Er¨®tica, para ¡®milennials¡¯ y dirigida por mujeres: as¨ª es la competencia digital de Playboy

Cuando el pasado a?o la revista Playboy anunci¨® su intenci¨®n de dejar de publicar desnudos femeninos el mundo se dividi¨® en dos bandos, los que aplaudieron la decisi¨®n y los que lloraron el cambio de filosof¨ªa de una cabecera ya m¨ªtica, que revolucion¨® el campo de las revistas masculinas all¨¢ por 1953, cuando lanz¨® su primera edici¨®n con las fotos ...

Cuando el pasado a?o la revista Playboy anunci¨® su intenci¨®n de dejar de publicar desnudos femeninos el mundo se dividi¨® en dos bandos, los que aplaudieron la decisi¨®n y los que lloraron el cambio de filosof¨ªa de una cabecera ya m¨ªtica, que revolucion¨® el campo de las revistas masculinas all¨¢ por 1953, cuando lanz¨® su primera edici¨®n con las fotos de una Marilyn Monroe al natural.

Pero, como casi todo en estos tiempos, la decisi¨®n no se deb¨ªa a razones morales sino econ¨®micas. La edici¨®n norteamericana de Playboy no era rentable y la circulaci¨®n hab¨ªa ca¨ªdo desde los 5,6 millones de ejemplares, en 1975, a unos 800.000 actuales. La revista no renunciar¨ªa totalmente a su cuota de sensualidad, pero de ahora en adelante ser¨ªa una provocaci¨®n apta para menores. ¡°El mercado apuntar¨¢ al joven profesional y a partir de ahora se podr¨¢ leer en la oficina¡±, apuntaba un art¨ªculo de la BBC, que me hizo formular mi propia teor¨ªa. Hay muchos personajes desocupados en las oficinas de todo el mundo que ojean, en su horario laboral, las redes sociales y revistas online, pero que no se atreven a hacerlo con publicaciones de contenido er¨®tico, ya que puede quedar en el historial de su ordenador. Liberando a Playboy de su parte m¨¢s subida de tono, es probable que se ganen miles de lectores en todo el mundo, de 9.00 a 17.00 horas, debieron pensar algunos.

Pero la teor¨ªa que esbozaban los directivos de la revista es que el f¨¢cil acceso a la pornograf¨ªa en Internet, a tan solo un clic de cualquier acto sexual posible, ha hecho que las im¨¢genes er¨®ticas ya no interesen a nadie. Bueno, a nadie no, Arsenic Magazine, que podr¨ªa calificarse como la versi¨®n millennial, renovada e interactiva de Playboy, una startup que oficialmente se lanz¨® en junio de 2015, ha demostrado lo contrario. 960.000 seguidores en Instagram, m¨¢s que Maxim y Esquire juntos, y 500.000 personas que cliquean las fotos o v¨ªdeos del canal de Arsenic en Snapchat. Ya que el proyecto cuenta, seg¨²n afirma Amanda Micallet, una de sus fundadoras, a S Moda, ¡°con varias plataformas que distribuyen sus contenidos, ArsenicTV, (Snapchat), ArsenicMagazine (Instagram) y, recientemente hemos lanzado ArsenicAudio, dedicado a la m¨²sica. Pero pensamos ampliar nuestros canales en los pr¨®ximos meses¡±.

La idea empez¨® como un hobby entre dos amigos, Amanda Micallef y Billy Hawkins, que hicieron su primera sesi¨®n de fotos en la casa de uno de ellos, con modelos, fot¨®grafos y ayudantes voluntarios, y con muy pocos medios. Pero, poco a poco, fue transform¨¢ndose en una forma de vida y en una plataforma con miles de seguidores y personas an¨®nimas, que suben sus fotos o v¨ªdeos de manera gratuita porque, la cada vez m¨¢s numerosa audiencia de Arsenic, puede sacarlos de su anonimato. Desde Los ?ngeles, un peque?o grupo de personas, en su gran mayor¨ªa compuesto por mujeres, trabajan en el proyecto, que aspira a crecer y a abarcar m¨¢s campos, partiendo de su filosof¨ªa inicial: hacer fotos sensuales tal y como las modelos quieren y no como los fot¨®grafos o los gustos masculinos han dictado hasta la fecha. Pero adem¨¢s, las chicas que muestran su lado m¨¢s er¨®tico en Arsenic pertenecen a una est¨¦tica sin ideas preconcebidas ni limitaciones. ¡°Abrazamos muchos tipos diferentes de mujeres, y eso es parte de la raz¨®n por la que la idea ha enganchado. No tienes que ser rubia y medir 1,80 de estatura¡±, apuntaban sus creadores a la revista Business Insider. ¡°Nuestras modelos pueden parecerse a la vecina de enfrente, y no necesitan salir retocadas o manipuladas digitalmente. Son im¨¢genes reales como la vida misma¡±.

Micallef y Hawkins quer¨ªan, en 2014, hacer una revista, pero no contaban con los medios suficientes. Enseguida se dieron cuenta de que por aquel entonces, cabeceras como Playboy o Maxim no se hab¨ªan lanzado de lleno al mundo digital, mientras que MTV era el ¨²nico que dictaba los gustos. Unos gustos algo alejados de lo que se coc¨ªa en Youtube y Snapchat, conocedores de lo que realmente demandan los nuevos tiempos. Por as¨ª decirlo, exist¨ªa un trono, aunque ning¨²n candidato adecuado para ¨¦l.

El nuevo sexy, aut¨¦ntico y sin filtros

Como ocurre a menudo con las grandes ideas, la escasez de medios es la que acaba, finalmente, creando el esp¨ªritu de la nueva empresa. Seg¨²n Amanda Micallef, ¡°la misi¨®n de Arsenic es la democratizaci¨®n de sus contenidos. Creemos que hay gente haciendo arte en todo el mundo y queremos darle la oportunidad de mostrar su trabajo, mientras otros contribuyen a elegirlo y difundirlo. Cuando empezamos este proyecto sab¨ªamos que las mujeres necesitaban espacios en los que crear y expresarse libremente. Decidimos darles poder en un campo en el que, a pesar de que son ellas las grandes protagonistas, est¨¢ dirigido por hombres bajo sus propias premisas. Al empoderar a esas mujeres -generalmente modelos-, ellas, a cambio, fueron las que forjaron la est¨¦tica de lo que hoy es Arsenic¡±.

Otro de los triunfos de esta plataforma es el de crear una nueva est¨¦tica, un nuevo sexy en el mundo de las im¨¢genes er¨®ticas, y la respuesta de Amanda es casi un discurso feminista en el poco ¨Ca priori- feminista oficio de posar ligera de ropa o con ninguna encima. ¡°Hist¨®ricamente hablando, lo que es o no es sexy ha estado siempre definido por el hombre. Ellos han sido los primeros periodistas, bi¨®grafos, escritores de ficci¨®n, pintores o directores de cine. Arsenic, sin embargo, pregunta a las mujeres qu¨¦ es lo que encuentran sexy en otras mujeres, o c¨®mo se sienten m¨¢s bellas. Y nos hemos dado cuenta de que las nuevas generaciones ven m¨¢s atractivas a las chicas si adem¨¢s de sexys, tienen algo de poder y pueden controlar sus vidas y lo que les rodea. Porque ellas saben lo que les gusta y lo que quieren¡±, sentencia Amanda.

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El p¨²blico de este proyecto dista mucho de ser el t¨ªpico consumidor de revistas masculinas, que adem¨¢s de reportajes sobre como evolucionar¨¢ la crisis mundial en los pr¨®ximos a?os o el ¨²ltimo modelo de reloj lanzado por Rolex, quieren relajar la pesta?a y la mente, admirando bustos y gl¨²teos femeninos. De hecho, el 40% de su audiencia est¨¢ compuesta por mujeres que, en palabras de sus creadores, ¡°celebran la belleza femenina¡±. A mi pregunta de que si no creen que estas mismas f¨¦minas podr¨ªan, igualmente, festejar la masculinidad y admirar cuerpos de hombres, es decir, si piensan incluir desnudos masculinos, Amanda contesta, ¡°las mujeres est¨¢n al mando de esto como creadoras, facilitadoras y estrellas. Pero estamos creciendo y expandi¨¦ndonos en otras ¨¢reas en las que los hombres tendr¨¢n un papel m¨¢s significativo frente a las c¨¢maras¡±.

La primera cr¨ªtica que cualquiera de sus detractores podr¨ªa hacerle a Arsenic es que sus contenidos carecen de la calidad y la sofisticaci¨®n a que los consumidores de este producto est¨¢n acostumbrados. Pero el ¨¦xito de esta idea reside no es la excelencia, sino en la autenticidad. ¡°Nuestra fuerza no est¨¢ en ser mejores, sino en ser m¨¢s reales y mucha gente aprecia este ingrediente de nuestro producto. No se trata de supermodelos. Tal vez estas sean m¨¢s atractivas, cient¨ªficamente, debido a la simetr¨ªa de sus caras, por ejemplo. Pero jam¨¢s vas a encontr¨¢rtelas o hablar con ellas. Son casi irreales, pero si podr¨ªas conocer a nuestras chicas o hablar con ellas¡±, cuenta Amanda.

Esta apuesta por la vida real y sin filtros es lo que ha determinado la elecci¨®n de Snapchat, como uno de sus soportes. En el fondo, ¨¦ste funciona de forma similar a una app de mensajer¨ªa instant¨¢nea, permitiendo enviar fotos o v¨ªdeos a particulares o grupos. La principal diferencia aqu¨ª es que el emisor selecciona el tiempo que el receptor podr¨¢ ver ese mensaje. Snapchat es una de las apps m¨¢s r¨¢pidas a la hora de sacar una foto con el m¨®vil y compartirla. Ef¨ªmero e imperfecto son calificativos que la definen bien, a diferencia de otras como Instagram. Por eso Snapchat tiene mucho que ver con aspectos de la vida cotidiana sin af¨¢n de permanencia y exentos de la presi¨®n de la perfecci¨®n que existe en otras redes sociales. ¡°Nos gusta Snapchat¡±, cuenta Micallef, ¡°por un mont¨®n de razones, pero sobre todo porque es aut¨¦ntica. Creemos que el v¨ªdeo es una de las formas de expresar algo que m¨¢s engancha. Snapchat permite que cualquiera pueda publicar contenidos desde cualquier parte del mundo y sin la necesidad de ning¨²n tipo de pedigree¡±.

Si algo ha dejado patente este proyecto, al igual que muchos otros que florecen cada d¨ªa, es que por obra y gracia del mundo digital, ya no hace falta disponer de demasiado dinero para hacer una revista o un medio de comunicaci¨®n. Y que siguiendo la filosof¨ªa de Marcos Weskamp, fundador de Flipboard, ¡°las personas ser¨¢n un medio de comunicaci¨®n en s¨ª mismas¡±. Cu¨¢ndo le pregunto a Amanda el secreto para conseguir que otros se involucren en una idea y trabajen gratis, me comenta, ¡°a las personas creativas les gusta crear, solo necesitan un soporte donde hacerlo¡±. La historia de Arsenic est¨¢ llena de momentos en los que los propios fundadores comprobaban, con gran asombro, como una camarera que los conoci¨® en un restaurante se ofrec¨ªa a colaborar con ellos, solo ¡°para ser parte de la idea¡±; o como en un viaje a Nueva York, en el que al cancelarse una cita de negocios, se aprovech¨® para hacer una improvisada sesi¨®n de fotos. En 24 horas y a trav¨¦s de las redes sociales consiguieron modelos, fot¨®grafos y personal que particip¨® voluntariamente en la idea.

Con una audiencia del 95% de personas por debajo de los 35 a?os y el 65% entre los 18 y los 24, Arsenic parece haber conectado con el esp¨ªritu de los nuevos tiempos. Le pregunt¨® a Amanda cu¨¢l es el secreto de su ¨¦xito. ¡°Somos desacomplejadamente aut¨¦nticos y creemos que todo el mundo se merece tener voz. No se trata de nosotros, se trata de ti¡±.