Frances Ha, Fleabag y ¡®La peor persona del mundo¡¯: el problema del clich¨¦ de la treinta?era alocada
Irritante o adorable seg¨²n se mire, el personaje, una hija noruega de Annie Hall y hermana noruega de todas las ¡®Fleabags¡¯ de esta d¨¦cada, genera debate
La peor persona del mundo, la pel¨ªcula noruega protagonizada por Renate Reinsve que podr¨ªa llevarse este domingo el Oscar a la mejor pel¨ªcula internacional y que est¨¢ teniendo un sorprendente ¨¦xito de taquilla en Espa?a, contiene multitudes. Muchos espectadores se sientan a...
La peor persona del mundo, la pel¨ªcula noruega protagonizada por Renate Reinsve que podr¨ªa llevarse este domingo el Oscar a la mejor pel¨ªcula internacional y que est¨¢ teniendo un sorprendente ¨¦xito de taquilla en Espa?a, contiene multitudes. Muchos espectadores se sientan a verla con la actitud que uno reserva para las comedias rom¨¢nticas, una expectativa de luz y ligereza, y se levantan del cine con los ojos hinchados de tanto llorar.
Es en ese momento cuando empiezan las discusiones. ¡°Quiero ser amiga de Julie. Quiero colarme con ella en fiestas en las que no conozco a nadie¡±, piensan algunos, sobre todo algunas, evocando una de las secuencias clave de la pel¨ªcula, en la que esta diletante veintea?era camino de los 30 se escapa de la presentaci¨®n del c¨®mic de su novio y se mete en otra celebraci¨®n con completos desconocidos. ¡°No ir¨ªa con esa mujer ni a la vuelta de la esquina¡±, piensan otros, quiz¨¢ los menos, porque Renate Reinsve, que gan¨® la Palma de Oro a la mejor actriz en Cannes por este papel y ha sido casi universalmente felicitada por su interpretaci¨®n en la pel¨ªcula, consigue salvar a Julie hasta en sus peores momentos y darle humanidad.
Julie no es, claro, la primera occidental blanca de clase media con daddy issues a la que conocemos en el cine. El audiovisual est¨¢ lleno de ellas, y en los ¨²ltimos 40 y tantos a?os casi todas descienden de Annie Hall, el personaje que Woody Allen escribi¨® para Diane Keaton y que Joan Didion redujo, como al resto de personajes de Allen, al estatus de ¡°ni?a lista, la cerebrito de la clase interpretando una fantas¨ªa de la vida adulta¡± en su famosa cr¨ªtica demoledora de 1979.
La ¨²ltima d¨¦cada ha sido especialmente f¨¦rtil en hero¨ªnas imperfectas, de la Frances Ha de Noah Baumbach y Greta Gerwig a las cuatro protagonistas de Girls, de las que el p¨²blico se preguntaba una y otra vez si realmente eran, por turnos, las peores personas del mundo. Y con las que aun as¨ª costaba no encari?arse. Pero hay algo en Julie y en el planteamiento de la pel¨ªcula que genera nuevas preguntas.
En su rese?a para The New York Times, A.O. Scott, ¨¦l mismo un hombre de mediana edad, dice que Julie es la idea de una mujer joven que tendr¨ªa un hombre de mediana edad ¡ªel guion lo firman el director, Joachim Trier, y su colaborador habitual, Eskil Vogt¡ª.
¡°Una cosa que se percibe es que [Julie] no tiene ninguna amiga. ?Se debe a sus imperfecciones o es la evidencia de una falta de imaginaci¨®n por parte de Trier y Vogt?¡±, se pregunta el cr¨ªtico, que tambi¨¦n reconoce que Anna Kar¨¦nina, Hedda Gabler y todas las hero¨ªnas de Henry James salieron de la imaginaci¨®n de hombres y no son precisamente personajes planos.
A la consultora de tendencias y periodista Ayesha A. Siddiqi le pareci¨® que Julie era una ¡°versi¨®n poco dimensional¡± de un tipo de personaje que cree ya gastado y que examin¨® en una entrega reciente de su newsletter, un texto titulado Memento Millennial que ha circulado mucho. ¡°La ¨²ltima d¨¦cada de ficci¨®n sobre mujeres blancas de 20 a 30 a?os recicla distintas versiones de la misma figura aburrida, ego¨ªsta, incapaz, c¨ªnica, ensimismada y deprimida con una vida sexual insatisfactoria alrededor de la cual organizan sus vidas¡±, escrib¨ªa, describiendo sin mucha compasi¨®n la ¨®ptica que la ficci¨®n semicomercial tiene del t¨®pico de la chica milenial.
Una persona ¡°narcisista, ombliguista, hip¨®crita, pol¨ªticamente apol¨ªtica, sobreeducada e infraempleada, que aspira a un radicalismo que no vive, rara en lo rom¨¢ntico y emocionalmente paralizada¡±. Bajo esa definici¨®n caer¨ªan, seg¨²n ella, las protagonistas de Fleabag, Girls, Mi a?o de descanso y relajaci¨®n de Ottesa Moshfegh y, por supuesto, todas las antihero¨ªnas de Sally Rooney. Y aunque admite que todos esos t¨ªtulos eran meritorios, cada uno a su manera, se pregunta: ¡°?No nos sabemos esa historia ya?¡±. Seg¨²n Siddiqi, todas estas mujeres tienen en com¨²n el no estar lastradas por su circunstancia. ¡°Son personas privilegiadas que podr¨ªan evitar tomar las decisiones que hacen su vida miserable y hacen que hieran a mucha gente por el camino¡±.
La periodista tambi¨¦n se?ala que la joven perdida es a esta d¨¦cada lo que el ¡°padre en apuros¡± era a las telecomedias de los noventa, un clich¨¦ que llegar¨¢ a definir una era. Pero quiz¨¢ ese juicio, aunque bien dirigido, no es del todo justo con Julie, con Reinsve y con el propio Trier, que han compuesto aqu¨ª un personaje con sus propias dimensiones, una mujer que cambia cinco veces de carrera y unas cuantas de color de pelo y de pareja, que a veces sale corriendo cuando las cosas se ponen dif¨ªciles y que tiene m¨¢s claro lo que no quiere (una vida como la de los amigos cuarentones con hijos de su novio, a los que desprecia) que lo que quiere.
Por otro lado, la treinta?era blanca perdida se habr¨¢ convertido quiz¨¢ ya en un clich¨¦, como se?ala Siddiqi, pero el ¡°?no nos sabemos esa historia ya?¡± pudo haberse aplicado en distintos momentos de la historia a otros relatos, como el del hombre de mediana edad que se aferra a su potencia sexual. La ficci¨®n siempre encontr¨® maneras ingeniosas y a veces brillantes de volver a contar ese cuento, y exigi¨® a todo el p¨²blico que lo escuchase. Quiz¨¢ no es del todo justo que a la treinta?era perdida se le conceda solo una d¨¦cada y media para explayarse.
Como la pregunta est¨¢ en el aire, hemos hecho un barrido de opiniones: ?es Julie un retrato poli¨¦drico de una mujer joven a la que se permite ser imperfecta? ?O la en¨¦sima versi¨®n de la treinta?era desorientada? ?Es Julie, como dice ella de otro personaje de la pel¨ªcula, la peor persona del mundo?
Pepa Blanes, periodista especializada en cine. Jefa de Cultura de la Cadena SER.
¡°Cuando vi la pel¨ªcula en Cannes el personaje me pareci¨® terrible. Y hubo algo en la pel¨ªcula que me gust¨® much¨ªsimo, pero a la vez hab¨ªa aspectos que me echaban para atr¨¢s continuamente. En los noventa y los dosmil, ese tipo de personaje lo encarnaban siempre hombres, en las pel¨ªculas de Spike Jonze y Michel Gondry. Me gusta que un personaje femenino tenga la oportunidad de ser irritable, gracioso, divertido, pero tambi¨¦n tremendamente asqueroso a veces, y que fuera una mujer, una chica guapa, un prototipo que muy pocas veces se ha planteado as¨ª, con lo cual tengo filias y fobias, que creo que es la intenci¨®n de la pel¨ªcula hacia el personaje. Es un personaje con muchas aristas y la actriz se las da todas, pero a la vez pienso que se nota que es un personaje escrito por un hombre. Lo veo a¨²n esquem¨¢tico en su relaci¨®n con los hombres y en su conciencia del feminismo. Hablamos de una mujer con un determinado estatus social, que ha tenido relaciones t¨®xicas como todas, pero no se refleja en ella la influencia del Me Too y su proceso de aprendizaje. S¨ª me colar¨ªa con ella en fiestas porque me he colado con gente peor. Y s¨ª me gusta mucho su mirada a los otros tipos de familia. Cuando est¨¢ en ese jard¨ªn y mira a las mujeres de su edad que ya son madres¡ en ese momento, me ir¨ªa con ella al fin del mundo¡±.
Andrea Gumes, conductora del ¡®podcast¡¯ ¡®Tardeo¡¯, en Radio Primavera Sound.
¡°La peor persona del mundo en realidad es Joachim Trier por ponernos un espejo a todas las mujeres treinta?eras white feminists que tenemos pocos problemas m¨¢s all¨¢ de averiguar de d¨®nde es el vestido negro que lleva Renate Reinsve al principio de la pel¨ªcula. Sent¨ª que Trier me estaba poniendo un espejo delante y que no me gustaba mucho lo que estaba viendo. Julie para m¨ª no es mala, solo es una ni?a mimada y egoc¨¦ntrica. Touch¨¦. Una t¨ªa que solo quiere sentir cosas todo el rato. Ha venido a este mundo a que le pasen cosas, aunque sea a costa de los dem¨¢s. Pero como todas nosotras, un d¨ªa te das cuenta de que no eres la protagonista de un filme indie y que las personas de tu alrededor tienen sentimientos y no son secundarios de lujo. Todas las l¨ªneas de guion de Julie podr¨ªan ser nuestros tuits le¨ªdos uno detr¨¢s de otro. Trier, si has venido a nuestros timelines buscando inspiraci¨®n, confi¨¦salo. Como buena eg¨®latra, le dir¨ªa a Julie que no se preocupe, que he conocido a mucha gente peor¡±.
Alex Vicente, periodista de EL PA?S
¡°Precisamente, lo interesante del retrato que hace Trier es que el personaje resulte tan antip¨¢tico como enternecedor. Por eso es admirable lo que hace Renate Reinsve con su papel: la inmensa mayor¨ªa de personajes de mujer en el cine actual, tanto en el mainstream como en el de autor, se sit¨²an en uno de esos dos extremos, si lo queremos ver en t¨¦rminos morales. El retrato que hace Trier puede tener sus defectos ¡ªel giro argumental en la parte final puede ser entendido como una forma de castigarla por sus errores y decisiones pasadas¡ª, pero por lo menos no se pliega al dogma de la likability o al binarismo moral al que el cine anglosaj¨®n sigue sometiendo a las mujeres: el personaje no es un modelo de rectitud, pero tampoco una zorra sin escr¨²pulos. En ese sentido, es interesante comparar a Julie con una manic pixie dream girl de manual como Zooey Deschanel en 500 d¨ªas juntos (2009), pel¨ªcula que demostraba tener un inter¨¦s nulo por su psicolog¨ªa y que incluso empezaba insultando a la chica real que la inspir¨®. El acercamiento de Trier no es perfecto, pero s¨ª mucho m¨¢s plausible y emp¨¢tico. Julie no es el beb¨¦ probeta de un departamento de marketing, sino algo parecido a una persona, con sus defectos y sus grietas¡±.
Desir¨¦e de Fez, cr¨ªtica de cine. Autora de ¡®Reinas del grito¡¯ (Blackie Books)
¡°A m¨ª el personaje de Julie me encanta, lo que no quiere decir que me caiga bien todo el tiempo o que me parezca adorable. A ratos me parece directamente insoportable, como me han parecido insoportables mis amigas muchas veces y otras tantas veces he sentido que la insoportable era yo. Y esa posibilidad de ser inaguantable es una de las cosas que m¨¢s me interesan del personaje, porque hacen que sea humano y no una mujer idealizada-pero-con-sus-cositas, que estamos acostumbrados a ver en el cine y en las series. La otra cosa que me gusta mucho es que es un personaje escrito desde sus dudas y no desde sus certezas o sus revelaciones. Me encanta que no tenga ni idea de lo que hace, que se permita equivocarse, que sea caprichosa y, sobre todo, que sea ego¨ªsta en su b¨²squeda de lo que realmente quiere. Es un personaje genuinamente imperfecto y contradictorio porque est¨¢ vivo, y eso a m¨ª me gana desde el minuto uno¡±.
Elsa Fern¨¢ndez-Santos, cr¨ªtica de cine de EL PA?S.
?La peor persona del mundo es una pel¨ªcula que entra de maravilla pero tiene una muy mala digesti¨®n. Es una pel¨ªcula brillante con una actriz fabulosa interpretando a uno de esos personajes desastrosos, tan adorables como antip¨¢ticos, que nutren toda la historia de la comedia rom¨¢ntica, de La fiera de mi ni?a a Frances Ha, y que por desgracia tanto escasean. El problema con la pel¨ªcula de Joachim Trier es que resulta tramposa porque le da un falso protagonismo al personaje de Julie cuando el verdadero h¨¦roe es ¨¦l bajo la capa del exitoso novelista gr¨¢fico. A mi juicio, Trier acaba abandonando a Julie en un lugar nada interesante, adem¨¢s de cruel, porque en el fondo le puede el resentimiento hacia un personaje que, por mucho que disimule, detesta. Eso fue lo que me incomod¨® de la pel¨ªcula, tanto que acab¨® borrando sus sobradas virtudes?.
Javier Oca?a, cr¨ªtico de cine. Autor de ¡®De Blancanieves a Kurosawa. La aventura de ver cine con los hijos¡¯ (Pen¨ªnsula).
¡°Me encanta la pel¨ªcula, y una de las razones por las que me gusta es porque el personaje de ella no es f¨¢cil de definir y es imposible de juzgar. Eso nos pasa a todos los seres humanos, que estamos llenos de complejidades y de esquinas oscuras. Ella, quiz¨¢ como cualquiera, puede ser un encanto o una tumba para cualquiera, depende de qui¨¦n est¨¦ en frente. La vida es eso: hostia va, hostia viene y te defiendes como puedes. Y en medio intentas disfrutar de los mejores momentos. Me parece un personaje tan bien trazado que no se me ocurren muchos antecedentes. Lo f¨¢cil ser¨ªa decir Annie Hall o la Julie Delpy de la trilog¨ªa de Linklater [Antes del amanecer, Antes del anochecer y Antes de la medianoche], pero creo que las trasciende. Adem¨¢s, el de Delpy s¨ª que me cae mal en la segunda y en la tercera pel¨ªcula¡±.
Beatriz Mart¨ªnez, cr¨ªtica de cine en ¡®Fotogramas¡¯
¡°Vi la pel¨ªcula en su presentaci¨®n en Cannes, cuando todav¨ªa no hab¨ªa ninguna corriente al respecto, y pr¨¢cticamente desde el primer pase tuvo una buena aceptaci¨®n. A m¨ª no me gust¨®. Lo reconozco, soy bastante visceral cuando me saltan las alarmas y aqu¨ª desde el principio vi las intenciones, el t¨ªpico relato a modo de videoclip cuqui con un claro tono paternalista hacia la protagonista que me gener¨® rechazo. No me cre¨ª nada de ella, me pareci¨® impostado, porque todo est¨¢ filtrado a trav¨¦s de la mirada masculina, como si a trav¨¦s de ella nos hablara el director, con todo lo que eso supone a la hora de realizar el retrato de una mujer. Tambi¨¦n sab¨ªa por d¨®nde iban a ir las defensas: un personaje femenino con aristas, que no pretende caer bien, que tiene sus dudas¡ A m¨ª me parece que el director hace un mansplaining constante a la protagonista y que a trav¨¦s de ella pretende justificarse. Y eso me incomoda bastante.¡±
Eduald Espluga, escritor. Autor de ¡®No seas t¨² mismo. Apuntes sobre una generaci¨®n fatigada¡¯ (Paid¨®s)
¡°El personaje no me parece odioso y esa es parte de la gracia de la pel¨ªcula. Creo que Joachim Trier quer¨ªa que fuera fascinante, precisamente porque la pel¨ªcula acaba castigando a la protagonista, pero ella es feliz. Creo que en algunos momentos clave del ¨²ltimo tercio se ve claro que tiene un discurso reaccionario, que la felicidad de la protagonista se debe a una vida vac¨ªa. A ella la veo m¨¢s como una hija de las protagonistas de Eric Rohmer, la hija que no tuvo Maud [de Mi noche con Maud], en las que se romantiza la vida al margen de los lazos de sangre. El director claramente se identifica con el personaje del dibujante de c¨®mics y est¨¢ diciendo: ¡®vale, no quer¨¦is una felicidad a la americana. Pero preguntaos si al querer esto no est¨¢is siendo la peor persona del mundo¡¯. que tiene un mensaje sarc¨¢stico y un punto de discurso conservador, que me parece un poco terrible. Pero precisamente porque el personaje de ella es fascinante, el mensaje cr¨ªtico funciona. Por eso mismo, tiene una funci¨®n perversa dentro del contexto de la pel¨ªcula¡±.