La moda cotiza (y mucho) en bolsa
Los expertos financieros lo tienen claro: adquirir acciones de las principales empresas de lujo y del retail es una de las mejores inversiones que se pueden realizar hoy en d¨ªa.
A?o 2009. El m¨ªtico bolso Kelly Bag de Herm¨¨s se vend¨ªa por unos 7.665 d¨®lares (importe utilizado en el Informe Julius Baer para calcular la revalorizaci¨®n de los precios de la moda). En plena ca¨ªda de la econom¨ªa mundial hubiera sido normal plantearse si comprarlo era o no una buena decisi¨®n. Quienes se hicieron con ¨¦l hace cinco a?os ahora dan saltos de alegr¨ªa pues, a d¨ªa de hoy, podr¨ªan venderlo en eBay por unos 13.950 d¨®lares (en caso de que siga nuevo, claro). Es decir, se ha revalorizado nada menos que un 82%.
?Un negocio redondo? Sin duda. Pero podr¨ªa haberlo sido m...
A?o 2009. El m¨ªtico bolso Kelly Bag de Herm¨¨s se vend¨ªa por unos 7.665 d¨®lares (importe utilizado en el Informe Julius Baer para calcular la revalorizaci¨®n de los precios de la moda). En plena ca¨ªda de la econom¨ªa mundial hubiera sido normal plantearse si comprarlo era o no una buena decisi¨®n. Quienes se hicieron con ¨¦l hace cinco a?os ahora dan saltos de alegr¨ªa pues, a d¨ªa de hoy, podr¨ªan venderlo en eBay por unos 13.950 d¨®lares (en caso de que siga nuevo, claro). Es decir, se ha revalorizado nada menos que un 82%.
?Un negocio redondo? Sin duda. Pero podr¨ªa haberlo sido m¨¢s si esos casi 8.000 d¨®lares se hubieran dedicado a una forma menos generalizada de comprar moda: adquirir acciones de las compa?¨ªas que la producen. O lo que es lo mismo, invertir en las principales empresas de estilo que cotizan en Bolsa. Eso hizo un buen pu?ado de expertos financieros desde la ca¨ªda de Lehman Brothers en septiembre de 2008 y durante la crisis financiera mundial que sigui¨®. Y ellos¡ s¨ª que han hecho negocio. ?Como demuestra la evoluci¨®n del Fashion Index, este sector ha sido uno de los mejores refugios burs¨¢tiles durante la recesi¨®n. Fue uno de los primeros en superar los problemas y lleva una revalorizaci¨®n del 348,50% desde principios de 2009?, explica Luis Benguerel, analista s¨¦nior de Inversiones y Mercados de Gesti¨®n de Patrimonios Mobiliarios.
Herm¨¨s en Tokio.
Getty Images
El ¨ªndice burs¨¢til al que hace referencia este broker, el Fashion Index, fue creado por el proveedor de servicios financieros Bloomberg en 1999. Estos registros estad¨ªsticos se elaboran analizando a los negocios m¨¢s representativos de un sector o de un pa¨ªs y sirven como term¨®metro de la actividad econ¨®mica. Por ejemplo, si el Standard & Poor¡¯s 500 va bien, suele pensarse que EE UU va bien. Lo mismo ocurre con el Ibex 35, que re¨²ne a las principales empresas espa?olas y mide la salud del capital del pa¨ªs.
Aunque el Fashion Index no es el ¨²nico que examina el estado de las compa?¨ªas de estilo, s¨ª es el indicador que m¨¢s volumen de transacciones refleja y, por lo tanto, el m¨¢s representativo, seg¨²n explica Benguerel. Est¨¢ formado por una selecci¨®n de las empresas m¨¢s destacadas, principalmente del sector del lujo: Christian Dior, Kering (propietario de Gucci, Balenciaga y Alexander McQueen, entre otras firmas), Herm¨¨s International, el grupo LVMH, Hugo Boss AG, Cie Financi¨¨re Richemont (principal accionista de Cartier, Piaget o Montblanc) y Burberry Group PLC. Pero tambi¨¦n figuran los dos grandes gigantes del retail, Inditex y H&M.
Jimmy Choo sali¨® por primera vez al parqu¨¦ en el mes de octubre.
Net-A-Porter
Su espectacular comportamiento durante la crisis lo ha convertido en la envidia de los otros ¨ªndices. Su marca deja corto el laureado ascenso del registro m¨¢s representativo de la Bolsa estadounidense, el S & P 500, que en el mismo periodo ha ganado un 126%. Adem¨¢s, saca los colores al Ibex 35 espa?ol, que apenas ha remontado un 11,7% desde los momentos m¨¢s bajos de la recesi¨®n. El avance ha sido tan potente que si aquellos casi 8.000 d¨®lares que costaba el Kelly Bag en 2009 se hubieran invertido en el Fashion Index, la rentabilidad obtenida ser¨ªa suficiente como para comprar dos de esos bolsos al precio actual de eBay. Eso s¨ª, parece complicado que el canje se le hubiera ocurrido a los interesados en el fetiche creado para la princesa de M¨®naco. Y es que hay pocas cosas tan unidas y a la vez tan distanciadas como el inter¨¦s por la moda y la importancia que ¨¦sta tiene en el mercado burs¨¢til. ?Es una dicotom¨ªa dif¨ªcil de digerir. El lujo es exclusividad, individualidad. La Bolsa connota masificaci¨®n y consumo?, reconoce Susana Campuzano, directora del Programa Superior de Direcci¨®n y Gesti¨®n Estrat¨¦gica del Universo del Lujo en IE Business School.
Su valor, la solidez. Aunque estos dos mundos puedan parecer antag¨®nicos, sus lazos son cada vez m¨¢s estrechos. Para los inversores, las empresas del Fashion Index ofrecen tranquilidad y seguridad financiera, incluso en momentos complicados. Para las compa?¨ªas, salir a Bolsa es casi una necesidad a la hora de obtener el dinero que precisan para mantener su estructura y responder con presencia f¨ªsica a la escalada de la demanda mundial de moda. ?Estamos en un punto crucial de la historia. El lujo ha pasado de ser algo casi artesanal a convertirse en una industria que factura 217.000 millones de d¨®lares [datos de Bain & Company]. Las marcas est¨¢n obligadas a crecer y, en la mayor¨ªa de los casos, a sucumbir al juego burs¨¢til para ello?, asegura Campuzano.
Dior en Tokio
Cordon Press
Tras la incre¨ªble revalorizaci¨®n que ha experimentado el Fashion Index se esconde una variada combinaci¨®n de factores, pero uno brilla por encima de todos: el auge del lujo en los pa¨ªses emergentes. ?Mientras EE UU y Europa se hund¨ªan, el consumo se disparaba en Rusia, Oriente Pr¨®ximo y, sobre todo, en China, donde se ha adquirido todo lo que no se compraba en occidente?, corrobora Fernando Hern¨¢ndez, analista financiero de Inversis Banco.
De hecho, las tensiones entre Rusia y Ucrania o el freno en el crecimiento chino se reflejan con claridad en la curva de evoluci¨®n de este ¨ªndice de moda. ?En los ¨²ltimos meses, aunque sigue alcista, ha moderado su incremento. Y esa contenci¨®n ser¨¢ la tendencia en los pr¨®ximos meses?, advierte Benguerel. Eso s¨ª, contenci¨®n no es sin¨®nimo de retroceso. Porque si algo tienen claro tanto los expertos en estilo como los brokers es que ¨¦ste es un sector casi inmune a las crisis. ?Las empresas del mercado de lujo siempre son atractivas porque tienen una gran estabilidad en su cuenta de resultados. Los millonarios no suelen verse afectados por los vaivenes econ¨®micos y tampoco alteran sus costumbres de gastos. Los inversores buscamos previsibilidad en los n¨²meros de las compa?¨ªas y eso, en los ¨²ltimos a?os, ha sido muy dif¨ªcil de encontrar fuera de esta industria?, reconoce Hern¨¢ndez.
Atractivos muy golosos. Esa especie de milagro que realizan las empresas de moda para multiplicar los panes y los peces se debe a varios factores. ?En este negocio el precio de los art¨ªculos no solo incluye el coste de producci¨®n. La gente adquiere una prenda o un accesorio determinados porque su alto importe significa exclusividad. Se paga por lo que representa?, asegura Susana Campuzano. ?El 30% o el 40% del valor de una prenda es la experiencia de entrar en la tienda? corrobora Luis Lara, profesor de Internacionalizaci¨®n de ISEM Fashion Business School. Sin duda, ¨¦se es uno de los motivos por los que los montos de los bienes de lujo no han parado de crecer durante toda la ¨¦poca de crisis, con una media de entre cuatro y siete puntos porcentuales por encima de la inflaci¨®n, seg¨²n el informe The Wealth Report Europe, elaborado por el banco de grandes fortunas suizo Julius Baer.
Descripci¨®n del Fashion Index.
D.R.
Sostener esta escalada no ha sido ni f¨¢cil ni barato. ?Todas las grandes compa?¨ªas han hecho un enorme esfuerzo por internacionalizarse y abrir tiendas en los rincones del planeta donde est¨¢n sus nuevos clientes. Esta estrategia les ha permitido compensar el desplome del consumo en Occidente?, reconoce Luis Lara. Eso, y el turismo de compras. ?Entre el 80% y el 90% de las ventas de lujo en Europa y EE UU las realizan turistas de pa¨ªses emergentes?, insiste Lara.
A todos estos encantos, los agentes burs¨¢tiles a?aden alguno m¨¢s. Las empresas de moda han protagonizado en los ¨²ltimos a?os algunos de los movimientos que m¨¢s sex-appeal tienen para los inversores. Fusiones, adquisiciones, intentos de compra hostiles o amistosos. ?Por ejemplo, el enfrentamiento entre LVMH intentando adquirir acciones de Herm¨¨s de forma encubierta espoleaba los rumores y propiciaba que muchos inversores se posicionaran buscando la revalorizaci¨®n que esos movimientos han dado a los t¨ªtulos?, recuerda Fernando Hern¨¢ndez.
Y un atractivo m¨¢s: las nuevas salidas a Bolsa, como la de Jimmy Choo. Se lanz¨® por un precio muy superior a su valor contable y consigui¨® una revalorizaci¨®n del 10% en poco m¨¢s de un mes.
Burberry en Malasia.
Getty Images