Viajar sin pisar un restaurante
Los viajeros buscan nuevas formas de hacer turismo que les permita descubrir los lugares desde el punto de vista local. Pocas cosas unen m¨¢s que un plato y una conversaci¨®n.
Con el auge del turismo internacional que se vive desde hace unos a?os, especialmente en ciudades grandes como Madrid o Barcelona, cada vez se hace m¨¢s dif¨ªcil para los visitantes el encontrar la aut¨¦ntica esencia de los lugares a los que viajan. Si no se han recibido recomendaciones de lugare?os o personas que ya hayan estado previamente, es bastante probable acabar conociendo s¨®lo las partes que integran la ¡°marca¡± que la ciudad proyecta al exterior.
Uno de los puntos m¨¢s espinosos es el de la gastronom¨ªa. Encontrar restaurantes en los que disfrutar de comida local de calidad y sin...
Con el auge del turismo internacional que se vive desde hace unos a?os, especialmente en ciudades grandes como Madrid o Barcelona, cada vez se hace m¨¢s dif¨ªcil para los visitantes el encontrar la aut¨¦ntica esencia de los lugares a los que viajan. Si no se han recibido recomendaciones de lugare?os o personas que ya hayan estado previamente, es bastante probable acabar conociendo s¨®lo las partes que integran la ¡°marca¡± que la ciudad proyecta al exterior.
Uno de los puntos m¨¢s espinosos es el de la gastronom¨ªa. Encontrar restaurantes en los que disfrutar de comida local de calidad y sin que la cuenta del men¨² se eleve a niveles propios de M¨®naco, es ligeramente complicado. Y si no, que se lo pregunten a todos esos visitantes que acabaron comiendo paellas congeladas en una terraza de la Rambla de Barcelona con una jarra de sangr¨ªa de dudoso origen.
Precisamente por estas complicaciones, hay comunidades online que han ganado popularidad en los ¨²ltimos a?os, de la mano de la tendencia del concepto llamado ¡°consumo colaborativo¡±. En la l¨ªnea de Airbnb o Blablacar (por poner dos de los ejemplos m¨¢s conocidos, aunque hay cientos) estas plataformas ofrecen la oportunidad a los viajeros de disfrutar de gastronom¨ªa de calidad mientras comparten mesa y experiencias con anfitriones locales.
Una de las que m¨¢s funciona en Espa?a es EatWith. Fundada en Tel Aviv en 2012 (actualmente sus oficinas principales est¨¢n, c¨®mo no, en san Francisco), la empresa surgi¨® de una experiencia de uno de sus fundadores Guy Michlin en un viaje a Creta (Grecia). All¨ª se aloj¨® con una familia local, con los que contact¨® a trav¨¦s de un amigo. Adem¨¢s de recibir consejos de sitios que visitar, Michilin pudo disfrutar de la verdadera gastronom¨ªa local y eso hizo que se le encendiera la bombilla de la idea. Cuando volvi¨® a casa le propuso a su amigo Shemer Schwarz crear una empresa que permitiese a viajeros de todo el mundo disfrutar de una experiencia gastron¨®mica como la suya. As¨ª naci¨® la plataforma, que actualmente est¨¢ presente el 90 ciudades en todo el mundo.
?Qu¨¦ te puedes encontrar?
Los anfitriones que ofrecen sus servicios en la plataforma suelen ser de dos tipos. Por un lado, est¨¢n los cocineros profesionales que quieren salirse de los protocolos de los restaurantes al uso, ofreciendo sus platos de manera m¨¢s cercana al comensal. Y por otro, est¨¢n los cocineros no profesionales que quieren invitar a su mesa a personas que deseen disfrutar en comunidad el placer de una buena cocina casera.
Nico & Xavi pertenecen a la primera categor¨ªa de anfitriones (o hosts, como se les denomina en EatWith). Ambos vienen del sector de la alta gastronom¨ªa y han trabajado en restaurantes galardonados con las famosas estrellas Michel¨ªn. Actualmente tienen un estudio gastron¨®mico en el barrio del Raval llamado Hidden Factory Barcelona en el que organizan desde sesiones de fotograf¨ªa gastron¨®mica hasta exposiciones de arte. ¡°Dentro de esto, pues decidimos trabajar con EatWith y tenemos una peque?a cocinita abierta¡±, explica Xavi. ¡°Unas dos o tres noches por semana tenemos cenas. Son grupos reducidos y cocinamos, charlamos con ellos, les explicamos lo que vamos haciendo¡¡±
Para ellos lo mejor de la experiencia es que ¡°viniendo del mundo profesional, no tiene nada que ver con un restaurante. La gente que viene no son estrictamente clientes, son invitados. Evidentemente cobramos un dinero, porque la comida hay que pagarla, pero el trato es distinto. La gente est¨¢ muy predispuesta a compartir todo lo bueno que tiene una buena mesa: no s¨®lo la comida, sino tambi¨¦n el lugar y el ambiente¡±. En sus men¨²s se aprecia su experiencia profesional, que es la de la alta cocina, pero utilizan como base la gastronom¨ªa tradicional, espa?ola y catalana.
EatWith Xavi & Nico from Ilan Benatar on Vimeo.
Pablo Galv¨¢n es un ejemplo del segundo grupo, el de los amantes de la cocina. ¡°Hago cocina bastante tradicional pero le doy una vueltita. Ahora mismo estaba promocionando un men¨² de oto?o de crema de calabaza, un pescado con chucrut con col y lombarda, timbal de cordero y crumble de manzana con crema de yogurt¡±, comenta. Conoci¨® la plataforma a trav¨¦s del boca a oreja de toda la vida: ¡°A trav¨¦s de amigos vi el concepto y me enamor¨®. Es la libertad total de poder hacer tu comida como quieres, cuando quieres y con quien quieres¡±.
Este tipo de actividades dan pie a todo tipo de an¨¦cdotas. Xavi recuerda entre risas una noche que ten¨ªan ¡°a unos directores de hotel de lujo y se nos fue la luz un s¨¢bado a las nueve y media de la noche, cuando aqu¨ª todo lo que tenemos es el¨¦ctrico. Total que les dimos la vuelta a los platos calientes que ten¨ªamos en el men¨², como el arroz negro con vieiras: pues fuera el arroz y cortamos las vieiras muy finitas y las hicimos como ceviche. La salsa la calentamos en un cazo con un soplete de estos de quemar la crema catalana y as¨ª¡¡±. Los tres entrevistados hacen un balance claramente positivo de su experiencia dentro de la plataforma. S¨®lo Pablo apunta un detalle: ¡°Lo peor es fregar despu¨¦s¡±.
Otro de los platos de Pablo Galv¨¢n.
Cortes¨ªa de Eat With