Andr¨¦ L.Talley: ?Melania toma decisiones muy sabias a la hora de vestirse?

Va vestido con uno de sus caftanes de Dapper Dan de Harlem (?no de Dapper Dan para Gucci? especifica) y tiene sobre la mesa un libro de correspondencia de Tennessee Williams: se podr¨ªa pensar que Andr¨¦ Leon Talley es un bodeg¨®n en si mismo. El ex n¨²mero dos de Anna Wintour en Vogue estuvo en la Ciudad Condal como invitado de la pasarela del 080 Barcelona Fashion y para presentar The Gospel According to Andr¨¦, un documental rodado a su mayor gloria que arranca en Carolina del Norte, donde se crio, y acaba, en una nota melanc¨®lica, con Talley viendo en la televisi¨®n la victoria...

Va vestido con uno de sus caftanes de Dapper Dan de Harlem (?no de Dapper Dan para Gucci? especifica) y tiene sobre la mesa un libro de correspondencia de Tennessee Williams: se podr¨ªa pensar que Andr¨¦ Leon Talley es un bodeg¨®n en si mismo. El ex n¨²mero dos de Anna Wintour en Vogue estuvo en la Ciudad Condal como invitado de la pasarela del 080 Barcelona Fashion y para presentar The Gospel According to Andr¨¦, un documental rodado a su mayor gloria que arranca en Carolina del Norte, donde se crio, y acaba, en una nota melanc¨®lica, con Talley viendo en la televisi¨®n la victoria de Donald Trump. En una escena anterior, se le ve el d¨ªa de las elecciones comentando a una amiga, asesora de Clinton: ?Dile a Hillary que me llame si necesita ayuda para vestirse en la investidura?.

Talley habla como si pasar del sur segregado a una universidad de la Ivy League y de ah¨ª a comprarle el desayuno todos los d¨ªas a Andy Warhol en la revista Interview (era el recepcionista) y ser el confidente de Diana Vreeland fuera lo m¨¢s natural del mundo. Durante a?os, fue la ¨²nica persona negra que se sentaba en primera fila de los principales desfiles, pero tard¨® en ver lo que eso significaba. Wintour lo comenta en la pel¨ªcula, dice que durante mucho tiempo a Talley no le gustaba escribir sobre temas raciales, pero s¨ª le enviaba a ella largas cartas manuscritas sobre el asunto.

?No quer¨ªa parecer que estaba abogando por esos temas, no quer¨ªa ser un activista pol¨ªtico, coger un altavoz y gritar. Mi idea es que es mejor hablar flojito y apoyar grandes ideas discretamente. Cuando experimentaba el racismo, me lo guardaba para m¨ª. En los a?os setenta, una estilista en Par¨ªs me llam¨® Queen Kong; me lo dijo mi amiga Paloma Picasso y yo lo silenci¨¦ durante 40 a?os, hasta que lo dije en la pel¨ªcula?.

Hoy, sin embargo, destaca la importancia de tener a Virgil Abloh en Louis Vuitton y a Edward Enninful comandando la edici¨®n brit¨¢nica de Vogue. Si se le pide el nombre de una figura emergente, cita al joven afroamericano Laquan Smith, y cuando tiene que destacar algunos de los reportajes m¨¢s importantes que ha producido en toda su carrera destaca la primera portada de Michelle Obama como primera dama, un editorial con Iman y la vez que hizo posar a Naomi Campbell como Escarlata O¡¯Hara.

?Qu¨¦ cambi¨®?, ?cu¨¢ndo hizo clic? ?Lleg¨® un punto en que me di cuenta de que como un miembro prominente de la redacci¨®n era mi obligaci¨®n promover la excelencia negra, ya fuera una modelo, un libro, una pel¨ªcula o una obra de teatro?. Ese t¨¦rmino, ¡®excelencia negra¡¯, aparece tambi¨¦n en el documental. Un amigo de la infancia cuenta que era ese el est¨¢ndar que se les ped¨ªa en su escuela, 100% afroamericana, ser ?mejores que el mejor?. Eso jam¨¢s se le ha pedido a un hombre blanco heterosexual. ?Pues s¨ª, este es un mundo blanco y hay un doble rasero. Es triste, pero mejor no me lleve por ah¨ª. Iman siempre lo dice. Ella ten¨ªa que hacer 14 trabajos mientras que sus colegas blancas consegu¨ªan lo mismo con solo tres?.

En 2013, sorprendi¨® su decisi¨®n de dejar Cond¨¦ Nast despu¨¦s de tres d¨¦cadas y fichar por ?los rusos? (la edici¨®n rusa de Num¨¦ro). ?Lo hice por el dinero ¨Cadmite sin pesta?ear¨C. Nunca en la vida me hab¨ªan pagado tanto. En Vogue me hab¨ªan bajado el sueldo y quer¨ªa mantener mi estilo de vida?. Dur¨® tan solo 12 n¨²meros, en los que dice que firm¨® algunos de sus mejores trabajos y se dijo que abandon¨® en protesta por las leyes hom¨®fobas del pa¨ªs. ?No voy a hablar de Rusia?, zanja. ?Y de Estados Unidos? Asegura que dos a?os despu¨¦s, sigue con la misma sensaci¨®n de shock. Abomina la pol¨ªtica migratoria de Trump (?es antiamericana?) pero mantiene su debilidad por Melania Trump: ?Ella no est¨¢ cautiva, qu¨¦ tonter¨ªa. Se cas¨® con el hombre que quer¨ªa. Es amable y generosa y toma sabias decisiones a la hora de vestirse?.