El efecto Yoko Ono o por qu¨¦ el ¡®hooliganismo¡¯ sexista persigue a Sara S¨¢lamo, novia de Isco
Los insultos a la actriz canaria no cesan desde que se conociera su relaci¨®n con el futbolista del Real Madrid, acus¨¢ndola de ser la responsable de un supuesto baj¨®n de rendimiento en el centrocampista.
¡°Devu¨¦lvenos a Isco¡±; ¡°Arruinaste su f¨²tbol¡±, ¡°Buscafortunas¡±; ?Qu¨¦ le estas haciendo que ya no rinde?¡±; ¡°Eres el c¨¢ncer de Isco¡±. Sentencias como estas y otras mucho m¨¢s soeces pueblan estos d¨ªas el apartado de comentarios de las redes sociales de Sara S¨¢lamo. La actriz canaria de 26 a?os, conocida por su trabajo en series como Array¨¢n y B&b, de boca en boca, se ha convertido en las ¨²ltimas semanas en la diana favorita del hooliganismo machista merengue. Su relaci¨®n con el futbolista malague?o Francisco Alarc¨®n ¡®Isco¡¯ est¨¢ siendo condenada con c...
¡°Devu¨¦lvenos a Isco¡±; ¡°Arruinaste su f¨²tbol¡±, ¡°Buscafortunas¡±; ?Qu¨¦ le estas haciendo que ya no rinde?¡±; ¡°Eres el c¨¢ncer de Isco¡±. Sentencias como estas y otras mucho m¨¢s soeces pueblan estos d¨ªas el apartado de comentarios de las redes sociales de Sara S¨¢lamo. La actriz canaria de 26 a?os, conocida por su trabajo en series como Array¨¢n y B&b, de boca en boca, se ha convertido en las ¨²ltimas semanas en la diana favorita del hooliganismo machista merengue. Su relaci¨®n con el futbolista malague?o Francisco Alarc¨®n ¡®Isco¡¯ est¨¢ siendo condenada con crueldad por un sector de los aficionados del Real Madrid, culp¨¢ndola de una supuesta ¡®bajada de rendimiento¡¯ en el juego del mediapunta. Ella es la ¨²ltima pareja de un personaje p¨²blico masculino en enfrentarse al sexismo reaccionario de los seguidores y la prensa fan¨¢tica, pero no la primera.
La revista Don Bal¨®n fue el primer medio en hacer suyas las teor¨ªas que culpaban a la nueva pareja de Isco del mal juego de este en un art¨ªculo publicado el pasado 5 de febrero. Seg¨²n afirman, la rutina ¡°casera¡± del futbolista ha mutado en una ¡°vida loca¡± de ¡°constantes desatinos¡± desde que empez¨® a salir con la actriz, copando su vida nocturna de ¡°cenas y reuniones sociales¡±. S¨¢lamo contest¨® a la cabecera, con 40 a?os de historia, v¨ªa Twitter: ¡°Agradecer¨ªa que dejarais de calumniar sobre mi persona y sobre mi pareja. De lo contrario tendr¨¦ que tomar acciones legales¡±. Desde hace meses, los insultos en redes se reproducen en r¨¦plicas marcadas por los partidos en los que el rendimiento de su pareja deja descontentos a sus seguidores. El ¨²ltimo, el del pasado 27 de febrero ante el Espanyol. La confesi¨®n p¨²blica de su afici¨®n por el Atl¨¦tico de Madrid azuz¨® las teor¨ªas conspirativas presentes en esta oleada de odio y de las que hemos seleccionado a continuaci¨®n tres sangrantes ejemplos.
En el f¨²tbol espa?ol, episodios parecidos han sido protagonizados por la cantante Shakira o la periodista Sara Carbonero, responsabilizadas de cada bache de juego o disputa en el vestuario de sus respectivas parejas. Este fen¨®meno, que por supuesto afecta con exclusividad al g¨¦nero femenino, no solo adscribe a la mujer a mero complemento del hombre, sino que resulta especialmente agresivo cuando la susodicha es tambi¨¦n un personaje p¨²blico, ya sea presentadora, actriz o cantante. Al otro lado del charco, la int¨¦rprete Olivia Munn (The Newsroom) se enfrent¨® a medios como The Washington Post o Fox Sports por culpabilizarla de una racha perdedora del equipo de f¨²tbol americano que lideraba su pareja por aquel entonces, la superestrella Aaron Rodgers. Algo parecido pas¨® con la cantante Jessica Simpson, que lleg¨® a acu?ar el t¨¦rmino ¡°el gafe de Jessica¡± despu¨¦s de un mal partido de su ex, el quarterback Tony Romo. En cualquiera de estos casos, y sin importar la fama previa que se tuviera, sus nombres tambi¨¦n pasan a ser transformados autom¨¢ticamente por el cl¨¢sico ¡®novia de¡¯.
¡°Soy la mujer m¨¢s odiada de todo Estados Unidos¡±. En una secuencia del documental Montage of Heck, el primero autorizado sobre Kurt Cobain desde su muerte en 1994, Courtney Love pronuncia estas palabras. Lo hace mientras repasa las humillaciones e insultos recibidos desde el inicio de su relaci¨®n con el l¨ªder de Nirvana, una controversia que acab¨® tambi¨¦n con su carrera como vocalista del grupo de rock alternativo Hole. El mundo de la m¨²sica ha sido desde hace d¨¦cadas el mayor altavoz de agravios hacia las parejas de ¨ªdolos, algo calificado popularmente como el efecto Yoko Ono. Desde que a finales de los a?os 60 esta artista conceptual fuera culpabilizada del fin de la banda The Beatles, y pese a las numerosas declaraciones que la exoneran de cualquier responsabilidad, en la memoria colectiva ha perdurado como un personaje oscuro y conspirador.
La historia se ha repetido de manera c¨ªclica en la industria durante d¨¦cadas.?Este odio solo se explica desde la repentina humanizaci¨®n del ¨ªdolo divinizado y la negativa de todas estas mujeres a permanecer en un segundo plano, mostr¨¢ndose como un igual a la venerada deidad. Retrocediendo varios siglos, Ono, Love o Nancy Spungen (pareja de Sid Vicious) suponen tambi¨¦n la reencarnaci¨®n moderna del mito sexista de Helena de Troya, aquella cuya belleza fue la responsable de la guerra entre pueblos. Sustituyan pueblo por banda, equipo, partido pol¨ªtico o grupo de amigos, lo que es evidente es que la historia ha cambiado poco si hablamos de sexismo.