Oda al ¡®guiri¡¯: por qu¨¦ la moda se rinde a la simpleza de la ¡®camiseta-souvenir¡¯
Culpa a Vetements o a los desfiles de grandes firmas: el merchandising para turistas es el nuevo objeto de deseo de los popes de la industria.
En la redacci¨®n de la edici¨®n estadounidense de Vogue vivieron un peque?o cisma hace unos d¨ªas. La culpa la tuvo una camiseta que, lejos de ser una de las creaciones del dise?ador del momento y/o tener un precio indecente, era simplemente un souvenir de Georgia valorado en 15 d¨®lares (unos 13 euros). Fue el regalo que una de las redactoras compr¨® a la editora de moda Marjon Carlos (abajo posando en Instagram con la camiseta de la discordia) como recuerdo de su viaje a Tiflis para cubrir la ...
En la redacci¨®n de la edici¨®n estadounidense de Vogue vivieron un peque?o cisma hace unos d¨ªas. La culpa la tuvo una camiseta que, lejos de ser una de las creaciones del dise?ador del momento y/o tener un precio indecente, era simplemente un souvenir de Georgia valorado en 15 d¨®lares (unos 13 euros). Fue el regalo que una de las redactoras compr¨® a la editora de moda Marjon Carlos (abajo posando en Instagram con la camiseta de la discordia) como recuerdo de su viaje a Tiflis para cubrir la semana de la moda de la capital georgiana. La cosa se puso fea cuando el resto del equipo se quej¨® por haberse quedado sin la suya. ?Por qu¨¦ iban a querer una camiseta de manga corta con la palabra ¡®Georgia¡¯ y la bandera del pa¨ªs? Muy f¨¢cil: porque est¨¢ de moda.
Despu¨¦s del boom que vivieron estas prendas all¨¢ por 2012, la pasarela ha rendido homenaje a las camisetas-souvernir las ¨²ltimas temporadas. Aqu¨ª varias pruebas: a) En su colecci¨®n Crucero 2017 Chanel apost¨® por el mensaje ¡®Cuba Libre¡¯ estampado en camisetas de manga corta con una est¨¦tica similar a las que podr¨ªamos encontrar en cualquier puesto de la playa; b) Dolce & Gabbana grab¨® ¡®I Love Italy¡¯ en los tops de su colecci¨®n para esta temporada y recuper¨® los paisajes del pa¨ªs a modo de print; c) Vetements, la firma del momento, ha popularizado su camiseta ¡®Antwerpen¡¯ (Amberes en neerland¨¦s), un homenaje a la ciudad en la que Demna Gvasalia, una de las cabezas pensantes de la firma, se form¨® como dise?ador.
Por si estas evidencias de la fiebre por las ¡®camisetas para turistas¡¯ no fueran suficientes, tenemos m¨¢s. La firma Off-White se he empe?ado en rendir homenaje al estado de Nebraska y se ha atrevido a ironizar a¨²n m¨¢s con su lema ¡®Florida Tourist¡¯ (¡®turista de Florida¡¯), la marca polaca de regusto underground Misbhv ¨Ca la que es fiel Sita Abell¨¢n¨C triunfa con sus sencillas camisetas con la palabra ¡®Warszawa¡¯ (Varsovia en castellano) como ¨²nico adorno y los modelos tampoco se resisten a llevar este tipo de prendas. El maniqu¨ª espa?ol Jacobo Sol¨ªs da cuenta de ello haciendo gala de una camiseta de Sevilla en su cuenta de Instagram y el ¨¢ngel de Victoria¡¯s Secret Stella Maxweel hace lo propio presumiendo de dise?o ¡®texano¡¯. Y, claro, ni las popes del street style ni las egoblogueras como Chiarra Ferragni han podido escapar al influjo de las camisetas para viajeros. Homenajes a las islas japonesas Okinawa, referencias a California, Korea o Hollywood¡ todo vale con tal de apuntarse a la microtendencia del momento.
Es cierto que en las tiendas low cost siempre han abundado los dise?os veraniegos protagonizados por Los ?ngeles, San Francisco o Nueva York (esta temporada Zara incluye a la japonesa Osaka en la lista), pero esta vez, y a pesar de las propuestas de pasarela, la cosa tiene m¨¢s que ver con atreverse a llevar las verdaderas camisetas que venden en las tiendas de recuerdos acerc¨¢ndose peligrosamente a los lemas de ?Estuve en Benidorm y me acord¨¦ de ti? o ?Keep Calm and love Ibiza?. ?Tocar¨¢ rescatarlas del armario para (intentar) lucirlas con dignidad como algo m¨¢s que un uniforme improvisado para limpiar el polvo?
¡°Estas camisetas-souvenir, ya sean de Canal Street o de alg¨²n destino lejano, son una forma de mostrar sentido del humor o de descontextualizar un look que podr¨ªa ser demasiado ¡®lady¡¯ o sofisticado haci¨¦ndolo m¨¢s juvenil?, explica la periodista Alessandra Codinha. Por eso las expertas en esto de quitar rigidez a los estilismos no dudan en mezclarlas con botines de tac¨®n, chaquetas de tweed, bolsos de un porr¨®n de euros o faldas l¨¢piz.
En un momento en el que llevar el logo de una marca que no vistes marca la pauta, en el que it girls como Miroslava Duma no se separan de su camiseta de Coca-Cola y, en definitiva, la iron¨ªa mueve las mentes creativas m¨¢s respetadas de la industria, no es de extra?ar que la ¨²ltima extravagancia de la moda pase por acoger el merchandising veraniego m¨¢s denostado para darle la vuelta y convertirlo en codiciado objeto de deseo.?Transformar lo vulgar en algo extradorinario es la gran aficci¨®n de la moda actual y subir a la pasarela elementos tomados de la calle, su arma para conseguirlo. En todo esto la est¨¦tica pasa a un segundo plano y el fe¨ªsmo, acompa?ado por la nostalgia, vuelve a mover los hilos. Y al final, todo encaja: el verano pasado reinaron las chanclas de guiri y este lo har¨¢n las camisetas de turista.