La ¨²ltima campa?a de Eckhaus Latta ense?a (expl¨ªcitamente) a parejas practicando sexo

En el hist¨®rico y poco sutil arte de recurrir al sexo en publicidad de moda pens¨¢bamos que lo hab¨ªamos visto todo. Un bote de perfume introducido entre dos s¨²per senos por obra y gracia de Terry Richardson y Tom Ford, una modelo con la vagina rasurada con el logo de Gucci y un hombre postrado a sus pies dispuesto a practicar sexo oral (de nuevo Tom Ford al cargo, pero aqu¨ª Mario Testino a la c¨¢mara) o una ...

En el hist¨®rico y poco sutil arte de recurrir al sexo en publicidad de moda pens¨¢bamos que lo hab¨ªamos visto todo. Un bote de perfume introducido entre dos s¨²per senos por obra y gracia de Terry Richardson y Tom Ford, una modelo con la vagina rasurada con el logo de Gucci y un hombre postrado a sus pies dispuesto a practicar sexo oral (de nuevo Tom Ford al cargo, pero aqu¨ª Mario Testino a la c¨¢mara) o una mujer masturb¨¢ndose bajo un vestido vaporoso de Emanuel H¨²ngaro, entre muchos, much¨ªsimos otros casos m¨¢s. Ha sido la firma Ekchaus Latta, ¨Cla vanguardista, provocadora y arty marca que desfila en la New York Fashion Week, capitaneada por los dise?adores Mike Eckhaus y Zoe Latta y una de las primeras en apostar por ropa de g¨¦nero fluido¨C, la que ha decidido dar un paso m¨¢s en este eterno retorno de ¡®el sexo vende¡¯.

Su ¨²ltima campa?a retrata a parejas?reales (gay, interraciales y heterosexuales) manteniendo relaciones sexuales mientras visten algunas prendas de su colecci¨®n de primavera. Fotografiada por la coreana Heji Shin ¨Cla misma que combina su trabajo en editoriales de moda con un libro de educaci¨®n sexual para adolescentes¨C y con un casting de Samuel Muglia, las im¨¢genes, que pueden verse en su web,? han pixelado la parte m¨¢s expl¨ªcita. La fot¨®grafa ha explicado a la revista W que la campa?a pretende analizar ?c¨®mo usamos la sexualidad, en la relaci¨®n entre moda, publicidad y sexo, sabiendo que ¨¦ste vende? y ha a?adido que el objetivo es ?ser positivo con el sexo, con los cuerpos y con la propia sexualidad?. Las parejas, reclutadas por un anuncio de Craiglist, fueron fotografiadas en su habitaci¨®n, y solo estaba presente la fot¨®grafa en ese momento.

No es la primera vez que la firma traspasa los supuestos l¨ªmites de la moda. En Roach, el v¨ªdeo de su campa?a de primavera verano de 2015, insertaron im¨¢genes de un pene cubierto de salm¨®n ahumado. El a?o pasado prepararon para la Bienal del museo Hammer de Los ?ngeles una pieza, Smile, que reflexionaba con la teor¨ªa de la cuarta pared sobre los supuestos artificios y falsedades de las editoriales de moda.

?Sigue funcionando este provocador recurso? Sobre por qu¨¦ la moda no deja de bombardearnos con anuncios que explotan la sexualidad, y a prop¨®sito de este anuncio de Tom Ford,? Hadley Freeman escribi¨® una vez: ?No hay nada malo en apreciar la sexualidad, pero la tendencia de ciertos dise?adores que van, digamos, al grano en sus anuncios es un poco inmadura. El sexo, como dijo alguien alguna vez, vende, pero reducir la moda a una versi¨®n de dibujos animados sobre el sexo es contraproducente?. El d¨²o Eckhaus Latta ha decidido dar un paso m¨¢s, salir de los estereotipos y en l¨ªnea con su filosof¨ªa LGTBQ, ha producido una campa?a en la que parejas de toda clase, g¨¦nero y raza practican sexo. Una apuesta integradora en lo social pero que, inevitablemente, a muchos les ha hecho preguntarse ??pero esos crop tops son realmente c¨®modos y frescos como para dej¨¢rselos puestos mientras practicas sexo??.