La moda tambi¨¦n hace Ramad¨¢n

Los intentos de algunas marcas por mostrar su ?sensibilidad? hacia otras culturas y religiones ajenas a la suya propia, casi siempre suelen acabar mal. Fatal. Que se lo digan a Urban Outfitters y sus eternas disputas con los indios Navajos (Victoria's Secret, o el mism¨ªsimo Karl Lagerfeld se las tuvo tambi¨¦n recientemente con los nativos americanos a prop¨®sito de su desfile Chanel Par¨ªs-Dallas y su particular versi¨®n de la indumentaria ceremonial), sus problemas con la c...

Los intentos de algunas marcas por mostrar su ?sensibilidad? hacia otras culturas y religiones ajenas a la suya propia, casi siempre suelen acabar mal. Fatal. Que se lo digan a Urban Outfitters y sus eternas disputas con los indios Navajos (Victoria's Secret, o el mism¨ªsimo Karl Lagerfeld se las tuvo tambi¨¦n recientemente con los nativos americanos a prop¨®sito de su desfile Chanel Par¨ªs-Dallas y su particular versi¨®n de la indumentaria ceremonial), sus problemas con la comunidad jud¨ªa por hacer "apolog¨ªa del terrorismo" a ra¨ªz de unas camisetas con la foto de un joven palestino armado y con la palabra "Victima" sobreimpresa o el l¨ªo que tienen formado actualmente por culpa de unas colchas estampadas con la imagen del Dios Ganesha (para los hindu¨ªstas, ?el Dios de la inteligencia y la sabidur¨ªa representado por una imagen con cuerpo humano y cabeza de elefante), obra de la ilustradora Valentina Ramos y comercializadas en exclusiva como parte de su colecci¨®n de art¨ªculos para el hogar.

Adue?arse de ciertos s¨ªmbolos y referencias de manera ?espor¨¢dica con fines puramente est¨¦ticos, o intentar explotarlos puntualmente en nombre de las ventas, tiene sus riesgos. A menos que se haga como parte de una estrategia completamente distinta y de manera mucho m¨¢s inteligente: la regionalizaci¨®n y por qu¨¦ no, "religionizaci¨®n" de las colecciones (algo as¨ª es lo que pretend¨ªa el ex¨¢ngel de Victoria's Secret, Kylie Bisutti??no?).

En las ¨²ltimas temporadas varios han sido los dise?adores que han arraigado sus dise?os a trav¨¦s de la conexi¨®n espiritual con determinados mercados. Maria Grazia Chiuru y Pierpaolo Piccioli para Valentino o Alexander Wang en Balenciaga, han organizado desfiles y creado ediciones limitadas de venta exclusiva en el mercado asi¨¢tico, concretamente en China. De vuelta a Chanel, hace tan solo unos meses que la firma francesa ?presentaba su colecci¨®n Crucero 2015 Par¨ªs-Dubai. M¨¢s all¨¢ de las interpretaciones m¨¢s o menos literales y/o acertadas de prendas como el Nicab, lo que s¨ª respet¨® Karl Lagerfeld fue el cubrir a sus modelos en aquellas partes m¨¢s delicadas para la ley isl¨¢mica tal y como se aplica al c¨®digo de vestimenta en los Emiratos ?rabes. Piernas y escotes quedaron a cubierto en un cat¨¢logo de prendas que, si bien se vender¨¢ internacionalmente, en esta ocasi¨®n m¨¢s que en ninguna otra anterior se adaptaba expresamente a los c¨®digos locales independentemiente del enfoque m¨¢s o menos respetuoso en relaci¨®n a prendas como el chador o la abaya.

A rebufo de Chanel y la mayor¨ªa de marcas que tienen sus miras de expansi¨®n y crecimiento puestas en mercados tan suculentos como el de Oriente Medio, los responsables de DKNY han hilado m¨¢s fino todav¨ªa y ?esta semana presentaban su primera colecci¨®n c¨¢psula enfocada al periodo de Ramad¨¢n (este a?o el mes sagrado de ayuno y abstinencia empez¨® el s¨¢bado pasado y durar¨¢ hasta finales de julio) y de venta en L¨ªbano, Jordania, Irak y los pa¨ªses del Golfo P¨¦rsico. Si bien la mayor¨ªa de marcas que se comercializan en la regi¨®n suelen ajustar sus prendas a las exigencia marcadas por el Cor¨¢n, o la interpretaci¨®n que se hace de este en ocasiones, es la primera vez que se lanza un cat¨¢logo completo y variado de dise?os adaptados a tan particular circunstancia por parte de una firma occidental. St¨¦phane Rolland, por ejemplo, abri¨® la veda la temporada pasada con una edici¨®n limitada de caftanes?que vendi¨® en exclusiva en su boutique de Abu Dhabi solo durante el Ramad¨¢n. De todos modos, la mayor¨ªa de dise?adores y publicaciones de moda locales lanzan colecciones especiales de vestidos y gu¨ªas de estilo para lucir correctamente durante el Iftar (fest¨ªn con el que se rompe el ayuno del d¨ªa al caer el sol) o el Suhoor (¨¢gape antes de que salgo el sol), citas que se convierten en verdaderos acontecimientos sociales.

As¨ª, aprovechando el lanzamiento de su sitio web en los pa¨ªses ¨¢rabes, DKNY ha fichado a dos it-girls con base en la zona, la estilista y editora de moda Yalda Golshafiri y la dise?adora Tamara Al Gabbani, para ?hacer las veces de embajadoras de su colecci¨®n edici¨®n limitada repleta de bonitos estampados cuyas prendas cubren hombros, rodillas y evitan escotaduras que dejen al descubierto el pecho o la espalda.

Parte de la t¨¢ctica de la l¨ªnea de difusi¨®n de Donna Karan consiste en apuntarse al carro del bautizado por los ingleses como Ramadan Rush, un periodo que abarcar¨ªa las semanas previas y posteriores al inicio y finalizaci¨®n del Ramad¨¢n (lo que los musulmanes llaman Eid) en el que las ventas en grandes almacenes como Harrod's crecen hasta en un 60 % a costa de los saud¨ªes, kuwat¨ªes y qatar¨ªes que viajan a Londres para cambiar la caridad y la ayuda al pr¨®jimo que deben practicar en ¨¦poca de Ramad¨¢n, por el derroche. De hecho, muchos establecimientos han modificado sus calendarios de rebajas para atraer a este tipo de clientela. Y no, no es que hayan adelantado sus descuentos sino que justamente los retrasan, porque para el turista procedente de Oriente Medio los saldos no son un reclamo sino todo lo contrario.?Seg¨²n informes del London Luxury Quarter (la asociaci¨®n de comerciantes de lujo del centro de Londres) , el gasto medio por cada consumidor venido de un pa¨ªs petrolero durante esta ¨¦poca supera al del comprador estrella a lo largo del a?o: aquel venido de China.?

Si bien la tendencia marca que hay que ajustar las estrategias no solamente a las temporadas sino tambi¨¦n a determinadas cirunsntancias religiosas marcadas por el calendario, las firmas de lujo que no hacen suyos ciertos imperativos como reclamo, se apuntan igualmente a la coyuntura, en este caso, ofreciendo piezas y servicios exclusivos para los compradores venidos de la parte m¨¢s pr¨®xima de oriente. Una pr¨¢ctica habitual entre firmas como Prada, Dior o Burberry, que se reservan los art¨ªculos m¨¢s obscenamente exclusivos para la ocasi¨®n, especialmente complementos tipo bolsos o zapatos confeccionados en los materiales m¨¢s ex¨®ticos y caros.

Yalda Golshafiri y Tamara Al Gabbani en la campa?a de verano 2014 especial Ramad¨¢n de DKNY.

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