?
No s¨¦ si ha evolucionado. M¨¢s bien se ha clarificado. El tacto de la ropa ¨Cno solo su comodidad, sino tambi¨¦n su peso y su movimiento¨C se ha convertido en algo mucho m¨¢s importante que el aspecto de la prenda en s¨ª. No s¨¦ si es porque vivo lejos de la ciudad o porque en mi casa hay pocos espejos, pero es as¨ª. Por otra parte, tengo el privilegio extraordinario de poder vestir ropa hecha por personas a las que quiero. Es un lujo similar al de vivir rodeada de las pinturas, escritos o pel¨ªculas de mis seres queridos. Me hace sentir que estoy en contacto permanente con ellos. Bajo los focos, donde siempre me siento muy t¨ªmida, me siento m¨¢s acompa?ada.
?Qu¨¦ dise?adores le interesan?
Llevar la ropa que dise?a Haider Ackermann, uno de mis amigos m¨¢s ¨ªntimos, hace que la experiencia de una alfombra roja se convierta en algo as¨ª como un proyecto compartido. De esa manera, es como si dejara de estar sola. A veces, pienso que no ser¨ªa capaz de salir a la arena p¨²blica si no pudiera vestir ropa de gente a la que quiero.
Se cumplen 25 a?os del papel que le report¨® la fama, el protagonista de Orlando, que anticip¨® el actual debate sobre la fluidez de g¨¦nero. ?Lo considera una moda pasajera o el s¨ªntoma de un cambio real?
No hay manera posible de saberlo¡ Una de las cosas m¨¢s dif¨ªciles de aceptar para quienes creen en el progreso, especialmente en estos tiempos recientes, es que la evoluci¨®n no suele implicar una mejora progresiva y continua. A veces, el mundo tambi¨¦n da un paso atr¨¢s. Respecto a su pregunta, dir¨ªa que lo que para uno es una tendencia superficial, para su vecino puede parecer una iluminaci¨®n. Supongo que puede ser ambas cosas a la vez.
Su pel¨ªcula muestra c¨®mo las multinacionales utilizan causas progresistas con un cinismo desmedido, solo para seguir siendo relevantes como marca frente a sus clientes potenciales. ?Observa lo mismo en el uso que el cine, la televisi¨®n o la moda hacen de causas como el feminismo o los derechos LGTB?
El mundo ha evolucionado de tal manera que ya no somos capaces de confiar en lo que vemos. En estos tiempos, debemos ser escrupulosos identificando la autenticidad y usar una br¨²jula moral particularmente agudizada. Pero tambi¨¦n creo que deber¨ªamos autorizarnos a creer en la buena voluntad de los dem¨¢s. Apoyarnos en el otro y hacer cosas positivas al servicio de la humanidad entera. Ser generosos y amables con el pr¨®jimo. Convertirnos en sabios custodios de nuestro planeta por muchas trampas, corruptibilidad y muestras de ignorancia que detectemos a nuestro alrededor.
El director franc¨¦s Arnaud Desplechin dice que su musa, Catherine Deneuve, no es una actriz sino ?un autor?, ya que deja una marca propia en cada una de sus pel¨ªculas. Para usted, ?un int¨¦rprete puede ser tambi¨¦n un autor, como lo es un cineasta?
Creo que todo el mundo es autor de su propio trabajo. Siempre hay una parte de autor¨ªa personal, incluso cuando decides ser el int¨¦rprete de la visi¨®n de otra persona. En mi caso, teniendo en cuenta que soy alguien con primeros instintos de escritor, esa perspectiva no me supone un esfuerzo, sino que es algo totalmente natural.
Por ¨²ltimo, ?qu¨¦ le queda por hacer?
Vivir el resto de una vida larga y feliz. Y pasar m¨¢s tiempo en mi jard¨ªn.