Victoria Abril: ?No s¨¦ qu¨¦ significa ¡®trending topic¡¯, pero me encanta serlo?
La actriz se sube por primera vez a la pasarela para la firma de lencer¨ªa Andr¨¦s Sard¨¢. Charlamos con ella tras comprobar el revuelto que ha causado en redes sociales su debut como modelo.
?Ah ?s¨ª? ?C¨®mo dices que soy??, nos pregunta Victoria Abril minutos despu¨¦s de debutar como modelo para la firma de lencer¨ªa Andr¨¦s Sard¨¢. ?Tren-ding to-pic?, repite separando las s¨ªlabas e intentado interiorizar la expresi¨®n. Y despu¨¦s grita mirando al equipo de la marca: ?Que me dice esta chica que soy trending topic?. Le explicamos que el anglicismo no significa otra cosa que ser tendencia nacional en unas redes sociales que han tuiteado, con ...
?Ah ?s¨ª? ?C¨®mo dices que soy??, nos pregunta Victoria Abril minutos despu¨¦s de debutar como modelo para la firma de lencer¨ªa Andr¨¦s Sard¨¢. ?Tren-ding to-pic?, repite separando las s¨ªlabas e intentado interiorizar la expresi¨®n. Y despu¨¦s grita mirando al equipo de la marca: ?Que me dice esta chica que soy trending topic?. Le explicamos que el anglicismo no significa otra cosa que ser tendencia nacional en unas redes sociales que han tuiteado, con entusiasmo, sobre su ¡®performance¡¯ sobre la pasarela. Ahora parece haberle quedado m¨¢s claro y denota cierta felicidad por convertirse en lo m¨¢s comentado del d¨ªa. ?Esta no me la sab¨ªa?, r¨ªe.
La que fuera musa de Almod¨®var y Aranda ha tocado a lo largo de los a?os casi todos los palos del mundo art¨ªstico: el cine, la televisi¨®n, la m¨²sica¡ Pero le faltaba la pasarela. ?S¨ª, es la primera vez que desfilo, cari?o. Y me ha encantado la experiencia. La verdad es que cuando me lo propuso Nuria ¨CSard¨¢, directora creativa de la firma¨C me cost¨® verme en el papel porque mido un metro sesenta e iba a desentornar al lado de esas mujeres grandotas. Pero vino hasta Par¨ªs para seducirme. Me dijo ¡®Te quiero, te quiero, te quiero para mi desfile¡¯. Y no pude decir que no?, cuenta a S Moda. La colecci¨®n, inspirada en la Revoluci¨®n Francesa, no pod¨ªa tener otra mujer que encarnara mejor el esp¨ªritu. Es medio parisina (vive desde hace a?os en la capital) y, sin duda, una agitadora. ?Cuando me dijo de qu¨¦ iba la colecci¨®n me pareci¨® fant¨¢stico hablar de revoluci¨®n en la moda. Sobre todo, trat¨¢ndose de una firma de lencer¨ªa?, confiesa.
Abril, encargada de abrir y cerrar el desfile, irrumpi¨® en la pasarela con un look blanco inmaculado coronado por un miri?aque haciendo lo que mejor sabe: interpretar. Y arranc¨® de nuevo los aplausos del p¨²blico cuando protagoniz¨® la ¨²ltima salida cubierta con antifaz y peluca pero presumiendo de silueta. ?No me hubiera atrevido a desfilar en sujetador y tanga. Cada cosa a su edad y a su momento. Ahora, he de decir que en la segunda parte he ido a pierna batiente?, afirma rotunda mientras le da un sorbo a la copa de cava que acaba de servirle el equipo.
A pesar de que es amiga de Jean Paul Gaultier y no se pierde ninguno de sus desfiles, nunca antes se hab¨ªa atrevido a protagonizarlos. No deja claro si es que no se lo han propuesto o es que no ha querido, pero vuelve a mencionar su altura como excusa. ?Aunque si me lo volvieran a proponer y me encajase la tem¨¢tica o el personaje, tal vez lo har¨ªa?. Abril, a sus 58 a?os, ha visibilizado el poder de la mujer madura en la pasarela madrile?a. ?Jean Paul Gaultier ya sub¨ªa en los 80 a se?oras con el pelo blanco y me parece muy bien porque las viejitas tambi¨¦n tenemos que vestirnos?. Hace una pausa por mi cara de sombro y contin¨²a: ?S¨ª, s¨ª, cari?o, ya puedo decir que soy una viejita aunque me mantenga bien. Y s¨ª, creo que es importante que las viejitas desfilemos. Pero son pocas las que lo hacen porque siempre quieren dos metros de mujer?. Esta ¨²ltima frase la pronuncia sin ning¨²n atisbo de cr¨ªtica. Y quiere dejarlo claro: ?Lo entiendo porque son las que mejor lo lucen. A esas chicas les pones un saco de patatas y les queda divinamente?.
??Qu¨¦ dise?adores espa?oles le gustan? ?Sigue las semanas de la moda??, le preguntamos. ?Sigo a Custo Barcelona desde los 80 y es de quien tengo m¨¢s prendas antiguas. Pero la verdad es que solo me sirvo de la moda para mi trabajo de actriz. En mi d¨ªa a d¨ªa, nena, me puedo tirar con lo mismo la semana entera; lo lavo y me lo vuelvo a poner. Y siempre llevo ropa muy b¨¢sica, zapato c¨®modo, no me maquillo ni me peino. Tiene que haber una especie de diferencia entre Victoria Abril cuando est¨¢ trabajando y cuando est¨¢ en su d¨ªa a d¨ªa?.
Esa Victoria Abril, la que trabaja, triunfa en Francia gracias a la serie de televisi¨®n Clem y, aunque ¨²ltimamente act¨²a poco en Espa?a, protagoniz¨® el a?o pasado Nacida para ganar, un filme que pas¨® sin pena ni gloria por la cartelera. ?Me parece injusto que solo estuviera una semana y media en las salas y ni siquiera la gente de la industria la viera. Vicente Villanueva es un director maravilloso y me da pena que las ni?as (se refiere a sus compa?eras de reparto, Alexandra Jim¨¦nez y Cristina Casta?o) no tuvieran ninguna nominaci¨®n en los Goya?, revela. Ella tampoco la tuvo, ausent¨¢ndose en la pasada gala de los premios del cine espa?ol. ?No me invitaron porque ya di un premio el a?o anterior y no voy a darlo todos los a?os. De hecho ese d¨ªa estuve en Barcelona preparando el desfile?, aclara.
Para cerrar nuestro encuentro le preguntamos qu¨¦ le pareci¨® el discurso que pronunci¨® Ana Bel¨¦n, Goya de Honor de este a?o y que aprovech¨® para denunciar el machismo en la industria. ?Mira, la cuarentena es una d¨¦cada maldita. Eres muy joven para hacer la vieja y muy vieja para hacer la joven. Sin embargo, a los 50 puedes ser todas: la madre, la t¨ªa, la hija¡ y te vuelven a llamar. Vuelve el trabajo, que es exactamente lo que me ha pasado a m¨ª. Creo que s¨ª, que es algo machista porque solo le ocurre a las mujeres, no a los hombres. Los hombres trabajan casi m¨¢s a los cuarenta que a los treinta?. Y zanja: ?Lo que hay que hacer si no te llaman es llamarte t¨². Fue lo que yo hice. Me dediqu¨¦ a cantar y a hacer mis giras?.
Sobre si la volveremos a ver en la industria patria, de momento afirma no saber nada. ?Cari?o, no tengo ni idea de si volver¨¦ a Espa?a pero de momento me voy a La Habana a rodar La incre¨ªble historia de Celeste con Arturo Infante y voy a hacer de extraterrestre?. Dos preguntas casi obligadas concluyen el encuentro: ??Sigue ¡®estando frita¡¯ por trabajar aqu¨ª??, le preguntamos. ?S¨ª, claro, me encantar¨ªa trabajar en Espa?a?. Y la ¨²ltima: ??Sigue pensando que Almod¨®var no la quiere?? ?Es un hecho. A m¨ª s¨ª que me gustar¨ªa volver a trabajar con ¨¦l pero han pasado 20 a?os y no me llama, as¨ª que no creo?. No insisteremos.