El bolero de Ghesqui¨¨re para Balenciaga
Volantes de neopreno, talles al aire, y un ejercicio de tailoring digno de cirujano, para una colecci¨®n Primavera/Verano 2013 de Balenciaga con lo mejor de ambos sexos.
Nicolas Ghesqui¨¨re es del club Miuccia Prada. De una temporada a otra sus universos est¨¦ticos est¨¢n tan alejados como comparten c¨®digos que hacen de su visi¨®n un sistema de gobierno coherente y ordenado. Cada una de sus colecciones est¨¢ m¨¢s legitimada que la anterior y la de Balenciaga Primavera/Verano 2013 viene avalada por un Crucero?cuyas bailarinas de Ravel, coreografiadas por Steven Meisel,?...
Nicolas Ghesqui¨¨re es del club Miuccia Prada. De una temporada a otra sus universos est¨¦ticos est¨¢n tan alejados como comparten c¨®digos que hacen de su visi¨®n un sistema de gobierno coherente y ordenado. Cada una de sus colecciones est¨¢ m¨¢s legitimada que la anterior y la de Balenciaga Primavera/Verano 2013 viene avalada por un Crucero?cuyas bailarinas de Ravel, coreografiadas por Steven Meisel,?andan danzando por la red. Y es que mientras a las puertas de su desfile se agolpaban chicas con sudaderas futuristas de su colecci¨®n de invierno, agotadas en sus tiendas a pesar de costar casi 2.000 euros, Nicolas defenestraba el concepto de puertas para adentro con unos dise?os, en apariencia, diametralmente alejados de ese momento Star Trek.
Los nuevos su¨¦ters son en este caso los tops cruzados que dejan el talle al aire y la novedad pasa, como hemos visto repetidamente a lo largo de estas semanas de la moda, por la inclusi¨®n de volantes como elemento predominante a la hora de aportar movimiento, acartonado y r¨ªgido seg¨²n Ghesqui¨¨re ya que los moldea sobre neopreno, a faldas asim¨¦tricas. Estas contrastan con la rectitud monacal y la precisi¨®n que impone Balenciaga a sus cuerpos de algod¨®n engomado. O a sus piezas de sastrer¨ªa con un ojo puesto en Crist¨®bal y proporciones escrupulosamente masculinizadas. Igual que sus zapatos con tac¨®n cuadrado de acero. Los estampados en esos amarillos y azules tan suyos, tan cenizos, llegan con unos vestidos plisados alternando silicona o de piel laminada a l¨¢ser dibujando hojas y ramas. ?O quiz¨¢ son espinas? Las mismas que ha pulido de las coronas que lucen algunas de sus modelos a modo de diadema.