Simone Rocha: ?Narrar con fuerza engancha al consumidor, crea una conexi¨®n personal?
El relato historicista de la dise?adora irlandesa ya ha conquistado a p¨²blico e industria. Ahora lanza una nueva colecci¨®n c¨¢psula junto a Moncler.
Dicen que los irlandeses son grandes contadores de historias, quiz¨¢ por eso todas las propuestas de la dise?adora Simone Rocha se sostienen sobre un relato cargado de significado. ?Siempre he querido que la gente sintiera algo cuando ve una colecci¨®n; ya sea en el desfile, en im¨¢genes o en las tiendas. Narrar con fuerza engancha al consumidor, crea una conexi¨®n personal?, defiende. Su madre naci¨® en Irlanda, como ella; su padre, el reconocido dise?ador John Rocha, en Hong Kong. La moda teje su curr¨ªculo desde que era una ni?a: ...
Dicen que los irlandeses son grandes contadores de historias, quiz¨¢ por eso todas las propuestas de la dise?adora Simone Rocha se sostienen sobre un relato cargado de significado. ?Siempre he querido que la gente sintiera algo cuando ve una colecci¨®n; ya sea en el desfile, en im¨¢genes o en las tiendas. Narrar con fuerza engancha al consumidor, crea una conexi¨®n personal?, defiende. Su madre naci¨® en Irlanda, como ella; su padre, el reconocido dise?ador John Rocha, en Hong Kong. La moda teje su curr¨ªculo desde que era una ni?a: ?Crec¨ª en el estudio de mi padre, aprendiendo a coser o a hacer croch¨¦. Pero yo quer¨ªa estudiar Bellas Artes. No me decid¨ª por la moda hasta mucho tiempo despu¨¦s?, recuerda. Con solo 24 a?os se gradu¨® en la prestigiosa escuela Central Saint Martins (por la que han pasado nombres como John Galliano, Alexander McQueen o Stella McCartney). All¨ª fue acogida bajo el ala de la influyente docente Louise Wilson (?no ser¨ªa la dise?adora que soy hoy sin ella?) y en 2010 lanz¨® con gran ¨¦xito una primera colecci¨®n que ya sentaba las bases de un estilo muy propio.
En un mercado saturado en el que los j¨®venes creativos definen su personalidad por el m¨¦todo del ensayo y error, Rocha ha creado desde el primer d¨ªa una identidad visual tan potente como reconocible. Es su armadura para enfrentarse al mundo. Una fusi¨®n de siluetas historicistas, referencias recurrentes y t¨¦cnicas sobre las que sobrevuela un deseo constante de volver a dotar de significado la noci¨®n de ¡®feminidad¡¯, adapt¨¢ndola al presente: ?Los elementos delicados de mis colecciones contrastan con otros m¨¢s potentes. Hay un equilibrio entre hecho a mano y confecciones t¨¦cnicas o entre siluetas voluminosas y sastrer¨ªa masculina. Ayuda a mantener una armon¨ªa para que nunca resulte demasiado dulce, siempre introduzco un punto rudo?. Una ponderaci¨®n de elementos que persigue actualizar los lazos, los volantes, las transparencias o las perlas, a las que la irlandesa sacudi¨® su p¨¢tina rancia. La idea, como tantas otras en la carrera de Rocha, brota de sus ra¨ªces: su madre luci¨® en su boda un minivestido cubierto de ellas. ?Mi familia, el arte, la naturaleza, Hong Kong e Irlanda son elementos muy cercanos que me inspiran constantemente?.
Contenido, no cuentos
Si el cambio es el motor que activa los engranajes de la moda, la industria se encuentra al filo de la mayor metamorfosis de su historia reciente, provocada por un terremoto de nombre Covid-19. ?Esta es una crisis global sin precedentes y todo el mundo se tiene que adaptar r¨¢pidamente?, opina Simone Rocha. Parece otra era, pero hace dos meses escasos la irlandesa presentaba en la Semana de la Moda de Mil¨¢n su cuarta propuesta para el proyecto Moncler Genius, que regala libertad creativa a dise?adores de la talla de JW Anderson, Pierpaolo Piccioli o Richard Quinn. La colecci¨®n, cuyo lanzamiento se ha retrasado y ha visto la luz hoy jueves, reformula los c¨®digos de la casa italiana. Un trabajo, casi prof¨¦tico, que envuelve al cuerpo en una especie de caparaz¨®n protector que no renuncia a la est¨¦tica Rocha: ?Ha sido una oportunidad fant¨¢stica para desarrollar mi trabajo con nuevos materiales y t¨¦cnicas?. Inspirada en Fellini, en la danza y el movimiento es la ?interpretaci¨®n de la experiencia de Moncler, explorando tejidos y siluetas, pero coloc¨¢ndolos todos bajo la mirada femenina. Hay tul y formas basadas en el tut¨² que se oponen a las prendas exteriores, equilibrio entre feminidad y utilidad?, declara la dise?adora. Blindaje y protecci¨®n en una c¨¢psula que precisamente introduce una de las probables salidas a la crisis: la cooperaci¨®n. Porque la marca italiana ¨Ccon Remo Ruffini a la cabeza¨C fue visionaria a la hora de permitir a los dise?adores extender sus visiones individuales en experiencias creativas de amplio presupuesto. En dos a?os el experimento ha probado su val¨ªa. Todos salen ganando. ?Es una oportunidad incre¨ªble para alcanzar a audiencias m¨¢s amplias, as¨ª como expandir las relaciones ya existentes con nuestros clientes?, dice la creativa.
Como no se cansa de repetir en cualquier entrevista, Simone Rocha busca dotar a sus piezas de contenido, no contar cuentos de hadas impracticables. Su doctrina nunca olvida al elemento que da sentido a todo el proceso: el comprador. Pensadas para funcionar en el armario contempor¨¢neo, sus prendas son tan teatrales como funcionales. Belleza y comodidad que generan un resultado adictivo. As¨ª lo aseveran por ejemplo las decenas de fans que invaden cada uno de sus desfiles, luciendo de arriba abajo sus propuestas. ?Las colecciones atraen a cualquiera que conecte con la feminidad de una manera moderna. Eso crea una audiencia muy amplia con gente de cualquier edad, g¨¦nero o estilo de vida?. Con sus asiduos desarrolla una relaci¨®n bidireccional en la que todos aportan: ?La apertura de mi primera tienda en Londres, en 2015, me present¨® directamente a nuestra base de usuarios. Pudimos relacionarnos con ellos y recibir comentarios d¨ªa a d¨ªa?. Aquel descubrimiento le sirvi¨® para atar un cabo que a la industria se le ha escapado durante d¨¦cadas: las adolescentes que suelen protagonizar los desfiles no tienen mucho que ver con las mujeres que finalmente compran. Por eso la de Rocha fue una de las primeras firmas en introducir otros cuerpos sobre la pasarela: ?Quer¨ªa que tuvieran representaci¨®n en el casting?. Maniqu¨ªes septuagenarias como Benedetta Barzini o Jan de Villeneuve y actrices como Chlo? Sevigny o Audrey Marnay han modelado para ella.
Su universo no puede entenderse sin lo que le aportan artistas como Roni Horn, Jackie Nickerson o Eoin McLoughlin, con los que colabora. Tampoco sin sus progenitores: ?Mi padre siempre ha sido fuente de consejo especializado para desarrollar mi negocio?. Su madre, Odette, es socia de su aventura. ?La ¨²ltima pieza? La artesan¨ªa que suma individualidad y atemporalidad. ?Lo hecho a mano es parte de nuestra historia m¨¢s all¨¢ del tiempo y las culturas. Son elementos que vuelven una y otra vez a mis colecciones como reflejos de lo tradicional reinterpretado?. Al final todo encaja. Quiz¨¢ porque, como dice Simone Rocha, ?la moda siempre ha sido un recipiente para que las personas se expresen, ya sea a trav¨¦s de c¨®mo la visten y consumen o de c¨®mo la crean?. Y su mensaje ha demostrado que tiene p¨²blico.