La lana vuelve a estar de moda

Lunes 15 de octubre, 18.30 de la tarde en Londres. Tony McHale, director del Mandarin Oriental de Hyde Park, acompa?aba a Poppy Delevigne (que se abrigaba con un vestido de lana de Markus Lupfer) hasta la suite 107 en la primera planta del hotel. En el balc¨®n de la habitaci¨®n, con vistas a Harvey Nichols, se hab¨ªa instalado un gran interruptor del que colgaban metros de gruesa lana conectados con el centro comercial. Hab¨ªa oscurecido y, al pulsar on, se ilumin¨® el ovillo de lana m¨¢s grande del mundo (todo el tejido era reciclado), que se hab¨ªa instalado a la entrada de los exclusivos grandes...

Lunes 15 de octubre, 18.30 de la tarde en Londres. Tony McHale, director del Mandarin Oriental de Hyde Park, acompa?aba a Poppy Delevigne (que se abrigaba con un vestido de lana de Markus Lupfer) hasta la suite 107 en la primera planta del hotel. En el balc¨®n de la habitaci¨®n, con vistas a Harvey Nichols, se hab¨ªa instalado un gran interruptor del que colgaban metros de gruesa lana conectados con el centro comercial. Hab¨ªa oscurecido y, al pulsar on, se ilumin¨® el ovillo de lana m¨¢s grande del mundo (todo el tejido era reciclado), que se hab¨ªa instalado a la entrada de los exclusivos grandes almacenes londinenses. Comenzaba as¨ª la tercera campa?a de la lana del Reino Unido.

En el sal¨®n Rosebery esperaban a S?Moda los estudiantes que hab¨ªan ganado el concurso de dise?o organizado por Wool School. Una iniciativa de Harvey Nichols que eleg¨ªa a 12 finalistas para que cada uno creara un jersey para una de las firmas participantes en el proyecto (John Lewis, Marks and Spencer, Hobbs, Topshop o Pringle, entre otras). Sus creaciones ya est¨¢n a la venta en las boutiques y el 5% del beneficio se destinar¨¢ a apoyar programas de dise?o. Mientras la condesa de Wessex observaba el trabajo de estos nuevos creadores, Poppy Delevigne exclamaba: ??Quiero comprar todos los modelos!?, y Nicholas Coleridge, presidente del grupo editorial Cond¨¦ Nast Internacional, y John Thorley, presidente de la campa?a por la lana, manten¨ªan una gran sonrisa de satisfacci¨®n. ?Estamos recogiendo los frutos de a?os de trabajo?, afirmaban.

Todo empez¨® en 2008, cuando el pr¨ªncipe Carlos de Inglaterra se puso en contacto con los dos empresarios para preguntarles: ??Cu¨¢ndo vamos a hacer algo para solucionar el problema de la lana??, recuerda Thorley. ?Cuando llama el pr¨ªncipe, uno escucha y est¨¢ dispuesto. En el Reino Unido es lo correcto?, afirma Coleridge. Este material hist¨®rico padece una crisis de d¨¦cadas. Hace 40 a?os los ganaderos obten¨ªan el 50% de su beneficio de la venta de la lana y el restante de la venta de la carne. ?Sin embargo, hace cuatro a?os el 100% del beneficio proced¨ªa de la carne; la lana se desechaba?, asegura Thorley. ?Que tanto material sostenible y biodegradable se desperdiciara mientras la producci¨®n de tejidos sint¨¦ticos derivados del petr¨®leo aumentaba era algo que escandalizaba al pr¨ªncipe?, comenta Coleridge. Se establecieron entonces las bases de una acci¨®n cuyo objetivo era (y sigue siendo) conseguir una repercusi¨®n global. Con Carlos de Inglaterra como promotor, la primera campa?a de la lana se inaugur¨® en octubre de 2010. Todos los medios internacionales se hicieron eco.

The Art of Merino. An extraordinary matter es el libro publicado entre L¡¯Uomo Vogue y The Woolmark Company. Incluye im¨¢genes de los mejores dise?os que creadores internacionales realizaron con esta fibra natural.

D.R.

Como gatos que siguen el hilo de un ovillo, temporada tras temporada se han sumado nuevas firmas y dise?adores, como Paul Smith, Hackett o Vivienne Westwood. ?En los ¨²ltimos desfiles de alta costura y en las propuestas de pr¨ºt-¨¤-porter de este oto?o-invierno se han visto m¨¢s prendas de lana que nunca?, confirma Coleridge. Tambi¨¦n los hist¨®ricos centros comerciales como Harrods o Selfridges se han vestido durante esta semana con escaparates cubiertos de lana y con maniqu¨ªes vestidos con prendas de merino. ?Es fant¨¢stico, la lana ha comenzado una nueva vida?, aseguran los empresarios. Los granjeros tambi¨¦n se han desplazado hasta el centro para ver c¨®mo la lana que hab¨ªan esquilado se ha transformado en abrigos o trajes de lujo.

A este ovillo le han seguido muchos pa¨ªses. Adem¨¢s de Inglaterra, en esta edici¨®n han participado Francia, Noruega, Corea, Jap¨®n y China ¨Ccuya campa?a finaliza el 29¨C. Y pr¨®ximamente comenzar¨¢n acciones similares en Holanda, Alemania y Espa?a. ?Este tipo de iniciativas no solo impulsan el trabajo de granjeros, sino tambi¨¦n el de los artesanos que limpian, ti?en y tejen la lana?, afirma Thorley, quien ve el futuro con optimismo. ?Si en las dos ¨²ltimas d¨¦cadas la lana solo ocupaba un 8% del total del mercado de fibra natural, hoy es m¨¢s del 50%?. Ni siquiera la crisis ha detenido el inter¨¦s. ?En el Reino Unido, el ¨²ltimo a?o ha aumentado la producci¨®n un 10%?. El objetivo es que siga creciendo los dos a?os que quedan de una campa?a que tiene cinco a?os de vida. ?Cuando el pr¨ªncipe de Gales vuelva de Nueva Zelanda, hablaremos sobre lo que haremos una vez finalizada la quinta edici¨®n. ?l lo tiene claro, una vida de cinco a?os no es suficiente?.