La paradoja del eterno ba?ador negro: ?qu¨¦ significa su regreso a las playas?

Internet es el territorio de la rapidez. Hace un par de semanas se public¨® una imagen de Carlota Casiraghi con un traje de ba?o negro en el Hotel du Cap-Eden-Roc y, en pocos minutos, alguien enfrent¨® esa foto con otra. Esta mostraba a su madre y su abuela paseando por una playa norteamericana. Las tres generaciones hab¨ªan elegido un ba?ador similar. A las dos fotos las separan casi cincuenta a?os.? Todo lo que vamos a escribir en este art¨ªculo est¨¢ contenido en estas im¨¢genes de Carlota Casiraghi y Carolina y Gracia de M¨®naco que ya anuncian el verano. Esta es una breve exploraci¨®n de una prenda que nunca acaba de irse y tampoco acaba nunca de llegar del todo. Este a?o, sin embargo, est¨¢ m¨¢s presente en tiendas y redes sociales que en temporadas anteriores demostrando que ni es sencillo ni es discreto. Un ba?ador negro es todo intensidad: es como un cuadro de Soulages.

El ba?ador negro es una paradoja: parece f¨¢cil y tampoco lo es, parece cl¨¢sico y no tiene por qu¨¦ serlo, es discreto, pero exige personalidad para llevarlo. A esta prenda la han acusado, porque a veces eso suena a acusaci¨®n, de ser un b¨¢sico. No lo es: falsamente humilde. Es poderoso, es lorquiano y tiene mucha ?demasiada? Presencia. ?Qui¨¦n se la juega todo el verano a un solo ba?ador negro? Gabriela Ortiz, fundadora de Bo Star, declara ¡°Siempre debe ser un ba?ador complementario: imag¨ªnate vestir siempre con un vestido o un traje negro, ?ser¨ªa aburridis¨ªmo!¡± Tampoco es para todos los p¨²blicos y esta es otras de sus contradicciones. Esta prenda requiere de la mayor¨ªa de edad para usarse (demasiada intensidad para alguien menor) y es m¨¢s, requiere haber vivido un poco. Como todo traje de ba?o nos reta mucho m¨¢s que la ropa de calle: exige conexi¨®n con el cuerpo y depende de ¨¦l para funcionar o no. Es, quiz¨¢s, la prenda a la que m¨¢s perfecci¨®n le exige quien lo lleva. Adem¨¢s, elimina muchos marcadores de clase. ?Distinguimos, de lejos, un ba?ador de Eres de uno de cualquier marca de moda express? Esta pregunta es inc¨®moda, pero desvela la personalidad de la prenda.?

El LBS (Little Black Swimsuit) se usa desde principios del siglo pasado, momento en el que el traje de ba?o, de cualquier color, comienza a tener presencia en las sociedades desarrolladas como la anglosajona o la francesa. Las Olimpiadas de Atenas 1896 hab¨ªan popularizado la nataci¨®n y quienes quer¨ªan nadar quer¨ªan hacerlo con comodidad. Existe una imagen datada entre 1910 y 1915 de la nadadora Rose Pitonof en posici¨®n de salida, vistiendo un ba?ador negro y luciendo un peinado con trenzas m¨¢s propio de un retrato de Singer Sargent que de una competici¨®n deportiva. Ese mundo estaba a¨²n por estrenar: las mujeres estaban ocupando espacios impensables hasta entonces y el deporte se estaba colando en la vida cotidiana. A una sociedad nueva le correspond¨ªa ropa nueva.

La colecci¨®n del Costume Institute del Metropolitan conserva un ba?ador negro que data de los a?os 20. A¨²n est¨¢ realizado en lana, aunque ya se estaba experimentando con nylon y siluetas m¨¢s deportivas. Speedo, lo estaba haciendo en Australia desde 1913 y Jantzen, desde 1921, cuando fue la primera marca en fabricar ba?adores y llamarlos as¨ª. En aquellos tiempos era Hollywood y sus estrellas las que iban abriendo caminos: Clara Bow fue una de las primeras actrices en lucir un traje de ba?o enterizo negro de corte atl¨¦tico. Lo hizo en 1926, en una foto promocional de la Paramount.? A los estudios les interesaba transmitir valores de vitalidad y salud y una prenda as¨ª los concentraba.? En esa misma d¨¦cada, y en la otra costa del pa¨ªs, el fot¨®grafo de moda Hoyninguen-Huene retrataba modelos con traje de ba?o negro. Su hermana Betty hab¨ªa fundado una marca de ropa fund¨® Yteb, y ¨¦l se hab¨ªa implicado en el dise?o de los ba?adores. En 1928 ya hab¨ªa retratado a una modelo para VOGUE vistiendo uno de ese color. A?os despu¨¦s, siendo ya un fot¨®grafo de moda consolidado, seguir¨ªa fotografiando los ba?adores as¨ª de marcas como Lelong, Lanvin, Patou, Herm¨¨s o Molyneux.?Al otro lado del Oc¨¦ano, Coco Chanel tomaba el sol con un traje de ba?o negro tumbada en la arena de la Costa Azul en una ¨¦poca en la que las mujeres no tomaban el sol en traje de ba?o tumbadas en la arena. Todas estas personas ya lo sab¨ªan: el LBS era elegante, estilizaba y ten¨ªa potencia formal y esas siguen siendo algunas de sus virtudes. Tiene m¨¢s.

Una de las escenas m¨¢s ic¨®nicas de la Historia del Cine (cuando a¨²n generaba escenas ic¨®nicas) es la de Deborah Kerr besando a Burt Lancaster en la orilla del mar en De aqu¨ª a la eternidad (Fred Zinneman, 1953). El ba?ador negro que vest¨ªa pas¨® a la Historia del Cine, y de las escenas er¨®ticas. Ella, a quien siempre se hab¨ªa acusado de ser una actriz fr¨ªa declar¨®. ¡°Nadie pens¨® que sab¨ªa actuar hasta que no me puse un ba?ador¡±. La actriz era un eslab¨®n m¨¢s de una cadena que hab¨ªa iniciado Clara Bow y hab¨ªan continuado Ginger Rogers en los a?os 30 y Lucile Ball en los 40. En esta ¨¦poca Claire McCardell comenz¨® a usar materiales y t¨¦cnicas de ropa interior en los ba?adores: el resultado fueron piezas m¨¢s adaptables al cuerpo, m¨¢s c¨®modas y m¨¢s ¡°vestidas¡±; una de ellas se encuentra tambi¨¦n en la colecci¨®n del Costume Institute. En los 50 los ba?adores comenzaron a ser m¨¢s comunes: Marilyn Monroe la estrella absoluta los luc¨ªa. Como tambi¨¦n lo hicieron Sofia Loren en los 60, Jessica Lange en los 80, Diana de Gales en los 90, Sarah Jessica Parker en el 2000 y Lily Aldridge y las Kardashian hoy. Todas ellas, en su ¨¦poca, han marcado modas; sin embargo, el ba?ador negro nunca acaba de estar de moda y, por tanto, nunca deja de estarlo. Ah¨ª radica su encanto y por eso ha estado siempre presente en el armario de mujeres de estilo eterno como Carolina de M¨®naco, que lleva us¨¢ndolos desde que era adolescente.

El traje de ba?o negro no olvida su origen deportivo (v¨¦anse los cuadros de Alex Katz), aunque los tiempos han modificado su dise?o para encajarlo en el territorio de la moda. Esta temporada encontramos trajes de ba?o negros en las marcas de moda r¨¢pida como Zara, que los ofrece con un floripondio en el pecho, con apliques de malla y con cut out, como si quisiera quitarle el sambenito de prenda discreta. La de moda supers¨®nica tambi¨¦n los tienen, algunas independientes sostenibles como Anja Paris, cuentan este a?o con muchos modelos y las del lujo tradicional ofrecen los modelos justos para cubrir el expediente. Eres, el ¨¢rbitro m¨¢s elevado de la moda de ba?o, s¨ª vende ese color en varios modelos. Y el resto de la industria de la moda de ba?o mira siempre a Eres de reojo. Ortiz, que dise?a trajes de ba?o negro en la colecci¨®n de Bo Star, reflexiona sobre sus idas y venidas: ¡°en los ¨²ltimos a?os esta prenda ha estado ah¨ª, jugando su papel de una forma m¨¢s discreta y dejando paso a las modas ef¨ªmeras que surgen cada verano, pero siempre vuelve a coger posiciones porque es tremendamente seductor¡±.? Quiz¨¢s es demasiado seductor y por eso no todo el mundo puede defenderlo.?

?Cobrar¨¢ m¨¢s presencia el ba?ador negro este a?o o seguir¨¢ siendo eternamente testimonial, como hasta ahora? Depender¨¢ de sus ganas (capacidad tiene) para adaptarse al mercado. Etam ha lanzado este a?o uno que es talla ¨²nica, ¡°extensible hasta el infinito¡±, lo denomina. Skims, la marca fundada por Kim Kardashian y Jens Grede y que est¨¢ cosida con los hilos del zeitgeist, tiene algunos modelos. Est¨¢n agotados y tienen lista de espera. Est¨¢ por ver si es por el color y el dise?o o porque esta marca lo vende. Sin embargo, es un s¨ªntoma de que el traje negro siempre est¨¢ y, este a?o, m¨¢s que en anteriores. Ojal¨¢ siga siendo tan esquivo como siempre.