Me han prometido un ascenso pero de momento solo trabajo el doble: c¨®mo plantear a la empresa que m¨¢s responsabilidad es m¨¢s dinero

El ¨¢mbito laboral est¨¢ experimentando numerosos cambios derivados de la pandemia, lo que ocasiona tambi¨¦n m¨²ltiples dudas entre los trabajadores. Donde antes se vislumbraba oportunidad o crecimiento ahora se intuye incertidumbre o recortes.

En este contexto, muchas personas han experimentado c¨®mo se cancelaban proyectos o desaparec¨ªan puestos de nueva creaci¨®n a los que aspiraban. En otras ocasiones, la paralizaci¨®n de los procesos internos o la demora en la toma de decisiones han hecho que personas a las que se les hab¨ªa prometido una promoci¨®n ¨Cy cuyas responsabilidades han aumentado ...

El ¨¢mbito laboral est¨¢ experimentando numerosos cambios derivados de la pandemia, lo que ocasiona tambi¨¦n m¨²ltiples dudas entre los trabajadores. Donde antes se vislumbraba oportunidad o crecimiento ahora se intuye incertidumbre o recortes.

En este contexto, muchas personas han experimentado c¨®mo se cancelaban proyectos o desaparec¨ªan puestos de nueva creaci¨®n a los que aspiraban. En otras ocasiones, la paralizaci¨®n de los procesos internos o la demora en la toma de decisiones han hecho que personas a las que se les hab¨ªa prometido una promoci¨®n ¨Cy cuyas responsabilidades han aumentado desde entonces¨C no hayan visto efectuado tal ascenso ni este se haya traducido en un aumento de sueldo. ?C¨®mo debemos actuar en este caso? ?Podemos renunciar a esas responsabilidades hasta que la promoci¨®n se materialice? Y, sobre todo, ?c¨®mo debemos trasladar nuestras preocupaciones a la empresa sin parecer desconsiderados en un entorno de crisis como el actual?

?La preparaci¨®n de la conversaci¨®n y la gesti¨®n de las emociones

?Antonio Pastor, doctor en Econom¨ªa de la Empresa y Finanzas, licenciado en Psicolog¨ªa y experto en gesti¨®n de conflictos explica que ¡°la base de todo es la preparaci¨®n. No hay que improvisar ni tirarse a la piscina. Hemos de pensar que la otra persona no va a tener hecha una reflexi¨®n sobre este tema que le planteamos, debemos llevar preparadas todas las razones por las que creemos, por ejemplo, que se nos debe subir el sueldo con este ascenso. Debemos anticipar todas las situaciones que puedan surgir durante la conversaci¨®n para ofrecer una soluci¨®n, porque aqu¨ª quien tiene el problema soy yo, no la otra parte¡±.

Pastor que ejerce como profesor en la UDIMA (Universidad a Distancia de Madrid) tambi¨¦n considera clave la gesti¨®n de las emociones. ¡°Teniendo en cuenta que partimos de la buena f¨¦ de las partes, la ¨²nica forma de abordar este conflicto es hablando y definiendo claramente nuestra postura. Se puede plantear como: ¡°Me gustar¨ªa hacerme una idea¡±, ¡°No s¨¦ si esto se est¨¢ demorando por algo o si hab¨¦is cambiado de idea¡±¡­ pero en todo momento debemos ponernos en el lugar de la otra persona, porque nuestro interlocutor tambi¨¦n va a estar inc¨®modo. Tengo que saber gestionar mis emociones y llevar preparadas alternativas¡±, recuerda el experto en mediaci¨®n.

C¨®mo elegir el mejor momento para hablar?

?¡°Nunca es un buen momento¡±, se?ala Buenaventura del Charco, psic¨®logo y profesor invitado de la Universidad de Granada? ¡°Es como decirle a tu pareja ¡°tenemos que hablar¡± o ir al dentista: es algo doloroso y siempre nos apetece dejarlo estar, pero eso s¨®lo sirve para que vaya a peor y al final explotemos y lo digamos de la peor forma posible o cuando no viene a cuento. Por eso, creo que debemos ser leales a nosotros mismos, comprometernos con ello y plantearlo de forma franca y sincera. Es as¨ª como se construye un clima de comunicaci¨®n veraz con la empresa y como a nivel individual, construimos nuestra autoestima y nuestra confianza en nosotros mismos (variables fundamentales no s¨®lo para el bienestar, sino tambi¨¦n para nuestro desempe?o laboral)¡±, recuerda el psic¨®logo.

En la misma l¨ªnea se pronuncia Pastor, quien recomienda a aquellas personas que practican mindfulness u otras t¨¦cnicas de atenci¨®n plena, ponerlas en marcha unos minutos antes de enfrentarse a una conversaci¨®n de este tipo que nos incomoda: ¡°Entrar en la entrevista con los sentidos orientados, sonriente, ser consciente del objetivo que queremos lograr y crear un clima positivo para conseguirlo. Es muy importante que la otra persona no se sienta agredida o m¨¢s inc¨®moda de lo normal para evitar que se quiera quitar de en medio este tr¨¢mite. Es decir, tengo que conseguir mantener un clima lo suficientemente confortable para que la otra persona no rompa la comunicaci¨®n r¨¢pidamente¡±.

No plantear ¨®rdagos

Si una vez que hemos tomado la iniciativa, hemos hablado con la empresa, y nos confirman que, tanto el ascenso como la mejora en el sueldo, van a demorarse un tiempo m¨¢s ?podr¨ªamos plantear que preferimos, por el momento, no asumir esas responsabilidades? El psic¨®logo se?ala que en ¡°esta situaci¨®n es importante que, por encima de todo, seamos honestos con nosotros mismos: ¡°?Me merece la pena aguantar el tir¨®n un tiempo hasta que pueda materializarse?¡± ¡°?Cu¨¢nto tiempo estoy dispuesto a hacerlo?¡±. No creo que haya un ¡°lo correcto¡± para todos, sino que cada persona debe ser honesta con aquello que es congruente consigo mismo y c¨®mo se siente¡±.

El experto en gesti¨®n de conflictos explica que tambi¨¦n tenemos que ser conscientes del poder de negociaci¨®n de cada persona dentro de la empresa y cu¨¢nto se cotiza nuestro perfil dentro de ella: ¡°Si mi puesto es f¨¢cilmente reemplazable, no ser¨ªa conveniente plantear ning¨²n ¨®rdago¡±, indica Pastor. ¡°Otra cosa es que ese tipo de tareas nuevas que estoy asumiendo tengan unos costes extras. Entonces s¨ª que se puede plantear, por ejemplo, que las nuevas responsabilidades est¨¢n exigiendo unos gastos que no se ten¨ªan antes y que al empleado le cuesta asumir¡±.

Qu¨¦ ocurre si estoy contento en la empresa pero no quiero ascender

?Hoy en d¨ªa es habitual que, en ciertas empresas, se exija a los trabajadores con un determinado grado de antig¨¹edad que vayan ascendiendo paulatinamente. Una realidad que no siempre? resulta agradable para todos los empleados, que pueden estar satisfechos con el nivel alcanzando y no se ven en un puesto de mando. La cuesti¨®n aqu¨ª ser¨ªa c¨®mo plantearle a un superior que eso no significa que hayamos perdido la motivaci¨®n por el trabajo o que nuestro compromiso con la empresa es menor.

Como explica el psic¨®logo ¡°la meritocracia y la ambici¨®n profesional no son malas o buenas per se, sino que, como todo en esta vida, depende desde d¨®nde se hacen y c¨®mo se hacen¡±. Se trata, eso s¨ª, de una decisi¨®n complicada ya que te expones a que no guste a la otra parte: ¡°Puede que esto vaya en contra de la pol¨ªtica de la empresa y generar¨¢ un malestar, pero tambi¨¦n quiz¨¢s no tiene mucho sentido quedarnos en un lugar donde no sentimos que concuerde con lo que queremos en la vida, ya que eso llevar¨¢ continuamente a la frustraci¨®n, la desmotivaci¨®n o al conflicto¡±, recuerda del Charco.