Diane von F¨¹rstenberg: ¡°Mi madre me dijo ¡®el miedo nunca es una opci¨®n¡¯. Eso me marc¨®¡±
Ha sido princesa, empresaria y presidenta de los dise?adores estadounidenses. Ahora repasa sus lecciones de vida en ¡®Own It. The Secret to Life¡¯.
Todo empieza con la A de amor, una de las tres palabras imprescindibles para Diane von F¨¹rstenberg, junto a gratitud y conocimiento. La dise?adora sostiene que los vocablos tienen poder y por eso ha decidido resumir sus lecciones de vida a trav¨¦s de ellos, en Own It. The Secret to Life (Phaidon), un glosario lleno de t¨¦rminos que han definido su existencia. ¡°Quer¨ªa escribir un libro de consejos. Al principio iba a ser a...
Todo empieza con la A de amor, una de las tres palabras imprescindibles para Diane von F¨¹rstenberg, junto a gratitud y conocimiento. La dise?adora sostiene que los vocablos tienen poder y por eso ha decidido resumir sus lecciones de vida a trav¨¦s de ellos, en Own It. The Secret to Life (Phaidon), un glosario lleno de t¨¦rminos que han definido su existencia. ¡°Quer¨ªa escribir un libro de consejos. Al principio iba a ser algo divertido y superficial, pero lleg¨® la covid y se transform¨® en algo serio, edificante. De ah¨ª la idea de Own It, asumirlo, porque esta pandemia nos ha puesto a todos ante un espejo y hemos tenido que aprender a afrontar lo que ocurre; quer¨ªa recordar a cada persona que solo ella tiene la llave para dominar su vida¡±, explica mezclando ingl¨¦s y espa?ol.
Habla por tel¨¦fono desde su casa de Connecticut, donde ha pasado casi todo 2020. All¨ª empez¨® a escribir su libro. Y desde all¨ª ha seguido dirigiendo su marca de moda (DVF), ha dise?ado un jarr¨®n para la l¨ªnea de hogar de H&M y ha comenzado a esbozar un nuevo proyecto en el que quiere volcarse a partir de ahora: una organizaci¨®n para ayudar a mujeres v¨ªctimas de violencia dom¨¦stica. Porque Diane von F¨¹rstenberg es lo que ella define como ¡°a woman in charge¡± (una mujer al frente): ¡°Es un compromiso contigo misma, ser la due?a de tu destino. Hacerse cargo incluso de las cosas que no te gustan. Tienes que aceptar tus imperfecciones para convertirlas en tus activos; si asumes tu vulnerabilidad te dar¨¢s cuenta de que se convierte en fuerza¡±.
A los 74 a?os, se ve con autoridad para dar consejos: ¡°He tenido una vida plena. No siempre fue maravillosa, he tenido ¨¦xitos, pero tambi¨¦n fracasos, dificultades, divorcios, c¨¢ncer¡ Pero en conjunto ha sido buena. Y trabajando en este libro he visto que el gran secreto es que nunca me he mentido a m¨ª misma¡±. Naci¨® en Bruselas, estudi¨® en Suiza y all¨ª conoci¨® a su primer marido, el noble Egon von F¨¹rstenberg. Ha sido princesa con t¨ªtulo, reina de las noches de Studio 54, empresaria de ¨¦xito (en 1970 cre¨® su marca de ropa) y presidenta del Consejo de la moda estadounidense (CFDA, de 2006 a 2019, cuando Tom Ford tom¨® el relevo). ¡°?Cu¨¢l es mi rol? Con 24 ten¨ªa dos hijos, y mi vida adulta la ha definido ser madre y luego abuela. Pero mi verdadero rol siempre ha sido ser quien yo soy. De peque?a no sab¨ªa a qu¨¦ me quer¨ªa dedicar, pero s¨ª sab¨ªa el tipo de mujer que quer¨ªa ser: una mujer que pod¨ªa tener una vida igual a la de un hombre¡±.
Su wrap dress (vestido cruzado), un dise?o funcional y favorecedor creado en 1973, marc¨® un hito y defini¨® a una mujer independiente y confiada. ¡°Fue un enorme ¨¦xito, y cuanto m¨¢s ¨¦xito ten¨ªa, m¨¢s seguridad me daba¡±, sentencia. ?C¨®mo vestir¨ªa a las l¨ªderes de la actualidad, como la vicepresidenta Kamala Harris? ?Son sus elecciones estil¨ªsticas una declaraci¨®n de intenciones? ¡°La moda es un reflejo del mundo. Es lo que se quiere proyectar en un momento concreto. Desde luego, si eres la primera vicepresidenta quieres dar una imagen de fuerza, como hizo ella en la inauguraci¨®n, pero siendo a la vez muy femenina. Tiene un buen cuerpo, es alta¡ Le encantan las chaquetas, as¨ª que creo que le har¨ªa una¡±. Seg¨²n Von F¨¹rstenberg, hay un claro avance social gracias a la ¨²ltima ola feminista, aunque quedan pasos por delante: ¡°Estamos haciendo progresos, y, por otro lado, a los hombres les est¨¢ costando mucho aceptarlo¡ Pero la salvaci¨®n del mundo est¨¢ en las manos de las mujeres, sin duda¡±.
No se recrea en la nostalgia, pese a tener una vida plagada de an¨¦cdotas. Por ejemplo, cuenta que aprendi¨® a hablar espa?ol cuando con 17 a?os pas¨® un curso en Madrid. ¡°Viv¨ªa en una pensi¨®n de chicas de la calle Libertad. Fui a estudiar Filosof¨ªa y Letras a la universidad, pero la facultad estaba siempre cerrada porque hab¨ªa huelgas¡±, evoca y a?ade que se hizo amiga de ¡°un joven muy socialista que estudiaba leyes¡±, el luego presidente Felipe Gonz¨¢lez, pero despu¨¦s no mantuvieron el contacto. M¨¢s que en esos momentos pasados, prefiere pensar en el futuro, algo sobre lo que ha reflexionado mucho a ra¨ªz de la pandemia: ¡°Esto lo va a transformar todo, no solo la moda. Va a cambiar profundamente la forma en que funciona la sociedad. No s¨¦ c¨®mo exactamente, pero he visto dos grandes tendencias: la gente se ha acercado a la naturaleza y a la vez a la tecnolog¨ªa. Para m¨ª, son las dos grandes fuerzas que van a marcar el futuro¡±.
Le apasiona el mundo de los podcast ¨Cse ha lanzado a ¨¦l con uno llamado, c¨®mo no, In Charge¨C no teme reinventarse: en los ¨²ltimos meses ha decidido cambiar el modelo de negocio de su marca, para centrarse sobre todo en el ¨¢mbito online, y quiere volcarse en la filantrop¨ªa. ¡°Durante la covid hemos vivido un terrible aumento de la violencia dom¨¦stica hacia las mujeres, y eso es tremendo. Estoy investigando, porque aunque existen muchos recursos en educaci¨®n, centros de acogida o asesoramiento legal, quiero unirlos todos en una gran red. Estoy viendo c¨®mo puedo utilizar mi voz, mi experiencia, mi conocimiento y mis contactos para que otras mujeres puedan vivir la vida que quieren vivir¡±.
Porque, recuerda, el consejo que ha guiado la suya se lo dio una mujer, su madre, Liliane Nahmias, superviviente de un campo de concentraci¨®n nazi. ¡°Ella me dijo: ¡®El miedo nunca es una opci¨®n¡¯. Y eso me marc¨®. Nunca me permiti¨® tenerlo. De peque?a yo ten¨ªa miedo de la oscuridad, y ella me meti¨® en un armario para quit¨¢rmelo. Despu¨¦s de 10 minutos all¨ª, me di cuenta de que no hay nada que temer, porque la oscuridad no es tan oscura¡±.