¡®Sadvertising¡¯, ?cuando acabar¨¢ la moda de los anuncios tristes?
El potencial que poseen los spots lacrim¨®genos demuestra que estamos viviendo en una burbuja en torno a lo emocional en todos los ¨¢mbitos.
Est¨¢s tan tranquilo viendo la tele en tu sof¨¢. No te ocurre nada que no sea la vida y sus problemas. Quiz¨¢ picoteas unas patatas fritas o bebes t¨¦, depende de tu estilo de vida. ?Solo han pasado 20 segundos pero, de pronto, te duele el pecho y est¨¢s llorando. Puede que solo llores poquito o que aproveches para desahogarte con una buena llantina, ahora depende de lo emotivo que seas y de las circunstancias te rodeen. ?Qu¨¦ ha pasado en entre esos dos momentos? ?Pues ha pasado un anuncio. En concreto, un anuncio cuya estrategia es lo que los publicistas llaman ¡°sadvertising¡± o, lo que es lo mismo...
Est¨¢s tan tranquilo viendo la tele en tu sof¨¢. No te ocurre nada que no sea la vida y sus problemas. Quiz¨¢ picoteas unas patatas fritas o bebes t¨¦, depende de tu estilo de vida. ?Solo han pasado 20 segundos pero, de pronto, te duele el pecho y est¨¢s llorando. Puede que solo llores poquito o que aproveches para desahogarte con una buena llantina, ahora depende de lo emotivo que seas y de las circunstancias te rodeen. ?Qu¨¦ ha pasado en entre esos dos momentos? ?Pues ha pasado un anuncio. En concreto, un anuncio cuya estrategia es lo que los publicistas llaman ¡°sadvertising¡± o, lo que es lo mismo, ?la apelaci¨®n a las emociones tristes como ruta para conectarnos con una marca.
Hace pocos d¨ªas, el medio especializado Puro Marketing analizaba esta tendencia que ya lleva unos a?os en nuestros televisores y apuntaba los dos motivos esenciales de su ¨¦xito: la burbuja en torno a lo emocional que estamos viviendo en todos los ¨¢mbitos y el potencial que poseen los spots lacrim¨®genos como elemento que luego compartiremos en las redes sociales.
A partir de esas dos coordenadas, es m¨¢s sencillo entender por qu¨¦ la tristeza ha sustituido al humor en los comerciales, con la falta que nos hace este ¨²ltimo. Pero tambi¨¦n es l¨®gico haber ca¨ªdo en el juego de convertir en virales -y de ah¨ª en predominantes- anuncios que abren con la perfecci¨®n de una llave maestra nuestros sentimientos. Porque, como ocurre con las palabras, los relatos audiovisuales liberan espacios emocionales que tienen efectos. La tristeza, por ejemplo, suele fomentar el auto examen constructivo y tambi¨¦n act¨²a como una llamada de ayuda que despierta la atenci¨®n de los dem¨¢s.
Y, aunque cada uno tenga su m¨¦todo, de un momento de triste casi todos hemos aprendido a sobreponernos a trav¨¦s de ideas bonitas como la revalorizaci¨®n de las peque?as cosas de la vida o el compromiso con nuestra esfera afectiva o con valores como la seguridad. De modo que apenas tenemos que esforzarnos en fijar el mensaje: la identificaci¨®n y, por tanto, el ejercicio de reflexi¨®n es autom¨¢tico cuando vemos historias como estas, que no solo consiguen hacernos llorar sino modificar nuestras conductas.
Aqu¨ª dos ejemplos recientes:
1. Supermercados Edeka
2. Super Bowl, accidentes infantiles.
https://www.youtube.com/watch?v=TRVslkan08U
Pero, a pesar de esa l¨®gica, cualquiera que entienda c¨®mo funciona una moda se preguntar¨¢ si la burbuja de las emociones, en este caso las melodram¨¢ticas, no estar¨¢ llegando a su fin habida cuenta de que el sadvertising lleg¨® con la crisis, esa que no tenemos claro cuando va a acabar. Es decir, ?llevamos unos ocho a?os llorando!
David Alameda, profesor de Gesti¨®n de Marcas de la Upsa explica para S Moda que es posible que los anuncios tristes pasen de moda tras la saturaci¨®n de los ¨²ltimos a?os, pero en ning¨²n caso su esencia: ¡°Ha sido una moda, que es un reflejo de una tendencia. Pero la tendencia contin¨²a y ?se traduce en que las marcas ya saben que tienen que integrarse en la vida cotidiana de la gente, participar en sus intereses y preocupaciones y construir relatos significativos en tanto que relatos de la dimensi¨®n personal del consumidor. A partir de ah¨ª, s¨ª creo que la moda pasar¨¢ y no solo porque llegue el final de la crisis, sino porque la crisis nos ha cambiado y una de las lecciones que nos deja es la falta de confianza en las instituciones, en los pol¨ªticos, incluso en otras personas. Nadie nos va a ayudar de manera que en alg¨²n momento habr¨¢ que dejar de llorar y salir adelante¡±, explica.
Si hay una industria capaz de adelantarse a lo que queremos es la publicidad. As¨ª que alguna evidencia estar¨¢n teniendo ya sus profesionales de lo complicado que es salir adelante mientras se llora. Eso parece, viendo algunos brotes verdes recientes que parecen decirnos que podemos salir adelante entreteni¨¦ndonos con cuestiones mundanas como el f¨²tbol.
https://www.youtube.com/watch?v=y46RrHfdan4
O bes¨¢ndonos con pasi¨®n ?por los suelos, los asientos del coche o los t¨²neles de lavado. Pero que no nos hagan llorar m¨¢s, por favor, que ya hemos estado suficientemente tristes.
https://www.youtube.com/watch?v=bssGKLnYYhI