Juguetes er¨®ticos 2.0: bienvenida a la nueva dimensi¨®n org¨¢smica
Se manejan desde el m¨®vil, cambian su forma, se activan cuando leemos literatura er¨®tica y hasta pueden dejar embarazada a su usuaria.
La industria del juguete er¨®tico es un negocio floreciente que ha hecho que las mentes m¨¢s brillantes abandonen otros campos para pasarse a dise?ar el orgasmo perfecto. Aparatos creados para el placer que, tal vez un d¨ªa, lleguen a desarrollar empat¨ªa o se anticipen a nuestros deseos. De momento no sabemos si las m¨¢quinas ser¨¢n capaces de superar al mejor de los amantes, pero lo que muchas hemos comprobado, sin necesidad de que la ciencia avance m¨¢s en su conocimiento, es que ya hay muchos humanos que en la cama se comportan como m¨¢quinas, y no precisamente de ¨²ltima generaci¨®...
La industria del juguete er¨®tico es un negocio floreciente que ha hecho que las mentes m¨¢s brillantes abandonen otros campos para pasarse a dise?ar el orgasmo perfecto. Aparatos creados para el placer que, tal vez un d¨ªa, lleguen a desarrollar empat¨ªa o se anticipen a nuestros deseos. De momento no sabemos si las m¨¢quinas ser¨¢n capaces de superar al mejor de los amantes, pero lo que muchas hemos comprobado, sin necesidad de que la ciencia avance m¨¢s en su conocimiento, es que ya hay muchos humanos que en la cama se comportan como m¨¢quinas, y no precisamente de ¨²ltima generaci¨®n. Mientras los robots sexuales se perfeccionan y preparan para su desembarco, los juguetes er¨®ticos son cada d¨ªa m¨¢s complacientes, se ajustan a todos los tama?os, aprenden nuevos movimientos y hasta pueden traer descendencia. S¨ª, como lo oyen.
En pareja y con manos libres
Todos tenemos bastante claro el uso de los juguetes sexuales en solitario, pero la cosa se complica cuando se utilizan en pareja. Generalmente, sirven para estimular el cl¨ªtoris durante la penetraci¨®n, ya que la mayor parte de las mujeres no llegan al orgasmo si no se le dora un poco la p¨ªldora a su ¨®rgano del placer. El problema, hasta ahora, era que la m¨¢quina necesitaba de alguien que la manejara y dirigiera al lugar preciso, y eso restaba atenci¨®n para el resto de la faena. Si ya durante el sexo hay que ocuparse de uno mismo y del otro, repartir nuestro empe?o con un tercero con movilidad reducida, el vibrador, impide la desconexi¨®n y el descontrol, que son los caminos que nos llevan al placer supremo.
Esta misma idea era la que ten¨ªan en mente dos mujeres, Alexandra Fine y Janet Lieberman, cuando decidieron crear un aparato que se pudiera usar, no antes o despu¨¦s del coito, como era costumbre, sino durante, pero que adem¨¢s fuera aut¨®nomo. As¨ª dieron con Eva, de Dame, un vibrador de cl¨ªtoris con forma de robot con brazos. Las extremidades hacen que este aparato pueda sujetarse a los labios mayores de la vagina y hacer su trabajo mientras la mujer hace el suyo. Durante la penetraci¨®n, Eva estimula tambi¨¦n los genitales masculinos, con lo que se matan dos p¨¢jaros de un tiro. Como la felicidad completa nunca existe, algunas veces y si los movimientos son muy contundentes, este vibrador puede caerse, pero eso es algo en lo que sus creadoras est¨¢n trabajando.
Con la forma y funciones que uno desea
¡°Una misma forma no satisface a todos¡±. Con esta m¨¢xima como leit motiv, la compa?¨ªa inglesa Mystery Vibe, ha desarrollado el primer juguete er¨®tico del mundo cuya forma se adapta a cada usuario, y lo ha bautizado como Crescendo. Un vibrador flexible que adquiere la forma que se le quiera dar pero que, adem¨¢s, se puede programar para que haga las funciones que se desean, mediante una app que se descarga en el m¨®vil.
Crescendo tiene una larga investigaci¨®n a sus espaldas dentro del campo de la nanotecnolog¨ªa, que le permite tener seis vibradores que pueden combinarse entre si para hacer saltar las chispas. Se puede programar el n¨²mero, intensidad, forma y duraci¨®n de la vibraci¨®n; la temperatura y se pueden descargar nuevos tipos de vibraciones, accediendo a la p¨¢gina web de la marca. En un futuro no muy lejano, sus creadores anuncian que los movimientos de Crescendo se podr¨¢n sincronizar con la m¨²sica o con otros aparatos que haya en la habitaci¨®n para crear una atm¨®sfera y experiencia global. El problema entonces ser¨¢ aprender a manejarlo. Las mentes de esta industria deber¨ªan tener en cuenta que si el juguete se vuelve muy dif¨ªcil de usar, deja entonces de ser algo entretenido para convertirse en una tarea m¨¢s. O solo es apto para los inform¨¢ticos, y seg¨²n la leyenda urbana, ¨¦stos no parecen estar muy interesados en el sexo. ?O s¨ª?
?Y si en vez de vibraci¨®n empezamos a hablar de rotaci¨®n o pulsaci¨®n?
Los primeros vibradores produc¨ªan un ruido infernal, bajo el pretendido lema de ¡°discreto y silencioso¡±. Luego fueron eliminando el barullo e incorporando movimientos menos mon¨®tonos. Los expertos en jugueter¨ªa apuntan a que la vibraci¨®n pronto ser¨¢ un recuerdo vintage en el mundo de las maquinas sexuales. Fun Factory la marca alemana, fue una de las primeras en apostar por la pulsaci¨®n. Un movimiento que simula, en muy peque?a escala todav¨ªa, las arremetidas de un actor porno. Con el tiempo se espera tambi¨¦n que el propio juguete se coloque a la entrada de la vagina y ¨¦l mismo vaya abri¨¦ndose paso. A la espera de tan feliz acontecimiento, el ¨²ltimo reto?o de la marca germana, interesada en cambiar el ritmo y movimiento de nuestra vida sexual, se llama Bi Stronic Fusion, que podr¨ªa optar al t¨ªtulo del amante perfecto. Bi combina la pulsaci¨®n en su cuerpo principal, con la vibraci¨®n en el estimulador de cl¨ªtoris, con un total de 64 formas distintas de disfrutar de estos dos tipos de movimientos, de forma separada o conjunta. Pero eso no es todo, el brazo que se ocupa de nuestro botoncito del placer cuenta, adem¨¢s de un ap¨¦ndice redondeado para el cl¨ªtoris, con unas peque?as alas para estimular los labios vaginales. Y por si esto no bastara, est¨¢ anat¨®micamente dise?ado para estimular el punto G. Un posible inconveniente es que tras probar la nueva m¨¢quina made in Germany, la verdadera naturaleza masculina se nos antoje de todo, menos tentadora.
Si la vibraci¨®n y la pulsaci¨®n no conducen al ¨¦xtasis, no hay que desanimarse. Todav¨ªa podemos recurrir a la rotaci¨®n, que est¨¢ m¨¢s acorde con los movimientos del planeta. La marca Lelo, pensando en las m¨¢s exigentes, ha sacado Ina Wave, un juguete que vibra en la zona del cl¨ªtoris y masajea el punto G ?con un movimiento de rotaci¨®n, algo por lo que la marca sueca est¨¢ apostando ¨²ltimamente. Las que a¨²n no hayan descubierto esa misteriosa letra pueden tener la oportunidad de experimentar el alfabeto completo. Aunque en cuesti¨®n de vibradores cada mujer es un mundo y las hay que, tras tanta tecnolog¨ªa, lo que m¨¢s les pone es un dildo de acero, fr¨ªo, duro e inerte.
Un vibrador que se activa con la lectura de textos er¨®ticos
Decir que un relato er¨®tico puede hacernos ¡°vibrar¡± dejar¨¢ muy pronto de ser una met¨¢fora para convertirse en realidad, gracias a un nuevo juguete, apodado Little Bird, de nacionalidad francesa y que saldr¨¢ al mercado en marzo. El aparato, con una clara vocaci¨®n intelectual, se maneja desde el m¨®vil y se conecta a una app gratuita de lectura v¨ªa Bluetooth, que se puede bajar al tel¨¦fono o a una tableta. Una vez sincronizados ambos dispositivos, se puede empezar a disfrutar de la literatura. Cuando el relato empieza a ponerse interesante, basta con dar un peque?o golpecito a la pantalla para que el vibrador empiece a funcionar. El ritmo de cada texto est¨¢ conectado con las 10 diferentes velocidades de vibraci¨®n del aparato, que cuenta con una autonom¨ªa de una hora y media.
No sabemos todav¨ªa si el invento se vender¨¢ en las sex shops, en las librer¨ªas o en ambos establecimientos. Lo que est¨¢ claro es que si a alguna le quedaba todav¨ªa alg¨²n prejuicio por ir en busca del orgasmo mec¨¢nico, este invento le permite disfrazar su aversi¨®n con la, siempre reconfortante, excusa de la cultura. Como apunta en el v¨ªdeo de lanzamiento Chistel Le Coq, fundadora de la empresa que ha dado vida a este artilugio, B. Sensory, y que consigui¨® materializar el proyecto gracias a un crowdfunding, ¡°como gran fan¨¢tica de la literatura er¨®tica, tuve el deseo de unir el poder de las palabras con el potencial de los servicios de conexi¨®n para crear una nueva forma de leer y divertirse, sola o en pareja¡±.
De momento, en lo que a la biblioteca se refiere, ya est¨¢n los principales t¨ªtulos de las m¨¢s importantes editoriales francesas de novela er¨®tica y pronto se subir¨¢n obras en ingl¨¦s, aunque no se habla a¨²n de libros en castellano. Pero existe ya una convocatoria para que los escritores del g¨¦nero env¨ªen su material, lo que crea ya una nueva especializaci¨®n o salida para los que se dedican al arte de juntar palabras. ?A qu¨¦ te dedicas?, ¡°pues mira, yo escribo para un vibrador¡±.
El primer juguete er¨®tico que puede dejarte embarazada
Si a un dildo le hacemos un peque?o agujero y le metemos dentro un tubo con un sencillo sistema de propulsi¨®n manual tendremos un aparato que eyacula diferentes sustancias. Si una de esas sustancias es semen, el juguete tendr¨¢ la capacidad de dejar embarazada a su usuaria. Con esta simple pero compleja idea, Stepahie Berman, una experta en salud reproductiva de Boston, cre¨® el Semenette, pudo dejar embarazada a su mujer y, en 2014, vio nacer a su primera hija, Isabella. Los m¨¦todos tradicionales de inseminaci¨®n artificial no convenc¨ªan a esta pareja de lesbianas, ya que seg¨²n Berman confesaba a la revista Refinery29, ¡°las ¨²nicas opciones eran acudir a una cl¨ªnica o utilizar un tubo de inseminaci¨®n. Empezamos usando esos m¨¦todos, pero nos dimos cuenta que era algo horrible. No hay nada rom¨¢ntico, sexy o divertido en el hecho de tratar de dejar embarazada a tu mujer con un tubo de inseminaci¨®n¡±.
El m¨¦todo est¨¢ especialmente pensado para parejas homosexuales u hombres con disfunci¨®n er¨¦ctil; pero adem¨¢s de para inseminar, muchos lo utilizan como simple divertimento, llenando el tubo de diferentes l¨ªquidos para recrear la sensaci¨®n de eyaculaci¨®n. Lubricante es el m¨¢s utilizado, especialmente la marca Spunk Lube, con un color y textura similar al fluido masculino; pero ya circulan por Internet recetas para hacer ¡°semen casero¡± con yogurt y otros ingredientes, para los m¨¢s atrevidos o inconscientes, que no se preocupan demasiado en lo que se meten al cuerpo.
Seg¨²n Marta Moschetta, ginec¨®loga y especialista en t¨¦cnicas de reproducci¨®n asistida del centro de fertilidad y gen¨¦tica, Procrea Tec, en Madrid, ¡°aunque a nivel mec¨¢nico Semenette pueda funcionar, el peligro de utilizarlo para quedarse embarazada es que no se lleva a cabo un estudio del donante de semen, de su historial y estado de salud, algo que es primordial en una cl¨ªnica de fertilidad. En Internet se vende semen y tambi¨¦n est¨¢ la opci¨®n de pagar a un chico para que nos venda sus espermatozoides, pero es algo muy arriesgado. Adem¨¢s, en Europa la ley exige que el donante sea an¨®nimo, aunque en EEUU, que es donde m¨¢s se est¨¢ utilizando este aparato, la regulaci¨®n es distinta y no pide el anonimato¡±.